La vacuna contra la tosferina ha experimentado cambios recientes debido a brotes epidémicos y una escasez mundial de la vacuna. Se recomienda ahora vacunar a las embarazadas en el tercer trimestre para proteger a los neonatos, aunque no existe suficiente evidencia sobre su efectividad o seguridad. También se ha modificado el calendario infantil suspendiendo la dosis de recuerdo a los 6 años.