Este documento discute tres temas relacionados con medicamentos para niños. Primero, explica cómo los sabores amargos de los medicamentos pueden hacer difícil que los niños los tomen y propone un diseño para hacer que sea menos tedioso. Segundo, busca crear conciencia sobre el uso correcto de medicamentos en niños de 0 a 10 años. Tercero, señala que aunque los medicamentos se tratan en plantas de aguas residuales, a menudo no se eliminan completamente y pueden afectar ecosistemas acuáticos.