Ethel Fenwick hizo campaña para establecer estándares en la formación y práctica de enfermería en el Reino Unido a finales del siglo XIX. Propuso que la formación de enfermeras durara de 2 a 3 años y se estandarizara, y que se mejoraran las condiciones laborales de las enfermeras. Tras décadas de lucha, en 1919 se aprobó la Ley del Registro Estatal de Enfermería en el Parlamento, lo que consolidó la enfermería como una profesión reconocida.