introducción
El pensamiento que tenia Heidegger combina por un lado, con una nueva interpretación de la metafísica en la contemporaneidad y por otro lado , la reflexión existencial en la cotidianidad del ser humano. Su filosofía corresponde a la analítica existencial del ser-ahí, que se caracteriza por expresarse mediante un complejo sistema lingüístico.
introducción
El pensamiento que tenia Heidegger combina por un lado, con una nueva interpretación de la metafísica en la contemporaneidad y por otro lado , la reflexión existencial en la cotidianidad del ser humano. Su filosofía corresponde a la analítica existencial del ser-ahí, que se caracteriza por expresarse mediante un complejo sistema lingüístico.
Érase una vez un rey que tenía un hijo llamado Tomás, quien acababa de cumplir los 14 años.
Juntos compartían varias costumbres y actividades, pero había una que llamaba profundamente la atención de sus súbditos y era que cada tarde iban a pasar un rato en los terrenos de un palacio abandonado y semidestruido.
Según las leyendas populares, en dicha construcción habitaban tres brujas que eran hermanas, cuya codicia destruyó el esplendor que en otros tiempos hizo famoso ese palacio.
Ni Tomás ni se padre se tomaban muy en serio esos cuentos. Llevaban años pasando sus tardes allí, y nunca habían tenido señal alguna de que realmente existiesen brujas.
Sucede que un día, como otro cualquiera, antes de salir del palacio abandonado el rey se acercó a la fuente central del patio y para su sorpresa vio que había una bella rosa en el fondo.
Pensó que la flor le agradaría mucho a su esposa y decidió tomarla y llevarla con él.
Cuando llegaron al castillo, Tomás fue a sus aposentos y el rey fue al encuentro de su amada, que disfrutó enormemente de la belleza de la rosa y la depositó en una pequeña caja de madera preciosa.
Emocionados fueron a su lecho y ya cuando estaban profundamente dormidos, el rey oyó la voz de una mujer que le pedía que la liberara.
Alarmado, el monarca despertó y preguntó a la reina si le había dicho algo. Esta respondió negativamente pero el rey sabía que no había soñado la voz, por tanto se levantó y exploró la planta superior del palacio, que era donde radicaba la alcoba real.
La repetición del llamado que interrumpió su sueño lo llevó a la habitación en la que su esposa había guardado la caja con la flor. Al hallarla, y comprender que era el motivo de la extra voz, abrió la caja y tomó la flor en sus manos.
De inmediato, la bella rosa se transformó en una mujer de extraña belleza, que se identificó como una de las tres hermanas brujas del palacio abandonado.
Exigió al rey que se casase con ella y matase a la actual reina, pues ella, la mayor de las tres brujas, pasaría a ser la dueña y señora de la comarca, nueva esposa del rey.Érase una vez un rey que tenía un hijo llamado Tomás, quien acababa de cumplir los 14 años.
Juntos compartían varias costumbres y actividades, pero había una que llamaba profundamente la atención de sus súbditos y era que cada tarde iban a pasar un rato en los terrenos de un palacio abandonado y semidestruido.
Según las leyendas populares, en dicha construcción habitaban tres brujas que eran hermanas, cuya codicia destruyó el esplendor que en otros tiempos hizo famoso ese palacio.
Ni Tomás ni se padre se tomaban muy en serio esos cuentos. Llevaban años pasando sus tardes allí, y nunca habían tenido señal alguna de que realmente existiesen brujas.
Sucede que un día, como otro cualquiera, antes de salir del palacio abandonado el rey se acercó a la fuente central del patio y para su sorpresa vio que había una bella rosa en el fondo.
Pensó que la flor le agradaría mucho a su esposa y decidió tomarl
ENSAYOS SOBRE SARTRE Y EL EXISTENCIALISMO Dr. Adolfo Vásquez RoccaAdolfo Vasquez Rocca
“DEL “HUMANISMO” DE SARTRE AL “ANTI-HUMANISMO” DE HEIDEGGER”.
