La fecundación es el proceso por el cual los gametos masculino y femenino se fusionan para formar un cigoto, el cual comienza a dividirse y desarrollarse como embrión a medida que viaja hacia el útero. Una vez en el útero, el embrión se implanta y comienza a desarrollarse a través de la formación de la placenta y el saco amniótico, creciendo durante nueve meses hasta convertirse en un feto completamente formado listo para nacer.