1. UNIVERSIDAD TECNICA DE MANABI
INMUNOLOGÍA “C”
AUTOR: Angie Karina Macias Meza
LOS ANTICUERPOS NATURALES, COMPLEMENTO QUE ENLAZA LA
INMUNIDAD INNATA Y ADAPTATIVA
Las infecciones virales y bacterianas ingresan a nuestro organismo de forma diversa, pero
por lo general son mediante las mucosas, ya sean respiratorias, digestivas o urinarias.
Estas infecciones desencadenan una respuesta inmune. Dependiendo el tipo de infección
y la zona se determina el mecanismo efector ya sea en linfocitos o anticuerpos como la
IgA o IgM, esta última es crucial para estimular la inmunogenecidad efectiva. Los
anticuerpos naturales son la primera línea de defensa contra las infecciones, estos se
encuentran estimulados por la inmunidad innata, aunque las diferencias genéticas pueden
influir en su manifestación. Estos anticuerpos naturales ofrecen una polirreactividad con
respecto a los antígenos propios y extranjeros que se puedan presentar. Según Fainboim,
Geffner (2005) proponen que “Los linfocitos B1 producen, sin aparente exposición a
antígenos foráneos, grandes cantidades de anticuerpos de isotipo IgM, los que reciben el
nombre de anticuerpos naturales”.1
Varios son los experimentos realizados en ratones con el objetivo de comprobar la
acción de los anticuerpos naturales, por citar uno, se puede mencionar en el que se ha
encontrado anticuerpos capaces de proteger a los ratones de la encefalitis inducida.
Además de que los anticuerpos actúen de manera directa en la lisis de patógenos, se ha
demostrado que están involucrados en la liquidación de eritrocitos senescentes,
escombros intracelulares y agentes infecciosos de la circulación. También se han
realizado experimentos en los que se comprueba que los órganos linfoides junto con los
mecanismos de transporte de antígeno de sitios periféricos a los órganos linfoides son
importantes para la inducción y mantenimiento de una respuesta inmune.
Por lo tanto, los anticuerpos naturales poseen una importancia básica en la respuesta
inmune del cuerpo humano, en esta respuesta inmune incide mucho las cantidades o
densidades presentes, que pueden llegar a ser modificadas por algunas diferencias
genéticas. Los anticuerpos naturales tienen la función fundamental de la lisis de agentes
patógenos, cuya función se ve acompañada de cascadas de complemento con la finalidad
de aplacar de manera satisfactoria el antígeno amenazante. Desempeñan un papel
importante en la activación del sistema adaptativo ya que posee los sistemas de inducción
necesarios para que este se active dependiendo el daño.
1
Fainboim, L. (2005). Introduccion a la Inmunologia Humana . Argentina: Editorial Panamericana .
2. UNIVERSIDAD TECNICA DE MANABI
INMUNOLOGÍA “C”
AUTOR: Angie Karina Macias Meza
CELULAS LINFOIDES INNATAS, UN NUEVO PARADIGMA EN LA
INMUNOLOGIA
Según Walsh, (2007) indica que “los linfocitos son células mononucleares consideradas
como piezas clave del sistema inmunitario”.2
Las células linfoides innatas poseen
funciones similares a los linfocitos T, pero a diferencia de estos no presentan receptores
de antígenos ni otras características específicas de las células T, por lo tanto, poseen la
capacidad de reaccionar rápidamente a las señales para controlar y potenciar la respuesta
inmune. Estas células linfoides innatas también llegan a estimular la acción de células T
específicas. Su acción inmunopatologica se basa en exacerbar la inflamación. En los
tejidos adiposos, regulan la termogénesis y prevenir la inflamación local que puede
conducir al síndrome metabólico, resistencia a la insulina, y obesidad asociada. Mediante
estudios y experimentación se ha ido observando que la actividad de las células linfoides
innatas con efectores actúa otorgando beneficios en la respuesta después de la vacunación,
lo que conduce a un nuevo panorama en lo que se refiere a inmunología. Estas células se
han dividido de acuerdo a sus características, en ILC1, ILC2 y ILC3, que poseen similitud
como ya antes se mencionó con las células T. Las células linfoides adaptativas junto con
las células T, activan un subconjunto de células linfoides innatas que permiten actuar de
diversa forma frente a patógenos de manera rápida, lo que significa un beneficio.
