El documento describe los ambientes para el aprendizaje activo en la educación infantil. Explica que el aprendizaje activo requiere un ambiente organizado con diversos materiales, actividades que permitan a los niños planear y llevar a cabo experiencias y trabajar de forma colectiva y al aire libre, con el apoyo de un adulto que comparta el control y se centre en las fortalezas de los niños. Las investigaciones muestran que este enfoque puede afectar positivamente el desarrollo y rendimiento futuro de los niños.