El documento refuta los mitos de que el agua engorda durante las comidas y favorece la retención de líquidos. Explica que tomar agua durante las comidas no es perjudicial y de hecho ayuda a saciar el apetito y prevenir la retención de líquidos. También enfatiza la importancia de verificar la veracidad de la información que se difunde a través de los medios antes de creerla y propagarla.