LA ECUACIÓN DEL NÚMERO PI EN LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE PARÍS.pdf
Evaluacion santos guerra
1. EXPOSITOR: MTRO. Luis Mártin Uc
Hernández.
Evaluación Educativa
«Un enfoque práctico de la evaluación de alumnos,
profesores, centros educativos y materiales didácticos
«
Miguel Ángel Santos Guerra
San Francisco de Campeche, Cam. a 18 de marzo de
2015
2. DR. MIGUEL ÁNGEL SANTOS
GUERRA
Profesor titular de Didáctica y Organización
Escolar de la Universidad de Malaga.
Entre sus obras publicadas están: Yo educo,
tú me educas (1982), Hacer visible lo
cotidiano. Teoría y Práctica de la Evaluación
cualitativa de centros escolares (1990), La
evaluación, un proceso de diálogo,
comprensión y mejora (1993).
3. Cómo se define la evaluación.
La reflexión sobre el proceso de evaluación permite comprender la naturaleza de la
actividad docente y educativa del aula y del centro. La evaluación, como "sistemática
investigación del valor o mérito de algún objeto", obliga a preguntarse sobre qué es
precisamente mérito o valor. En el mundo de la educación, los fenómenos relativos al
valor no son tan evidentes como lo pueden ser en otros campos. Ni siquiera en el campo
del aprendizaje está claro que el número de conocimientos adquiridos sea el único criterio
de valor. Al menos, esto dejaría sin contestar cuestiones tan importantes como las
siguientes: ¿No se podrían aprender otras cosas?, ¿es eso lo que el alumno quiere
aprender?, ¿lo querría aprender por sí mismo?, ¿disfruta cuando lo aprende?, ¿para qué
le sirven esos aprendizajes?, ¿los olvidará pronto?...
Lo que se suele evaluar es el caudal de conocimientos adquiridos. No es tan fácil valorar
funciones intelectuales como la crítica, el análisis, la síntesis, la opinión, la creación, etc. Más
difícil aún es evaluar las actitudes, los hábitos, las disposiciones, los motivos. Cuando se le pide
al profesor que tenga en cuenta todas estas facetas (e incluso que haga un promedio con ellas),
se le pone en una difícil tesitura. De ahí que pida la ayuda de especialistas en la medición de
estas aptitudes y funciones (psicólogos, pedagogos, psiquiatras, etc.).
"La evaluación educativa es un proceso que, en parte, nos ayuda a determinar si lo que
hacemos en las escuelas está contribuyendo a conseguir los fines valiosos o si es
antitético a estos fines. Que hay diferentes versiones de lo valioso es indudablemente
verdad. Es uno de los factores que hace a la educación más compleja que la medicina..."
(Eisner, 1985).
4. LA EVALUACIÓN COMO DIÁLOGO.
El juicio de valor que la evaluación realiza se basa y se nutre del diálogo, la discusión y la
reflexión compartida de todos los que están implicados directa o indirectamente en la
actividad evaluada. El diálogo ha de realizarse en condiciones que garanticen la libertad de
opinión, que se cimenta en la garantía del anonimato de los informantes y en la seguridad
de que la información va a ser tenida en cuenta y utilizada convenientemente.
El diálogo se convierte así en el camino por el que los distintos participantes en el proceso
de evaluación se mueven en busca de la verdad y del valor del programa. Desde la
apertura, la flexibilidad, la libertad y la actitud participativa que sustenta un diálogo de
calidad se construye el conocimiento sobre la realidad educativa evaluada.
La evaluación así entendida se basa en la concepción democrática de la acción social. Los
destinatarios del programa dan opinión y emiten juicios sobre el valor del mismo.
"Al dar la palabra y adaptar su metodología a la vida diaria de los programas, el
evaluador reconoce que su realidad está activamente construida por los sujetos que en
ella participan, y que por lo tanto, ellos mismos pueden cambiar críticamente sus
condiciones de vida actuales"
(Angulo, 1988).
5. Si se entiende la evaluación como una simple comprobación de los
conocimientos adquiridos, se está reduciendo la ambición del proceso. De
hecho, el profesor califica según los resultados obtenidos en una prueba o
según las observaciones que ha realizado a lo largo de todo el período.
Pero también puede poner una calificación alta para animar al alumno o
una muy baja para estimularlo a que se esfuerce más. La evaluación
puede tener, pues, diversas funciones, a saber:
a) La función formativa para el aprovechamiento.
b) La función sumativa para la selección, la certificación y la responsabilidad
social.
c) La psicológica o sociopolítica para buscar la motivación e incrementar el
conocimiento.
d) La administrativa para ejercer la autoridad" (House, 1986).
Se evalúa para el alumno, para darle una información sobre su
aprendizaje, se evalúa para el profesor, para que conozca los resultados
de su acción y se evalúa para el sistema, para certificar los resultados de
los alumnos
6. Patología general de la evaluación
educativa
1. Sólo se evalúa al alumno
2. Se evalúan solamente los resultados
3. Se evalúan sólo los conocimientos
4. Sólo se evalúan los resultados directos, pretendidos
5. Sólo se evalúan los efectos observables
6. Se evalúa principalmente la vertiente negativa
7. Sólo se evalúa a las personas
8. Se evalúa descontextualizadamente
9. Se evalúa cuantitativamente
10. Se utilizan instrumentos inadecuados
11. Se evalúa de forma incoherente con el proceso de
enseñanza/aprendizaje
7. 12. Se evalúa competitivamente
13. Se evalúa estereotipadamente
14. No se evalúa éticamente
15. Se evalúa para controlar
16. Se evalúa para conservar
17. Se evalúa unidireccionalmente
18. No se evalúa desde fuera
19. No se hace autoevaluación
20. Se evalúa "distemporalmente"
21. No se hace paraevaluación
22. No se hace metaevaluación
8. MIGUEL ÁNGEL SANTOS
Universidad de Málaga
Resumen
El autor plantea en este artículo los problemas que
entrañan los procesos de la evaluación institucional
educativa en sus diversos niveles (evaluación del
alumno, de los Centros, de los programas y
Reformas…) y desde diferentes perspectivas
(ideológica, política, ética, didáctica, técnica…).
Analiza diversas disfunciones y desenfoques de la
evaluación escolar, tanto por atrofia como por
hipertrofia de algunos de los elementos, como por la
desvirtuación de su práctica y de su significado.