1. ÓRGANO OFICIOSO DEL ARZOBISPADO DE SAN SALVADOR. 15 de octubre de 2023
Año LXXI Nº 6232 $ 0.30
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2. 2 15 de octubre de 2023
Principales Compromisos Pastorales de
Monseñor José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador
del 02 al 08 de octubre de 2023
Palabras del Arzobispo
alabras del Arzobispo
Iglesia Local
Iglesia Local
Rosario de Hombres: Una
Manifestación de Fe en El Salvador
En una emotiva celebración el pasado sábado
7 de octubre, la feligresía católica se reunió
para conmemorar a Nuestra Señora del Rosario
en el marco del sexto Rosario de Hombres. El
evento tuvo lugar de manera simultánea en el
Anfiteatro de la Basílica de Guadalupe "Ceiba
de Guadalupe" y en el Atrio de la Catedral de
San Miguel.
La Ceiba de Guadalupe, uno de los lugares
más emblemáticos de la fe, fue testigo de
este significativo encuentro que contó con la
destacada presencia de su Excelencia Mons.
Luigi Roberto Cona, Nuncio Apostólico en
El Salvador, y Monseñor Joseph Saleem,
Secretario de la Nunciatura Apostólica en El
Salvador.
Durante la ceremonia, su Excelencia Mons.
Luigi Roberto Cona, el Nuncio Apostólico,
dirigió unas conmovedoras palabras a los
presentes, destacando la importancia de la
devoción a Nuestra Señora del Rosario y la
significativa participación de los hombres en
esta manifestación de fe:
Queridos hermanos que se encuentran aquí
presentes, han demostrado una profunda fe al
reconocer sus propias limitaciones. Hoy, al
arrodillarse o permanecer de pie ante la imagen
de la Virgen María, han expresado su humildad
y han pedido su ayuda, reconociendo que no
pueden hacerlo solos. Esta es la verdadera
fidelidad. Ser un fiel no se limita a recitar de
memoria las oraciones, como el Ave María,
el Padre Nuestro o el Gloria al Padre, ni a
recitar las antífonas con dignidad, como lo han
hecho ustedes. La fe verdadera se manifiesta
en aquellos momentos en que enfrentamos los
desafíos de la vida, ya sea en nuestra carrera
profesional, detrás de un escritorio importante
o en cualquier otro lugar de trabajo. En esos
momentos,debemosestarcontentosysatisfechos
con lo que hacemos, reconociendo que somos
limitados y pecadores. Nuestra madre celestial
nos ama a pesar de nuestras imperfecciones.
Sin embargo, queridos hermanos, no podemos
abandonar este lugar sin recordar que
debemos amar a nuestros semejantes, incluso a
aquellos que pueden cometer pecados. ¿Cómo
podemos amar a nuestras esposas e hijos si
solo pensamos en nosotros mismos y hacemos
lo que nos place? No podemos. Nuestra madre
nos ama por lo que somos, pecadores y seres
limitados. Por lo tanto, les insto a que, al
regresar a sus hogares y mirar a los rostros de
sus esposas e hijos, los amen por lo que son.
Tal vez estén pasando por momentos difíciles,
y es en esos momentos cuando más necesitan
nuestro amor y apoyo. Amémonos unos a otros
no porque seamos superhéroes, ya que ninguno
de nosotros lo es, ni siquiera yo mismo. Somos
simplemente hijos de nuestra madre celestial,
necesitados de la misericordia de Dios. Mons.
Luigi Roberto Cona, Nuncio Apostólico en El
Salvador en el sexto Rosario de hombres
La celebración simultánea en el Atrio de
la Catedral de San Miguel también fue un
momento de unión y comunión espiritual para
los fieles de la zona oriental del país.
En un mundo lleno de desafíos y cambios
constantes, eventos como el Rosario de
Hombres demuestran la fuerza de la fe y la
unidad de la comunidad católica en El Salvador.
La devoción a Nuestra Señora del Rosario sigue
siendo un faro de esperanza y consuelo para
quienes buscan la paz y la guía espiritual en sus
vidas.
Los días martes 03, miércoles 04 y jueves 05 recibí en mi despacho
la visita de un buen número de sacerdotes, hermanas religiosas y
hermanos laicos que deseaban conversar conmigo sobre diferentes
temas, ya sea de carácter pastoral o personal. Agradezco sus visitas
que son siempre gratificantes, pues cualquier punto que tratemos
redunda siempre en beneficio de la fe de la persona, o de la
comunidad.
