El documento describe los tratamientos para la isquemia miocárdica, incluyendo fármacos como nitrovasodilatadores, antagonistas de receptores β-adrenérgicos y de canales de calcio. Estos fármacos aumentan el flujo sanguíneo al corazón, reducen la demanda de oxígeno cardiaca y previenen trombosis. La aspirina y otros antiplaquetarios son útiles para prevenir infartos agudos en pacientes con angina inestable.