Estas células al presentar una carencia de receptor de antígeno se activan de una manera
distinta, esta es reaccionando al microambiente por medio de receptores de citoquinas que
le otorgan sus funciones innatas y adaptativas locales en la inflamación. Debido a que
estas células se activan rápidamente en la respuesta inmune a la infección y lesión, y
producen tipo 1, tipo 2 y tipo 3 citoquinas, que regulan la respuesta inmune adaptativa en
desarrollo.
En conclusión, las células linfoides innatas van a ser hasta cierto punto precursores de las
células T, compartiendo ciertas características con estas, pero diferenciándose en la
capacidad de reacción inmediata que tienen frente a una lesión o inflamación. También
comparten características con las células innatas o natural killer, debido a su actividad
inmune, por lo que se dice que de aquí parte la toxicidad o la colaboración que poseen las
células T CD4 y CD8.
2
Wein, K. (2007). Urologia. mexico: Panamericana .
3. UNIVERSIDAD TECNICA DE MANABI
INMUNOLOGÍA “C”
AUTOR: Angie Karina Macias Meza
MRP1-CD28 OLIGONUCLEOTIDOS APTAMEROS BI- ESPECIFICOS:
COESTIMULA CELULAS CANCERIGENAS DE MELANOMA RESISTENTE
A MEDICAMENTOS
Los aptameros son ácidos nucleicos de cadena sencilla obtenidos mediante procesos
químico biológicos. Estas células son capaces de adquirir funciones especializadas dentro
del campo de la inmunidad comparándose con anticuerpos. Para actuar deben estar en
presencia de un ligando, que en este caso es el coestimulador de linfocitos T, CD28.
En este complejo actúa también de manera directa los Resistentes a multimedicamentos
asociados a la proteína 1 (MRP1) que es un mecanismo propio de las quimioterapias de
tumores graves que se expresa en mayor cantidad, con respecto a otras proteínas, en las
células cancerígenas. MRP1 – CD28, se ha expresado mediante el proceso denominado
SELEX, que básicamente es una selección in vitro de aptameros; es decir, la MRP1 –
CD28 será obtenida por procesos genéticos. Esta le proporcionará a los coestimuladores
CD28 la capacidad de infiltrarse en las células cancerígenas, pero solo podrá hacerlo en
células que posean gran cantidad de MRP1. Luego de su análisis, los resultados
demuestran que este aptámero potencia la respuesta inmunológica frente al tumor, lo que
conlleva un menor crecimiento tumoral y una mayor supervivencia en el anfitrión.
También es posible convertir el propio tumor en una vacuna endógena. Al recubrir las
células tumorales irradiadas con el aptámero CD28, generando una nueva vacuna llamada
CD28Aptvax, que tiene como objeto aumentar la respuesta inmunitaria preexistente y
evita que el tumor siga creciendo, dándole a esta vacuna una esperanza útil en un futuro
para pacientes con melanoma. Esta vacuna fue probada en ratones a los que se les inyectó
3 dosis durante 3 días, y luego de 15 días se obtuvieron los respectivos resultados
analizando el bazo de los animales.
Esta molécula, resulta definitivamente un beneficio para personas que padecen tumores,
ya que aumenta la respuesta inmune de los linfocitos T mediante los coestimuladores y la
actividad del mismo tumor, mediante el mecanismo propio de este, como lo es la MRP1
y a más de eso se creó una vacuna que facilita aún más el proceso otorgando al paciente
un medio de supervivencia. Es un importante avance para la inmunología y representa el
papel fundamental que cumplen los coestimuladores dentro de la activación de los
linfocitos T para una óptima respuesta inmunitaria contra los antígenos que en este caso
son los tumores de melanoma.