En su tiempo, el existencialismo se vio forzado a echar mano del humanismo para hacer frente a diversas acusaciones. Caracterizado por cierta crítica como una variante del “nihilismo”. Sartre se defendió afirmando el carácter “humanista” de su doctrina. De hecho, aduciría que el verdadero humanismo sólo podría ser existencialista. La base del existencialismo es, según se sabe, la asunción de la finitud y el desamparo en que se hallan los hombres: lo humano es un proyecto construido —y cumplido— en medio del vacío absoluto: en la irremisible ausencia de Dios. El hombre está condenado a ser libre. Sartre no ha contribuido casi nada a comprender la sustancia del humanismo, e incluso ha oscurecido su propia posición. Ahora bien, la identificación entre el existencialismo y el humanismo también dio pie a la aparición de un texto notable, la Carta sobre el “Humanismo” de Martin Heidegger, el primer documento del pensamiento de Heidegger publicado después de 1945. Escrito en 1946 como carta abierta a Jean Beaufret, su discípulo más importante en la escena filosófica de Francia después de la guerra. Beaufret había planteado a Heidegger la pregunta: “¿De qué manera puede darse de nuevo un sentido a la palabra humanismo?”. Heidegger abordó la pregunta con agrado, pues le daba oportunidad de responder al escrito de Sartre ¿Es el existencialismo un humanismo?2, aparecido pocos meses antes y que también en Alemania era discutido profusamente. Incluso después de que no se llegara a un encuentro personal con él, Heidegger buscaba la disputa con Sartre. En cualquier caso, el existencialismo de Sartre, después de una mítica conferencia pronunciada el 29 de octubre de 1945, que tenía como base el ensayo mencionado, de la noche a la mañana se convirtió en una figura de la cultura europea. Las ideas de Sartre después de esta conferencia dominaron las discusiones, apenas pasaba un día en el que no fueran mencionados o citados Sartre y el existencialismo. Pocos meses antes Sartre había dicho: “¿EI existencialismo? No sé lo que es eso. Mi filosofía es una filosofía de la existencia”3. Y ya en diciembre de 1945 circulan los primeros manuales del existencialismo, el que constituido en una credo militante se propugnaba bajo la consigna de “Comprométete, lleva contigo la humanidad, créate a ti mismo siempre de nuevo, solamente a través de tus acciones”4. Con su legendaria conferencia Sartre había respondido a la pregunta por el destino del humanismo en una época que acababa de experimentar los excesos de la barbarie. La respuesta de Sartre sonaba así: no hay valores humanistas a los que podamos confiarnos por el hecho de que supuestamente estén anclados con firmeza en nuestra civilización. Dichos valores se dan tan sólo si nosotros los inventamos siempre de nuevo en la situación de la decisión y hacemos que se traduzcan
1. Jean Paul Sartre (París, Francia 21 de
Junio de 1905 – 15 de abril de 1980)
2. Fue la figura más notoria de la filosofía
francesa de los años posteriores a la
Guerra Mundial es el representante del
existencialismo en sentido estricto. Jean
Paul fue profesor de liceo, novelista y
dramaturgo, escritor político, director de
Les Temps modernes, estudió algún
tiempo en Alemania y recibió fuertemente
la influencia del pensamiento
fenomenológico de Husserl y también de
Heidegger , de quienes procede gran
parte de sus ideas.
3. Sus principales obras literarias
son:
La náusea
A puerta cerrada
Las moscas
La edad de la razón
El diablo y el buen dios.
4. El mismo Sartre ha definido su
existencialismo como la postura que lleva
hasta sus últimas consecuencias un franco
ateísmo como punto de partida.
5. La intención de Sartre se queda en la
descripción de la existencia humana. Sus
temas centrales son: la libertad, la
angustia, el amoralismo, la imposibilidad de
las relaciones interpersonales de sujeto a
sujeto y el fracaso del hombre en todos sus
intentos para realizar su proyecto
fundamental: llegar a ser Dios.
El hombre es una pasión inútil, y el absurdo
es la tónica general de su existencia; de allí
el sentimiento de náusea que invade y
caracteriza a un autentico existencialista.
6. Todo el pensamiento de Sartre gira
alrededor de este par de conceptos
fundamentales: el en-sí y el para-sí.
El en-sí es el ser de las cosas, es el
objeto, carece de conciencia , de
movimientos, de relaciones.
En completa oposición, está el para-sí, el
cual es consciente , es sujeto, es lo
típicamente humano.
7. Al para-sí no se le puede aplicar el
principio de identidad, ya que “es lo que no
es y no es lo que es”.
La oposición entre estas dos categorías
Sartreanas no puede ser más tajante:
mientras que el en-sí es
denso, macizo, lleno, inmóvil, rígido, incon
sciente, objetivo; en cambio, el para-sí es
hueco, móvil, consciente, indeterminado, s
ubjetivo.
8. También explica Sartre que el hombre es
existencia, libertad (todo esto coincidiendo
con su conciencia, su nada, su para-sí).
Con dicha existencia se va forjando su
propia esencia, que es su propia
autobiografía.
Así se entiende entonces la tesis central
del existencialismo: “La existencia
precede, y es superior a la esencia”.
9. Para Sartre, no hay ser
en potencia, todo lo que
existe está en acto. La
libertad es la misma
elección que el hombre
realiza al existir como una
indeterminación o
nada, pero que
continuamente se está
autodeterminando.