El martes 03, al final de la tarde visité el Seminario San José de
la Montaña, para presidir la santa Misa con toda la gran comunidad
del Seminario, concelebraron conmigo, el Padre Rector, P. Oscar
Álvarez y los demás Padres formadores; en seguida cené con ellos
y posteriormente me reuní con el Equipo formador del Seminario,
para tratar temas de mucha importancia para la marcha de nuestro
Seminario, buscando la mejor atención de los seminaristas.
El sábado 07, por la mañana visité el colegio Externado San José,
para celebrar en la Capilla San Ignacio de Loyola la santa Misa en
la que conferí el sacramento de la Confirmación a un grupo de 54
jóvenes que habían recibido la debida preparación, concelebraron
conmigo, el Rector del Colegio, el Padre Jaime Parra, el Padre
Guillermo Soto, encargado de la formación espiritual de los
jóvenes, y el Padre Guillermo Palacios, administrador de nuestra
Curia. La hermosa capilla del Colegio estaba embellecida aún más
con la presencia de tantos fieles, pues acompañaban a los 54 jóvenes
confirmandos, sus padrinos y sus familiares, fue una celebración
muy linda con una gran participación litúrgica de parte de todos.
El domingo 08, mi visita fue a la querida Parroquia El Rosario,
para presidir la Santa Misa Patronal, en honor a Nuestra Señora
del Santo Rosario concelebró conmigo el Padre Néstor Alvarado,
Párroco de esa Iglesia; dentro de la celebración eucarística conferí
el sacramento de la confirmación a un grupo de 10 jóvenes, quienes
habían recibido la catequesis correspondiente. Fue una celebración
muy solemne y a con gran participación litúrgica por parte de todos
en un ambiente de mucha fe y de profundo amor a María Santísima.
3. 3
15 de octubre de 2023
ARTÍCULO2:CREOENDIOSHIJO(I)
CATEQUESIS DEL OBISPO SOBRE EL CREDO
San Salvador, 15 de octubre de 2023
− 17 −
1 Ver Semanario Orientación desde el 10 de septiembre hasta el 1 de octubre de 2023.
2 Santo Tomás de Aquino, Catecismo Tomista, n. 2, §2.
3 Rufino de Aquileya, Comentario al Símbolo Apostólico, p. 48.
4 Luis Alonso Schökel, La Biblia de nuestro pueblo, p. 1511.
5 De Aquileya, óp. cit., p. 49.
6 Ibidem, p. 49.
En la Catequesis anterior finalizamos el Artículo 1 del Credo referido a Dios Padre. Reflexionamos, en torno a él, que la Iglesia cree y confiesa
su fe en un Dios que es Uno y Trino; que es Padre, Creador del cielo y de la tierra; y que, como Dios, es Todopoderoso y Omnipotente. Poder y
omnipotencia reflejada en su infinita misericordia y en la suma bondad que lo caracteriza1
. En la presente Catequesis comenzamos el Artículo 2, esta
vez referido al Hijo en quien es también necesario creer pues no basta con creer en un solo Dios, Creador de todas las cosas, sino que debemos
creer que Dios es Padre y que Cristo es su Hijo verdadero2
.
• Credo Apostólico
Según el Credo Apostólico confesamos creer en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor. Artículo en el cual confesamos que la Segunda Persona
de la Santísima Trinidad recibe cuatro significativos títulos (cf. CIC 429):
1. Jesús
Según Rufino de Aquileya, “Jesús” es un vocablo hebreo que significa Salvador3
o Dios salva (CIC 430). Nombre que resume la identidad y misión
de Jesús (cf. CIC 430). El ángel lo reveló de esa manera a San José: …dará a luz un hijo, a quien llamarás Jesús porque el salvará a su pueblo (Mt
1, 21); misión operada en su vida, muerte y resurrección4. Su nombre, añadido a lo anterior, hace alusión a la cercanía de Dios con su pueblo: Es
el Dios con nosotros (Lc 1, 23); es el Dios que ha puesto su tienda entre nosotros (Jn 1, 14); es Dios Hijo que tomó carne para que la gracia y la
verdad se realizaran a través de Él (Jn 1, 18).
Al tomar carne, Jesús se insertó en el tiempo y el espacio: Es aquel que nació en Belén bajo el reinado de Herodes el Grande y el imperio de César
Augusto, carpintero por oficio, y murió crucificado en Jerusalén bajo el poder de Poncio Pilato durante el imperio de Tiberio (cf. CIC 423). Este es
Jesús quien de ninguna manera – dijo San Pedro – es mito o fábula (cf. 2P 1, 16).
