Este documento presenta ocho aprendizajes fundamentales que deberían garantizarse para todos los estudiantes a lo largo de su educación formal. Estos incluyen: comunicarse de manera efectiva, desarrollarse con autonomía, ejercer la ciudadanía de forma responsable, aplicar conocimientos científicos y tecnológicos, emprender con creatividad, expresarse a través del arte, valorar un estilo de vida saludable, y usar las matemáticas en la vida cotidiana.