La úlcera péptica, gastritis y reflujo gastroesofágico son trastornos gástricos comunes. La infección por H. pylori aumenta el riesgo de úlcera péptica. El tratamiento incluye cambios en el estilo de vida, inhibidores de bomba de protones, y para H. pylori, antibióticos como claritromicina y amoxicilina. La cirugía como funduplicatura se reserva para casos refractarios o complicados.