2. Cristo
Cristo es nombre sacerdotal o regio5 que viene de la traducción griega del término hebreo Mesías que significa ungido (CIC 436). Ungido no con
ungüento de materia corruptible sino por el Espíritu Santo6. Entonces, por esta unción, Jesús es:
(1) Sumo Sacerdote excelente que penetró en el cielo (Hb 4, 14);
(2) Profeta poderoso en obras y palabras ante Dios y ante todo el pueblo (Lc 24, 19); y,
(3) Rey cuya máxima manifestación de su reinado lo dio en la cruz (CIC 440).
A esto se añade que, Jesucristo además de ser Dios, imagen de Dios invisible (GS 22), es el hombre perfecto (GS 22), probado en todo menos en
el pecado (Hb 4, 15), y únicamente en quien el misterio del ser humano se esclarece (GS 22).
3. Hijo Único de Dios
De su filiación divina encontramos en el Nuevo Testamento una numerosa cantidad de citas, p. ej.:
- La revelación del ángel Gabriel: Llevará el título de Hijo de Dios (Lc 1, 35).
- La revelación teofánica del Padre en el Bautismo de Jesús (cf. Lc 3, 22).
- La revelación teofánica en la Transfiguración en el Tabor (cf. Mt 3, 17).
- La confesión de Pedro; así como, la confesión de Marta (cf. Lc 11, 27).
- La confesión directa de Jesús ante los miembros del Sanedrín: Yo soy (Mc 14, 61).
- La confesión del soldado en al pie de la Cruz (cf. Mc 15, 39).
Después de su Resurrección, su filiación divina aparece en el poder de su humanidad glorificada como lo reconocieron los primeros cristianos de
las primeras comunidades: Constituido por el Espíritu Santo, Hijo de Dios con poder a partir de su resurrección (Rm 1, 4).
4. Señor
Finalmente, Jesús lleva el título de Señor porque Jesús es el Señor, el Kyrios. Como con el anterior título:
- Jesús mismo dio testimonio de su señorío cuando discute el sentido del Salmo 109 con los fariseos (cf. Mc 12, 36) o cuando acepta ser llamado
así por sus discípulos (cf. Jn 13, 13).
- Los Apóstoles lo confesaron así: Primero reconociéndolo como su único Señor (cf. Hch 10, 36; Jds 1, 4) y que bien resume Pablo: Un solo
Señor, una sola fe, un solo bautismo (Ef 4, 5). Segundo, confesándolo como constituido Señor por su Padre, Señor de vivos y muertos por
quien se alcanza la salvación, Señor de este mundo y de la historia (1Tm 1, 2; 2P 1, 11; Rm 14, 9; Hch 2, 36, 1Tm 6,15): En su manto y en su
muslo tiene un nombre escrito: Rey de reyes y Señor de señores (Ap 19, 16).
- Los Evangelistas muestran su señorío, entre otras cosas, en su dominio sobre la naturaleza, sobre las enfermedades, los demonios, la muerte
y el pecado, demostrando con ello, su soberanía divina (cf. CIC 447).
Por esto, en conclusión, la Iglesia cree que: la clave, el centro y el fin de toda la historia humana y de toda historia humana se encuentra en el
Señor (cf. CIC 450/GS 10). Y, por ello, la Iglesia coloca en el centro de la catequesis a una Persona: Jesús de Nazaret, el Unigénito del Padre; muerte
y resucitado (cf. CIC 426). Por tanto, entiende que catequizar es descubrir en la Persona de Cristo el designio eterno de Dios (CIC 426).
4. 4 15 de octubre de 2023
Celebración de la fiesta patronal en honor
a Nuestra Señora del Rosario en la Iglesia
El Rosario
El sábado 7 de octubre, la Iglesia El
Rosario vivió momentos de gran fervor y
alegría al conmemorar su fiesta patronal
en honor a Nuestra Señora del Rosario. La
emotiva celebración fue presidida por el
párroco Fray Néstor Alvarado, OP, y contó
con la participación de los sacerdotes Luis
Salomón, OSJ, y Hairo Edmundo Escobar.
El día siguiente, 10 jóvenes de la
parroquia recibieron el sacramento de la
Confirmación, fortaleciendo su vínculo
espiritual y recibiendo los dones especiales
del Espíritu Santo. La Santa Misa de
Confirmación fue presidida por Monseñor
José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San
Salvador, quien en su conmovedora homilía
alentó a los jóvenes a mantener su fidelidad
y docilidad al Espíritu Santo.
