El documento describe la creatividad como una facultad esencial en la investigación científica que permite reorganizar y estructurar la realidad de maneras nuevas y valiosas. También discute técnicas de investigación cualitativa como los grupos de discusión abiertos y sesiones creativas que facilitan la generación grupal de significados e ideas innovadoras. Finalmente, señala que el pensamiento creativo requiere de un enfoque crítico y no puede ser improvisado o conducido a voluntad.