Los órganos principales involucrados en el metabolismo del calcio son las glándulas paratiroides, los riñones y el esqueleto. Las glándulas paratiroides secretan hormona paratiroidea que regula los niveles séricos de calcio e influye en el metabolismo óseo. Los riñones controlan la absorción y excreción de calcio. El esqueleto almacena el 90% del calcio corporal total y la vitamina D facilita la absorción de calcio a nivel intestinal y su movilización desde el esqueleto.