También Mons. José Luis Escobar Alas
destacólaimportanciadeundíasignificativo
en San Salvador, el 80 aniversario de un
evento histórico que marcó el inicio de una
profunda devoción a la Santísima Virgen
Nuestra Señora del Rosario. Hace ocho
décadas, el primer obispo de El Salvador,
Monseñor Jorge de Viteri y Ungo, regresó
de Roma después de su consagración en
1842. Su primer gesto simbólico al regresar
fue depositar su mitra y su báculo a los pies
de la Santísima Virgen, confiriendo a esta
imagen el papel de Patrona de la diócesis de
San Salvador.
En su relato, Mons. Escobar Alas también
recordó los desafíos históricos a los que
se ha enfrentado la comunidad, desde
la persecución en el siglo XIX hasta el
devastador incendio de la Catedral en 1951,
que tomó medio siglo en reconstruir. Bajo
nuestro antecesor Monseñor Sáenz la Calle,
en 1999, se logró la bendición de la Catedral
restaurada, un hito importante en la historia
de la diócesis. El incendio de la Catedral
resultó en la pérdida de valiosos tesoros,
incluyendo la imagen de la SantísimaVirgen
Nuestra Señora del Rosario. Estos desafíos
históricos, junto con otras dificultades,
han impedido que la diócesis celebre
adecuadamente a la Santísima Virgen como
su Patrona, aunque se agradece a los Padres
Dominicos por mantener esta tradición viva.
Mons. Escobar Alas anunció la
adquisición reciente de una nueva imagen
de la Santísima Virgen Nuestra Señora del
Rosario, ahora presente en la Catedral. Con
esto, se comprometió a comenzar a celebrar
a la Santísima Virgen como la Patrona de
la Arquidiócesis de San Salvador, con el 7
de octubre marcado como una festividad
importante tanto en la parroquia de Nuestra
Señora del Santo Rosario como en toda la
arquidiócesis. Se hizo un llamado a todos
los sacerdotes de la diócesis a unirse a esta
celebración en honor a la Santísima Virgen,
destacando que la Catedral también se unirá
a la festividad con un espíritu de alegría en
esta ocasión patronal.
Celebración de la Santa Misa patronal en
honor a Nuestra Señora del Rosario. De
Izda. A Decha.: Padre Luis Salomón, Fray
Néstor Alvarado y el Padre Hairo Edmundo
Santa Misa de Confirmación
5. 5
15 de octubre de 2023
Historia de Nuestra Señora del
Rosario en El Salvador
La antiquísima talla de la Virgen del
Rosario de San Salvador data del año 1551,
cuando los frailes Dominicos se trasladaron
al Valle de las Hamacas para establecer el
convento Santo Domingo de Guzmán y
dedicarse a la misión por la defensa de los
nativos. Este se construyó en el terreno que
hoy ocupa la actual Catedral Metropolitana.
Allí, los frailes hacían un arduo trabajo de
evangelización, a tal grado que la iglesia
conventual se volvió un lugar de referencia
en San Salvador.
La preciosa imagen de estilo gótico
colonial coronaba una de las naves de la
iglesia de los Dominicos, y en la otra nave
se encontraba la imagen del Bienaventurado
Domingo. Pero, la figura materna de María
era más llamativa para los nativos, porque
veían no solo la belleza de la imagen, sino
que también aprendieron a invocar su
protección como lo hacían los frailes cada
vez que se reunían a rezar. Por eso, era lógico
que ante los abusos de los colonos contra
los nativos aquella “Mujer Hermosa”, pues
así identificaban a la imagen era quien los
ampararía del peligro.
Posteriormente, la devoción a la Virgen
del Rosario creció tanto que se constituyó la
Cofradía del Santísimo Rosario, pues así lo
describenlasactasde1617queseencuentran
en el convento Santo Domingo de Guzmán
de San Salvador. En estas mismas actas se
detallacómonacieronlasperegrinacionesde
todos lados hacia el Santuario del Rosario,
cómo se desarrollaron las Tres Súplicas y el
sentido del Domingo de la Rosa.
Los peregrinos de la Virgen del
Rosario
En documentos del Arzobispado de San
Salvador se encuentra que desde 1609, en
el mes de octubre los habitantes del Valle de
las Hamacas tenían la tradición de reunirse
en la Iglesia conventual de los Dominicos
para visitar a la Virgen del Rosario. Debido
a las grandes distancias que la gente tenía
que recorrer para llegar hasta allí, el primer
domingo de octubre se le llamó el Día de
los peregrinos de la Virgen del Rosario. Su
mayoría eran campesinos que traían en sus
manos flores para dar gracias a la Madre de
Dios por el éxito de las cosechas y por la
protección que concedía a todos sus hijos.
