Ensayo realizado en equipo, en el cual se habla acerca del trabajo docente dentro de la practica docente; además de realizarlo con los aprendizajes de cada integrante del equipo, buscando llegar a la reflexión de dicho tema.
Act. 9 Ensayo la práctica educativa, un elemento necesario en la formación docente.
1. CENTRO REGIONAL DE EDUCACIÓN NORMAL
“DR. GONZALO AGUIRRE BELTRÁN”
LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PREESCOLAR
Curso:
(Optativa) Producción de textos académicos.
Docente:
Dra. Hercy Báez Cruz
Alumnas:
Xiadani Miled Galván Valdivieso #8
Rubí Vanessa González Mar #11
Claudia Zulemi Hernández Méndez #14
Yessica Johanna Parada Pérez #20
6to Semestre Grupo “B”
2. La práctica educativa, un elemento necesario para la formación docente.
Actualmente la práctica docente es un concepto complejo, se entiende como el conjunto de
actividades y adecuaciones que realiza el educador para una mejor intervención con los alumnos,
aun así, va dependiendo de cada maestro en su forma de percibirla y llevarla a cabo, además, se
debe tener claro que es un proceso necesario, satisfactorio y beneficioso para el constante
desarrollo profesional. De Lella (1999) citado en García, Loredo y Carranza (2008), señala que, la
práctica docente es la acción que el profesor desarrolla en el aula, referido al proceso de su
enseñanza.
Como educadores se tiene la responsabilidad de formar ciudadanos íntegros y con valores,
capaces de enfrentar los demandantes cambios de la sociedad actual, de tal manera, que se hace
necesario darles a los infantes las herramientas necesarias para la resolución de problemas, así
como proporcionarles valiosos y muy importantes aprendizajes para su desarrollo a través de la
práctica educativa, pues como menciona Ferreiro (2006) citado por Parra (2014), los docentes
deben ser propicios para el aprendizaje, estimular el desarrollo de potencialidades, modificar las
funciones cognitivas de las deficiencias, enseñar a aprender en la zona potencial y actuar como
mediadores, padres, amigos y maestros.
Por consiguiente, los docentes desde su actuación profesional, como mediadores y formadores,
deben de reflexionar sobre su práctica pedagógica para mejorarla o fortalecerla, a la misma vez,
adquiriendo nuevos conocimientos, pues en sus ejercicios profesionales continuarán enseñando
y construyendo saberes al enfrentarse a situaciones particulares en el aula.
Para Zabala (2002), el análisis de la práctica educativa debe llevarse a cabo a través de los eventos
generados por la interacción entre docentes y alumnos. Basado en esto, se puede decir que, todo
consiste en actividades dinámicas, reflexivas, productivas, de constante actualización e
investigación, estas se desarrollan con los acontecimientos ocurridos dentro del aula durante la
interacción entre educador y alumnos, así mismo, sin descartar la comunicación entre docente y
padres de familia. Se plantea que mediante la práctica se analice, observe y reflexione sobre el
proceso de aprendizaje de los alumnos, así como la diversidad de estrategias que el educador
3. puede cambiar, mejorar o aplicar con el objetivo de dar una solución a los diferentes ambientes,
situaciones o dificultades de aprendizaje de cada niño.
La reflexión desde la práctica implica la condición de un docente preparado, reflexivo, actualizado
e investigador, esto de acuerdo con Coll y Solé (2002) citado en García et al. (2008), quienes
señalan que “el análisis de la práctica educativa debe comprender el análisis de la interactividad
y de los mecanismos de influencia educativa, por ejemplo, cómo aprenden los alumnos gracias a
la ayuda del profesor” (p. 357-386).
Por lo anterior, para mejorar la práctica docente se tiene que tomar en cuenta la preparación de
la clase, esto consiste en tener el dominio total sobre el tema a abordar, con el objetivo de dar
respuestas previas a las posibles preguntas que puedan surgir por parte de los niños. Por
consiguiente, es primordial saber expresarse de manera clara y fluida para facilitar el
entendimiento del problema, actualmente se solicita ser aún más competentes en las actividades
escolares, así, como también ser innovadores. Estar a la vanguardia debe ser unas de las
principales prioridades del maestro, debe hacer uso de las herramientas tecnológicas visuales en
las que los alumnos saquen provecho y los aprendizajes sean de mayor entendimiento.
