La Reserva Federal de Estados Unidos está reduciendo gradualmente su política de flexibilización cuantitativa, conocida como "tapering". Esto tendrá grandes consecuencias tanto para los países desarrollados como para los emergentes. Para los primeros, significará mayores costos de deuda pública, mientras que para los segundos podría desencadenar salidas masivas de capitales e inestabilidad financiera. La economía española deberá estar atenta debido a su elevada deuda pública y exposición a mercados emergentes.