Domingo de la Rosa
Con el tiempo, los devotos de la Virgen del
Rosario también comenzaron a organizar
peregrinaciones el primer domingo del mes
de mayo, trayendo consigo flores y velas
para pedir por la siembra y las lluvias que
iniciaban.Demaneraque,alprimerdomingo
de mayo se le comenzó a llamar “Domingo
de la Rosa”, quizás no tanto por el tipo de
flor, porque las rosas no eran, ni son hoy en
día las más comunes en suelo salvadoreño,
sino más bien la palabra “rosa” aludía a los
cientos de rezos del santo rosario, ya que los
frailes predicaban que cada rosario que se
rezaba a la Madre del Cielo era una rosa de
quien lo rezaba.
Las Tres Súplicas
Poco tiempo después, los frailes
comenzaron a organizar en oraciones las
necesidades más comunes que traían los
peregrinos. Las actas que datan de 1617
describen algunas de estas súplicas: por las
semillas que habían sido sembradas, por el
éxito de la futura cosecha y por el bienestar
de los habitantes de la villa de El Salvador.
Estas son súplicas que se realizaban el
primer domingo de mayo. Pero los frailes
comenzaron a notar que después de las
súplicas y las celebraciones matutinas, por
las tardes continuaban llegando multitudes
de peregrinos y comenzaron a considerar
que las Tres Súplicas y la Santa Misa debían
hacerse en una ahora adecuada, en la que
la mayoría de peregrinos hubiesen llegado
hasta la casa de la Virgen del Rosario. De
allí que hasta el día de hoy Las Tres Súplicas
y la Misa Solemne se realizan a las 12 del
mediodía, tanto el primer domingo de mayo
como el primer domingo de octubre.
Los patronatos de la Virgen del
Rosario
Escrito por: Ever Castillo
Historia de Nuestra iglesia
Historia de Nuestra iglesia
Iglesia del Rosario a finales de los ochenta
Foto de tarjeta postal - 1916
Continúa en la siguiente pág.
6. 6 15 de octubre de 2023
El 7 de octubre de 1843, el primer obispo
de El Salvador, Monseñor Jorge de Viteri
y Ungo, en una solemne eucaristía en su
catedral, proclamó a la Virgen del Rosario,
Patrona de la República junto al Divino
Salvador, que a diferencia de la Virgen, Él es
Titular de la nación; también fue nombrada
Patrona de la nueva diócesis.
En 1870 los frailes Dominicos junto
con todos los demás religiosos fueron
expulsados del país por políticas liberales.
Por ello, el reverendo Miguel Funes, padre
diocesano, gran promotor de la Santísima
Virgen del Rosario, asumió el encargo de ser
custodio de la imagen de la Madre de Dios
y de Santo Domingo. En 1873 monseñor
José Luis Cárcamo y Rodríguez, obispo de
San Salvador, ordenó la construcción de un
nuevo santuario para la venerada imagen de
la Virgen del Rosario porque el que existía
había quedado dañado por el terremoto de
ese mismo año.
Desde 1900, el padre Miguel Funes inició
una serie de gestiones para ver la posibilidad
de traer de vuelta a los frailes Dominicos
a El Salvador. Gestión que tuvo éxito el 3
de julio de 1902 cuando los frailes toman
posesión del convento Santo Domingo de
Guzmán y de la iglesia El Rosario. En este
mismo año, el padre Miguel Funes entró a
la Orden de Predicadores.
Coronación pontificia
En 1940, el excelentísimo Señor
Arzobispo de San Salvador, monseñor
Luis Chávez y González, los frailes
Dominicos y la Cofradía del Santísimo
Rosario solicitaron al Papa Pío XII, corona
y rosario de oro para la venerada imagen.
El Santo Padre respondió a esta solicitud
con las correspondientes Letras Pontificias
que ordenaban la coronación de la Madre
de Dios, y delegó para el solemne acto al
mismo Señor Arzobispo. En el santuario
de la Virgen del Rosario iniciaron los
preparativos que correspondían a la
preparación de dicha actividad que fue
dispuesta para realizarse, el 25 de noviembre
de 1942 dentro de las actividades del Primer
Congreso Eucarístico.