Con todo, Sartre
considera que el hombre
“está condenado a ser
libre”.
10. El hombre que efectivamente vive su
libertad, siente el peso aplastante de la
responsabilidad, y eso le produce
angustia.
La libertad absoluta que proclama Sartre
es, completamente autónoma; cualquier
motivo objetivo que se aduzca en una
elección, falsifica la libertad, y degrada a la
condición del cobarde.
11. Para Sartre no hay valores a priori,
objetivos, con validez universal. Su tesis
se opone radicalmente a la de Max
Scheler.
No es la libertad la que ha de depender de
los valores, sino al revés, son estos los
que surgen por la libertad.
12. Sartre llegó a escribir que “todas las
actividades humanas son
equivalentes…, lo mismo da embriagarse
a solas, que conducir pueblos…” A partir
de aquí, surge el relativismo y el
amoralismo que desde un principio se ha
detectado en el ambiente actual, y que se
desprende como consecuencia lógica de
las principales tesis sartreanas a favor de
la libertad y de la autonomía, y en contra
de los valores y de las jerarquías
establecidas.
13. Se cuela en Sartre una bipolaridad, por la cual
tacha a la cobardía, al espíritu de serenidad y a
la mala fe como algo negativo, y en cambio, da
toda su aprobación positiva a la lucidez, a la
libertad autónoma, a la actitud resuelta y semi-
estoica que asume la angustia y la
responsabilidad.
14. Sartre señala que la base de las relaciones
humanas es el conflicto, la lucha, y que de
ninguna manera es posible establecer el
contacto interpersonal, la comunicación de
sujeto a sujeto.
A partir de aquí surgen algunas variantes. Si
yo me comporto como sujeto, entonces
trataré de atraer y absorber la libertad del
sujeto por medio del amor, del lenguaje, y del
masoquismo.
15. En síntesis, las relacione interhumanas
están caracterizadas por el conflicto. Se
trata de vencer al otro; pero nunca se
quedara satisfecho, y todo se convierte en
una lucha sin sentido: “el infierno son los
otros”.
16. Lapostura de Sartre con respecto a Dios
no solamente es atea, sino que
francamente se constituye como un
antiteísmo.
17. Se podría decir que hay 2 razones o
argumentos que esgrime Sartre en contra
de la existencia de Dios.
El primero se refiere al concepto de
Dios, que según Sartre, es contradictorio
en sí mismo. El segundo es una
disyunción entre la libertad humana y la
existencia de Dios, las cuales, en el
pensamiento de Sartre son incompatibles.
18. A)Dualismo.- Sartre opone radicalmente
el hombre a las demás cosas, como se
oponen sujeto y objeto. Es cierto que el
hombre trasciende, por su conciencia y
libertad, el mundo de las cosas materiales.
La doctrina de la analogía, de Sto. Tomás
comprende que, a pesar de todas las
diferencias reales entre los entes, de todas
maneras hay algo que lo unifica, como es
el ser.
19. B) Autonomía.- Respecto a la libertad, hay
que convenir en que la responsabilidad y
la autonomía son valores positivos.
Se puede actuar por propio
convencimiento, aun cuando la conducta
realizada esté normada por reglas cuyo
origen sea extrínseco al propio sujeto.
20. C)Valor.-Respecto a los valores, éstos
tienen un contenido a
priori, objetivo, independiente de la libertad
humana.
Los valores hechos no suprimen la
libertad; son atractivos, e influyen en la
libertad, pero no la determinan
completamente.
21. D) Relaciones humanas.-Es un hecho, que
se da la relación de sujeto a sujeto; hay un
contacto interhumano. Por supuesto no se
trata de un completo conocimiento y
comprensión del otro sujeto; siempre
queda un margen de oscuridad y
profundidad, nunca captado, ni en el otro
sujeto, ni en sí mismo.
22. E) Dios.-Para que Dios
sea él ser supremo, no
es necesario que en él
se aglutinen todas las
determinaciones que
observamos en el
mundo. Así pues, en el
concepto de Dios no
hay razón para que se
dé al mismo tiempo lo
lleno y lo vacío, lo
objetivo y lo subjetivo.
El concepto de Dios es
el de un ser perfecto y
necesario creador del
universo.
23. La filosofía de Sartre es una “Filosofía del
absurdo”. Y la náusea que produce el sentido
de las cosas es un modo de expresar la
profunda frustración que se experimenta ante
la deficiencia del en-sí y del para-sí.
Por otro lado, si no hay valores, si todo
depende del sentido que cada uno le de a las
cosas, entonces la teoría Sartreana no puede
presentarse como una verdad con validez
para todos, y no habría razón alguna para
seguir sosteniéndola.