La tuberculosis se adquiere principalmente a través de la inhalación de gotitas expulsadas por personas infectadas al toser o estornudar. Los síntomas de la tuberculosis pulmonar primaria incluyen el complejo primario y la progresión a formas crónicas o diseminadas. El tratamiento incluye medicamentos como isoniazida, etambutol y rifampicina durante varios meses para evitar complicaciones y la propagación de la enfermedad.