Dentro de las notas históricas del convento
Santo Domingo de Guzmán se encuentra
una circular de los padres Dominicos y de
la Cofradía del Santísimo Rosario que dice
así: A todas las personas de buena voluntad
que deseen regalar algún objeto de oro,
piedras preciosas, perlas o brillantes para la
corona y el rosario de la Virgen del Rosario,
tengan la bondad de hacerlo en esta iglesia
El Rosario. El comité organizador de la
Coronación pontifica dispuso también que
se realizara un triduo preparatorio para tal
acontecimiento.
Por eso, el 22 de noviembre de 1942
se realizó por la noche, el primer día
preparatorio donde se expuso el Santísimo
Sacramento y predicó en este santuario,
el excelentísimo señor arzobispo de San
José, Costa Rica, monseñor Víctor Manuel
Sanabria Martínez. El segundo día, en otra
vigilia de oración con Jesús Eucaristía
predicó el Arzobispo de Guatemala,
Monseñor Mariano Rosell y Arellano. El
tercer día preparatorio predicó el obispo
Primado de México y finalmente, el día
de la Coronación pontificia ante 200 mil
personas, la Virgen del Rosario se convirtió
en la Reina del Valle de las Hamacas.
Después que la venerada imagen regresó
a su santuario permaneció abarrotado de
multitudes que venían a saludar a la que
hasta entonces era la Patrona de El Salvador.
En esa vigilia, ante Jesús Sacramentado
predicó el Excelentísimo Señor Arzobispo
de Managua, Monseñor Antonio Lezcano y
Ortega (cf. Memoria del Primer Congreso
Eucarístico).
En 1960 los padres Dominicos y la
Cofradía del Santo Rosario dispusieron que
la Virgen del Rosario pasara por un urgente
y serio proceso de restauración, ya que la
imagen presentaba un gravísimo deterioro
por el paso de más de cuatro siglos. El
escultor español Manuel Romero Ortega fue
el encargado de esta delicada tarea. En este
mismo año, el padre Alejandro Peinador
OP, inició el proyecto de construcción de
un nuevo santuario para la Reina del Valle
de las Hamacas. El proyecto contemplaba
una verdadera catequesis de la Trinidad
que se convertiría en la casa de la Virgen
del Rosario. El mismo Papa Juan XXIII es
quien supervisó personalmente el nuevo
santuario y en 1971 fue inaugurado el
templo de la Santísima Virgen María del
Rosario, gracias a los miles de devotos y el
arte y visión del arquitecto Rubén Martínez.
Monseñor Jorge de Viteri y Ungo
Coronación pontidica por Mons.
Luis Chávez y González
7. 7
15 de octubre de 2023
Formación de los seminaristas
dimensión humana: Semana
cultural 2023
En el Seminario Propedéutico San José
de la Montaña, se llevó a cabo la Semana
Cultural 2023, un evento que se desarrolló
del 25 al 27 de septiembre y que ha marcado
un hito en la vida de la institución por
segundo año consecutivo. El tema central
de esta edición fue "Mons. Arturo Rivera y
Damas, su vida y obra en la Iglesia y en la
sociedad salvadoreña".
Durante la primera jornada de esta semana
cultural, se profundizó en el tema "Su vida,
vocaciónymisiónenlaIglesiaqueperegrina
en El Salvador". La ponencia estuvo a cargo
del Dr. Jaime Rivera Damas, hermano de
Mons. Arturo Rivera, quien brindó una
visión íntima y perspicaz de la vida del
ilustre obispo. Además de la conferencia,
los seminaristas mostraron sus habilidades
artísticas en un concurso de dibujo, pintura
y artes plásticas.
La comunidad San Mateo presentó con
orgullo su primera obra en este evento
cultural.
El segundo día de la Semana Cultural
2023, se enfocó en las "Aportaciones de
Mons. Arturo Rivera y Damas en el proceso
de diálogo por la paz en El Salvador". El
Pbro. Benito Tobar fue el encargado de
impartir esta ponencia, explorando el papel
fundamental que desempeñó Mons. Arturo
Rivera en la búsqueda de la paz en la nación.
Además, los seminaristas participaron
en un concurso de canto, componiendo y
entonando piezas musicales preparadas
especialmente para esta ocasión.
La comunidad San Marcos presentó la
obra "EL SEÑOR DE LAS MOSCAS", que
cautivó al público presente.
El tercer día de la Semana Cultural, se
abordó el tema "Aporte pastoral de mons.