Actualmente, se ha vuelto necesario dicho proceso de investigación y actualización, sobre todo
enfocado al manejo de las tecnologías, aumentado su importancia debido a la presencia del virus
Covid-19, tal enfermedad ha afectado a las clases presenciales, llevando la escuela y la enseñanza
a través de pantallas al hogar, por lo tanto, la práctica educativa se ha visto en ciertas
complicaciones por factores que han intervenido de manera negativa, como la carencia de
recursos tecnológicos o la falta de compromiso de los padres de familia con la educación de sus
hijos. Como docentes se ha recurrido a diversas estrategias motivadoras, en esta perspectiva,
Viau (2009) citado en Muñoz, Conejeros, Contreras y Valenzuela (2016), define a la motivación
en la educación como el intento de entretener, generar condiciones de atención y entusiasmo,
tales aspectos colaboran y estimulan el deseo de aprender. De acuerdo a esto, se ha procurado
el incentivar a los alumnos por medio de reconocimientos, regalos, stickers o pegatinas; por otro
lado, se envían videos durante las actividades para llamar la atención de los infantes y explicar
4. adecuadamente el tema; o en algunos casos, hay oportunidades de realizar sesiones de clases en
vivo.
En conclusión, se vive en una sociedad que se encuentra en constante actualización con la
educación, además, enfrenta situaciones delicadas como la baja economía afectando a los
recursos educativos o la presencia de escenarios donde se vive la ausencia de valores, es por ello,
que el deber del docente es mantener su profesión innovada, que esta se haga enriquecedora en
todos los aspectos para los educandos, debido a que su práctica educativa permitirá adquirir y
desarrollar habilidades, conocimientos académicos, personales, así como destrezas, fomentando
valores éticos y de convivencia, los cuales son primordiales para ejercer su papel como buen
maestro en su guía de enseñanza- aprendizaje en los diversos niveles educativos. Por lo que se
puede decir que, el docente al frente del aula, debe de ser un modelo a seguir y deberá obrar con
el ejemplo.
Para realizar un buen trabajo es fundamental que como futuros docentes se implemente y
organice de manera correcta la planificación didáctica, debido a que esta indica los objetivos y las
actividades que se deben realizar para lograr los aprendizajes esperados en los niños. Así mismo,
es esencial buscar estrategias que incluyan y motiven la participación de niños y padres de familia,
aprender de las múltiples experiencias pedagógicas para recrear actividades llamativas y
adecuadas con aprendizajes que ayuden al desarrollo de los infantes, a la misma vez, que el
educador aprenda a mejorar su investigación e intervención mediante su práctica educativa, con
el fin de poder estar preparados para sobrellevar diversas situaciones en las que se ponen a
prueba sus conocimientos y los que se inculcan a las siguientes generaciones.
De acuerdo con lo anterior, el deber del docente mediante su práctica educativa, no es sólo darles
los conocimientos académicos necesarios a los infantes, si no, propiciar en ellos las bases
necesarias y aprendizajes significativos que colaboren en el desarrollo social y personal, como
ciudadanos que conviven dentro de una sociedad, capaces de buscar y dar solución a problemas
o circunstancias que se les presenten a lo largo de su vida diaria.
5. Referencias:
García, B. Loredo, J. y Carranza, G. (2008). Análisis de la práctica educativa de los docentes:
pensamiento, interacción y reflexión. Revista electrónica de investigación educativa
Scielo, 10 (spe), 1-15. Recuperado de:
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1607-
40412008000300006
Muñoz, C. Conejeros, L. Contreras, C. y Valenzuela, J. (2016). La relación educador-educando:
Algunas perspectivas actuales. Revista electrónica de investigación educativa Scielo, 42.
Recuperado de: https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-
07052016000300007
Parra, K. (2014). El docente y el uso de la mediación en los procesos de enseñanza y aprendizaje.
Revista de Investigación Redalyc, 38 (83), 155-180. Recuperado de:
https://www.redalyc.org/pdf/3761/376140398009.pdf
Zavala, A. (2002). La práctica educativa, cómo enseñar. Barcelona: Grao. Recuperado de:
https://des-for.infd.edu.ar/sitio/profesorado-de-educacion-inicial/upload/zavala-
vidiella-antoni.pdf