El documento describe el síndrome de malabsorción intestinal, que se define como la incapacidad de absorber adecuadamente los nutrientes de los alimentos debido a problemas en el intestino delgado. Los síntomas incluyen diarrea, pérdida de peso y deficiencias de vitaminas. El diagnóstico requiere exámenes de sangre y materia fecal, y el tratamiento implica reemplazar los nutrientes no absorbidos.