Arturo Rivera y Damas como arzobispo de
San Salvador", en una ponencia impartida
por el Pbro. Jaime Paredes. Este día
también vio la participación activa de
los seminaristas en concursos de poesía
y oratoria, destacando sus habilidades
literarias y retóricas.
La comunidad San Lucas presentó con
entusiasmo su obra titulada "EL GRAN
TEATRO".
La Semana Cultural 2023 en el Seminario
Propedéutico San José de la Montaña ha sido
una celebración en honor a Mons. Arturo
Rivera y Damas, un evento enriquecedor
que ha permitido a la comunidad académica
y religiosa profundizar en la vida y obra
de este destacado líder de la Iglesia y la
sociedad salvadoreña.
Oración para pedir un
favor por intercesión de
los Beatos Padre Rutilio
Grande, Nelson Lemus y
Manuel Solórzano
¡Oh Dios! Padre de Nuestro Señor
Jesucristo, que infundiste en los
Beatos Padre Rutilio Grande S.J.,
Nelson Rutilio Lemus y Manuel
Solórzano, amarte con todo su
corazón y una fe inquebrantable en tu
Hijo Jesús y le concediste en el seno
de la Iglesia el don de unirse a la
pasión de tu Hijo Jesucristo mediante
el martirio en el camino de la
celebración Eucarística.
Dígnate glorificar a tu Siervos Padre
Rutilio,NelsonyManuelyconcédeme
por su intercesión el favor que te
pido...(Hacer la petición). Amén.
Padre Nuestro, Ave María y
Gloria.
8. 8 15 de octubre de 2023
Acabamos de recordar la horrible tragedia
del 10 de octubre de 1986, cuando un fuerte
terremoto estremeció San Salvador y sus
alrededores causando más de mil muertos.
Monseñor Rivera se encontraba en Panamá,
en una reunión de obispos, y nos cuenta
en su Diario cómo vivió esta dolorosa
experiencia. Este es su testimonio:
Viernes 10 de octubre de 1986
A las dos p.m. me comunicó el Padre
Director que había habido un fuerte
terremoto en San Salvador, con varios
soterrados en edificios desplomados. Esto
me hizo cambiar de opinión y comencé a
dar modo de volver a San Salvador.Alas 3 y
30 Monseñor Rosa y yo fuimos conducidos
por el Padre Wagner y Cecilia; casi al
mismo tiempo que bajo una fuerte lluvia
llegamos al aeropuerto Omar Torrijos, llegó
Monseñor McGrathj que nos palanqueó
para que COPA nos recibiera… A las 6 p.m.
despego el avión de COPA. Iba repleto...
Llegamos finalmente a San Salvador…
Entre Santo Tomás y San Marcos
comenzamos a percibir, los estragos del
sismo, puentes averiados y ondulación en la
autopista. A medida que entrábamos a San
Salvador, los efectos eran más visibles…
Nuestro arzobispado de tres cuerpos había
sido severamente dañado, especialmente
el primer piso, la entrada y la residencia…
Salimos a ver a mi familia, luego a Santa
Anita para visitar a la familia de Monseñor
Rosa. La gente dormía en las calles, les
animamos y a algunas le dimos la absolución
general…
Recorrimos la zona del edificio Rubén
Darío, aplastado como un acordeón en
toda la manzana, menos el edificio Pacífico
Hasbún. Animamos, rezamos, dimos la
absolución y una conferencia de prensa.
De allí fuimos al hospital Rosales. Nos dijo
el director, Doctor Chaín, que habían sido
atendidos cerca de tres mil heridos hasta
ese momento. Había muchos médicos,
practicantes y personal de enfermería. Su
actitud era de trabajo. Fuimos de allí a San
Jacinto, Candelaria, La Vega, Santa Anita y
luego a la planta de la KL en San Ramón.
Como nuestro jeep de vidrios polarizados
despertó sospecha, anduvimos como una
hora para dar con el lugar; las direccione
que nos daban no eran correctas. Finalmente
llegamos y grabamos un mensaje. Era la
una y treinta y cinco del once de octubre.
Volvimos a casa, dormimos en el garaje, en
el suelo. ¡Qué descanso! Me despertó un
temblor a las 6 a.m
Sábado 11 de octubre:
Hoy salió un bello comunicado, una vez
revisado por Monseñor Rosa, “Solidarios
en el dolor y unidos en la esperanza”. Se
creó una comisión central y subcomisiones.
