El documento clasifica las pruebas de evaluación en tres categorías: pruebas objetivas que miden conocimientos a través de cuestionarios e interacciones, pruebas subjetivas que involucran el juicio del tutor para evaluar habilidades sociales y expresión, y pruebas de ejecución que evalúan la capacidad del estudiante. Provee ejemplos de instrumentos comunes para cada categoría como exámenes de opción múltiple, presentaciones orales y actividades prácticas.