El aprendizaje se define como un cambio de comportamiento a través de la interacción con estímulos ambientales y experiencias. Los estímulos desde las primeras etapas del desarrollo del niño generan procesos de aprendizaje que determinan nuevos comportamientos. El aprendizaje implica la adquisición de conocimientos, habilidades y conductas a través del desarrollo de las capacidades cognitivas y el uso de técnicas de aprendizaje.