En la antigua Grecia se desarrolló el concepto de educación integral del cuerpo y la mente, mientras que en la antigua Roma la educación se centró más en la oratoria. En la Edad Media, los niños eran vistos como propiedad de los padres y recibían poca educación formal. Los filósofos renacentistas y modernos promovieron una visión más positiva de la infancia y la importancia de la educación temprana.