2. GENETICA Y COMPOTAMIENTO
Genética
Parte de la biología que estudia los
genes y los mecanismos que regulan
la transmisión de los caracteres
hereditarios.
Genética del comportamiento
es una disciplina que estudia el rol de
influencias ambientales y genéticas
sobre el comportamiento, con
subespecialidades enfocadas en la
genética conductual de humanos y
animales.
Comportamiento
En psicología, comportamiento o
conducta es el conjunto de
respuestas, bien por presencia o por
ausencia, que presenta un ser vivo en
relación con su entorno o mundo de
estímulos. El comportamiento puede
ser consciente o inconsciente,
voluntario o involuntario, etc. según
las circunstancias que lo afecten.
3. Comportamiento Antisocial
Comportamiento antisocial consiste en comprobar si hay
mecanismos fisiológicos que se relacionen con él [7].
¿Acaso es el cerebro de las personas violentas diferente de las
personas que no se comportan de ese modo?
Investigaciones recientes han puesto de relieve alteraciones
estructurales que se asocian al comportamiento violento [8],
como la corteza pre frontal ventromedial, la corteza cingulada
anterior, la amígdala o la corteza pre frontal dorsal lateral.
Precisamente la lesión de algunas de estas estructuras ya se
había asociado anteriormente al comportamiento antisocial,
sobre todo en relación con el empeoramiento conductas
morales y sociales tras lesiones en la corteza prefrontal], incluso
cuando la lesión es infantil y se evalúan las consecuencias a
largo plazo.
4. FACTORES AMBIENTALES Y COMPORTAMIENTO ANTISOCIAL
Para comprender algunos rasgos asociados con el comportamiento
antisocial, como la agresividad, es necesarior el desarrollo natural de ésta.
Quizás la mejor información actual proviene de los estudios longitudinales
llevados a cabo por el grupo de Tremblay, de la Universidad de Montreal
[36]. Estos estudios, iniciados en la década de los años setenta, pusieron
de relieve que, en contra de la percepción habitual, la edad en la que los
niños son más agresivos es entre 1 y 4 años, y no durante la adolescencia
[37], como habitualmente se considera. No obstante, cuando los
adolescentes empiezan a separarse de los padres y amplían el repertorio
de amistades o compañías, intensifican la gravedad de aquellos actos
antisociales que puedan cometer [37]. También en esta línea, Widom fue la
primera investigadora que aportó evidencias empíricas acerca de los
efectos de la adversidad ambiental sobre el desarrollo del comportamiento
antisocial [38], rompiendo así el tópico que afirmaba que la violencia
genera violencia [39]. Hizo un seguimiento longitudinal de un grupo de
chicos que habían sido víctimas de maltrato. Cabe mencionar que en
todos los casos había una sentencia firme que así lo avalaba. El hecho de
haber sufrido maltrato infantil incrementaba en un 30% las posibilidades de
que los niños o niñas víctimas se convirtieran en maltratadores cuando
fueran adultos. Pero este ambiente adverso, por sí mismo, era incapaz de
explicar por qué unos niños se convertían en adultos violentos, y otros, no.
Otros factores son:
La ausencia de neurotrasmisores como son la serotonina: la falta de esta
se asocia ala agresividad e impulsividad.
Dopamina: aspectos motivación
5. SÍNDROME TURNER
El síndrome de Turner es un trastorno genético que afecta el desarrollo de
las niñas. La causa es un cromosoma X ausente o incompleto. Las niñas
que lo presentan son de baja estatura y sus ovarios no funcionan en forma
adecuada.
Otras características físicas típicas del síndrome de Turner son:
•Baja estatura, "pliegues" en el cuello que van desde la parte superior de
los hombros hasta los lados del cuello
•Línea del cabello bajo en la espalda
•Baja ubicación de las orejas
•Manos y pies inflamados
La mayoría de las mujeres con síndrome de Turner son infértiles. Corren
el riesgo de tener problemas de salud como hipertensión arterial,
problemas renales, diabetes, cataratas, osteoporosis y problemas
tiroideos.
Los médicos diagnostican el síndrome de Turner sobre la base de los
síntomas y una prueba genética. A veces se encuentra en pruebas
prenatales.
No existe una cura para el síndrome de Turner, pero hay algunos
tratamientos para los síntomas. La hormona del crecimiento suele ayudar
a que las niñas alcancen estaturas cercanas al promedio. La terapia de
sustitución hormonal puede estimular el desarrollo sexual. Las técnicas de
reproducción asistida pueden ayudar a algunas mujeres con el síndrome
de Turner a lograr embarazarse.
6. Riesgo ambiental en poblaciones genéticamente
sensibles
El dilema entre herencia y ambiente ha marcado gran parte de la historia
de la Psicología generando fuertes polémicas dentro de este campo.
Durante el siglo pasado, ambientalistas e innatistas trataron de demostrar
el predominio de un u otro aspecto en el desarrollo humano. Sin
embargo, en el presente, la mayoría de las investigaciones que intentan
comprender los procesos involucrados en el desarrollo requieren
modelos relacionales, interactivos, donde los factores genéticos y
ambientales aparecen operando en conjunción (Bleichmar, 2004).
Actualmente, la Genética del comportamiento es, sin lugar a dudas, uno
de los principales campos de investigación psicológica. Los avances
científicos producidos en los últimos años en las disciplinas de Genética
cuantitativa y molecular se han dado cuenta de que los genes juegan un
papel importante en la conducta humana, aportando, asimismo, la mejor
evidencia disponible sobre la importancia del ambiente en las diferencias
individuales de los caracteres psicológicos. En este sentido los aportes
más interesantes al estudio del ambiente en el campo de la Genética del
comportamiento
Están relacionados con tres aspectos: el impacto de las influencias
ambientales no compartidas, las correlaciones entre los genes y el
ambiente, y las interacciones genotipoambiente (Plomin, DeFries,
McClearn, & McGuffin, 2002). Este último aspecto se refiere a la
sensibilidad genética de los individuos a determinadas condiciones
ambientales, uno de los principales objetivos dentro de este campo de
investigación es identificar factores de riesgo ambiental en individuos
genéticamente sensibles.
http://www.scielo.br/pdf/pcp/v29n2/v29n2a09.pdf
7. Inducción de la pubertad en el síndrome de Turner
El síndrome de Turner es la causa más frecuente de hipogonadismo femenino. La pubertad tiene
que ser inducida farmacológicamente en más del 80% de estas niñas. Esta inducción debe
hacerse de la forma más fisiológica posible. Se recomienda iniciar esta inducción a los 12 años de
edad cronológica, con estrógenos naturales (17 beta estradiol) en dosis bajas, equivalentes a 1/10
a 1/8 de la dosis de sustitución, aumentando la dosis por peldaños y agregando luego de dos
años una progestina cíclica para generar una menstruación. En esta revisión se muestran los
diversos esquemas propuestos en la literatura así como las alternativas terapéuticas existentes en
Chile