El documento propone diversas estrategias para mejorar el sistema educativo ecuatoriano. Entre ellas se encuentran ampliar el acceso a la educación inicial, básica y superior; mejorar la infraestructura y recursos educativos; fortalecer los estándares de calidad; capacitar a docentes; y promover la interacción entre la educación, la investigación científica y el sector productivo. El objetivo general es democratizar el acceso a una educación de calidad e inclusiva para todos los ecuatorianos.