Este documento describe los objetivos y estrategias de prevención del consumo de drogas. Explica que la prevención primaria busca evitar la aparición del problema mediante la educación para la salud, mientras que la secundaria y terciaria intentan evitar que el problema empeore o se vuelva crónico. También destaca la importancia de involucrar a la comunidad y conocer sus características para diseñar mensajes preventivos significativos.
2. OBJETIVOS DE APRENDIZAJE
• Al finalizar la sesión, las adolescentes serán
capaces de:
– Mencionar los conceptos básicos de la
estrategia preventiva de la “educación para la
salud”.
– Explicar la importancia de la prevención
primaria para evitar la aparición del abuso de
drogas.
– Proponer alternativas para prevenir la
aparición del abuso de drogas en su propia
comunidad.
3. PREVENCIÓN DEL CONSUMO
El consumo de drogas se
constituye en un problema
de salud pública
fundamentalmente por la
magnitud de los daños que
provoca en todos los
sectores de la población.
Esto quiere decir que la
problemática de las drogas
no es una condición
exclusiva de alguna clase
socioeconómica.
4. Las drogas afectan a todos, pero no por igual.
Recientes investigaciones epidemiológicas
realizadas en México, han mostrado que el
consumo de drogas se manifiesta con mayor
frecuencia en ciertos grupos, como en niños y
adolescentes de escasos recursos económicos,
los que se constituyen en poblaciones en alto
riesgo de caer en el problema de drogas.
5. La Encuesta Nacional de Adicciones reporta, para
el caso de las drogas “ilegales” y de “uso médico”,
que las drogas más consumidas por los
adolescentes del sexo masculino son: la marihuana
y los inhalables (drogas “ilegales”), mientras que la
población de mujeres reporta un mayor consumo
en el rubro de drogas de “uso médico” con los
estimulantes y tranquilizantes.
6. Cabe señalar que el alcohol y el tabaco reportan
un consumo superior al referido por las drogas
“ilegales” y de “uso médico”.
Esta información permite contar con un valioso
referente a partir del cual contextuar los
mensajes preventivos, así como ubicar las
poblaciones que requieren una atención
específica.
7. El término prevención se refiere al hecho de
“prepararse”, “disponer con anticipación”. Dicha
condición supone que el problema de las drogas
puede ser controlado mediante estrategias de
prevención.
8. Existen 3 niveles preventivos con los que es
posible trabajar con la población. Estos niveles
son definidos a partir del grado de evolución que
presenta el problema del consumo de drogas.
Los niveles de prevención son:
- Primaria
- Secundaria
- Terciaria
9. La prevención primaria busca incidir sobre las
causas del problema (factores de riesgo) para
impedir su aparición.
10. La prevención secundaria se lleva a cabo
cuando el problema ya ha aparecido y su
objetivo es evitar que continúe desarrollándose.
11. Finalmente, la prevención
terciaria es aquella que
actúa para impedir que el
problema llegue a un nivel
crónico, así como para
amortiguar las
consecuencias que ya no
se pudieron evitar. En este
nivel puede contemplarse
la rehabilitación e inserción
del individuo – consumidor
de drogas – en la
sociedad.
12. La propuesta preventiva que se va a privilegiar es
la llamada “Educación para la Salud”, la cual busca
generar actitudes positivas hacia la salud,
proporcionar los medios que le permitan al sujeto
coexistir favorablemente con su medio y rescatar
las potencialidades del ser humano y su comunidad
para producir cambios dirigidos a lograr un nivel
óptimo de éste.
13. Los objetivos de la Educación para la Salud
se pueden definir en los siguientes puntos:
1. Promover un sentido de responsabilidad
respecto a la salud del
individuo, de la familia
y de la comunidad.
14. 2. Estimular estilos de vida sanos y presentar una
gama realista de opciones sanas.
3. Capacitar al alumno para realizar sus posibilidades
físicas, psicológicas y sociales, y para mejorar su
propio conocimiento y autoestima.
15. 4. Desarrollar capacidades y habilidades (hacer
elecciones, tomar decisiones, afrontar tensiones,
manejar situaciones conflictivas relacionadas con la
salud, etc.).
5. Proporcionar una base de conocimiento y
habilidades para manejar información relacionada
con la salud, por ejemplo, obtenerla, interpretarla y
usarla.
16. En otras palabras, la propuesta se dirige a
facilitar la obtención de herramientas que
permitan generar mejores condiciones de
vida en un nivel individual, familiar y socio-
ambiental.
Lo importante ahora es
contar con los elementos
que permitan concretar
esta propuesta preventiva.
17. El primer momento de la intervención preventiva es
el de la información, que deberá promover
aspectos dirigidos a sensibilizar a la población en
relación a los factores de riesgo asociados al uso y
abuso de drogas. Se debe destacar que se trata de
un problema social que afecta a toda la población y
la importancia que tiene la participación de todos
para su solución.
18. En esta etapa resulta importante conocer algunas
de las particularidades de la población con la cual
se va a trabajar, con el objeto de que la
información proporcionada pueda ser significativa
e importante para los participantes.
19. Las características específicas de la población se
pueden conocer indagando acerca de las
problemáticas que los participantes enfrentan
cotidianamente y la manera como estas
problemáticas se resuelven.
20. El segundo momento, conocido como el de
orientación, trata de ubicar el problema del
abuso de drogas en la propia realidad de los
sujetos. También se busca promover en los
sujetos las habilidades y estrategias para
enfrentar la realidad social que algunas veces
resulta adversa, y posibilitar así un manejo
adecuado en situaciones de crisis.
21. En este punto no se trata de que el coordinador
del grupo diga lo que es correcto o incorrecto,
sino que la idea es trabajar en conjunto con los
participantes para que ellos mismos refieran su
propia situación familiar, laboral y de pareja,
analizando conjuntamente los comportamientos
que puedan estar generando tensión, ansiedad
e inseguridad hacia sí mismos y hacia las
personas que lo rodean.
22. Finalmente, el tercer momento se ubica en el
trabajo de capacitación, labor dirigida a las
personas interesadas en promover la prevención
del consumo de drogas en su colonia, escuela,
barrio, etc.
23. Es importante mencionar que cualquier
intervención preventiva debe contemplar los
recursos con los cuales es factible reproducir el
mensaje. Esta idea adquiere sentido sólo cuando
se tiene la certeza de que todo problema social
debe ser solucionado socialmente, es decir,
mediante una participación conjunta.
24. Por último, es necesario recalcar que la labor preventiva
del consumo de drogas no es fácil, ya que existen una
serie de aspectos que dificultan su concreción.
Por ejemplo, existe una difusión de informaciones que para
el caso de las drogas “legales” más que prevenir,
promueven su uso, y para el caso de las drogas “ilegales”
construyen y fomentan prejuicios y valores negativos hacia
el consumidor, como si éste fuera el único responsable, sin
contemplar que se trata de un problema social y de salud
pública, y que su prevención y solución están en el ámbito
de lo social.
25. El caso de las drogas de “uso médico” es aún
más preocupante, ya que ni siquiera existe una
representación clara de que su abuso pueda
provocar daños físicos y psicológicos
importantes.
26. Es por todo lo que se ha mencionado, que el
consumo de drogas es un problema social, que
por tanto, requiere de la participación de toda la
comunidad para poder ser prevenido y
solucionado.