Ese día se trabajó duro y ordenadamente…
Recé el breviario a mordiscos, feo pues
no era mi costumbre. Almorzamos a las
2:00 p.m. Dormí siesta bajo un árbol
de limón. Hubo a las 2 y 40 minutos un
temblor fuerte. Por la tarde atendí la visita
de Monseñor Pablo Tschang. Le mostré
la casa y los daños. Me dijo que el Santo
Padre oraba por El Salvador. Las hermanas
carmelitas me pasaron al seminario, donde
escribí, después de la homilía, el diario
correspondiente al 10 y 11 de octubre. El
seminario casi no ha sufrido daños. Voy a
rezar vísperas y completas y a dormir se ha
dicho.
10. 10 15 de octubre de 2023
Pbro. José M. Tojeira
El 2 de octubre celebramos el día
mundial de la no violencia. La fecha
se puso en honor de Mahatma Gandhi,
que nació precisamente en ese día. Aun
siendo un hindú convencido respetaba
profundamente el cristianismo y
especialmente a la persona de Jesús. En
algún momento dijo que el Sermón de
la Montaña, del Evangelio de Mateo:
“me llegó directamente al corazón”.
Especialmente el mandato de amar
al enemigo, hacer el bien a quienes
odian y bendecir a los que maldicen.
Le escandalizaba que los cristianos
creyéramos en Jesús y al mismo tiempo
hiciéramos guerras, fuéramos racistas o
quisiéramos tener pueblos dominados
colonialmente. Su espíritu pacifista
iluminó a muchos cristianos.
La fe cristiana, a pesar de los fallos
históricos que hayamos tenido, es una
fe pacifista. El Evangelio no deja duda
al respecto. E incluso a lo largo de los
siglos, lo mejor de la fe cristiana lo
hemos encontrado siempre en personas
pacifistas. Martin Luther King es
un símbolo para todos. Era cristiano
bautista y encabezó una verdadera
revolución pacífica contra el racismo
existente en Estados Unidos. Entre
nosotros Monseñor Romero, hoy
San Óscar Romero, es un símbolo
de pacifismo y de solidaridad con
las víctimas de la violencia. Todos
recordamos sus frases reflexionando
sobre la violencia en nuestro país:
“Sepan que hay una violencia muy
superior a la de las tanquetas y
también a la de las guerrillas; es la
violencia de Cristo: Padre perdónalos,
porque no saben lo que hacen”. Jesús
clavado en la cruz, perdonando a sus
victimarios, tenía más fuerza y poder
para iluminarnos a todos, que quienes
lo habían sometido al suplicio. En
otra homilía recordaba también que
la victoria está, en el largo plazo, no
de parte de quienes utilizan la fuerza
bruta sino de quienes practican esa paz
costosa y sacrificada que él llamaba “la
violencia del amor, la de la fraternidad,
la que quiere convertir las armas en
hoces para el trabajo”. Mons. Rivera,
cuyo centenario estamos celebrando
bajo el lema “artesano de la paz” es
un claro ejemplo de la fe, laboriosidad
y racionalidad que conlleva el trabajo
insistente por la paz.
Cuando el odio en las redes es
frecuente y salpica la política, cuando
el insulto y la irracionalidad sacuden la
convivencia ciudadana, los cristianos,
defendiendo siempre la verdad del
amor, de la justicia y de la paz, debemos
mantenernos siempre en la propuesta
racional, en la preocupación por los
más pobres y en el deseo de que nuestra
historia avance hacia la fraternidad y la
justicia social. El Papa Francisco,
insistiendo en el pacifismo cristiano,
nos recordaba que “la agresividad social
encuentra en los dispositivos móviles y
ordenadores un espacio de ampliación
sin igual”. Sabiendo que los discursos
de odio pueden convertirse fácilmente
en delitos de odio, los cristianos
debemos rechazar todo aquello que
lleva a la confrontación, al rencor y a la
violencia. El pacifismo no nos exime de
responsabilidades, sino que nos relanza
a construir una sociedad más tolerante,
amistosa y sobre todo fraterna y
solidaria con los que sufren. Recordar
a nuestros mártires y artesanos de paz
debe llenarnos de fortaleza y de pasión
por traer a nuestra tierra los valores del
Reino de Dios presentes en el Evangelio
del Señor Jesús.
No violencia y fe cristiana
11. 11
15 de octubre de 2023
DIRECTORIO
Daniel González
Diseño y Corrección
Pbro. Simeón Reyes
Editor
Pbro. Carlos Chavarría
Colaborador
Pbro. Edwin Henríquez
Director
Oración para pedir un
favor por intercesión
del Beato Fray Cosme
Spessotto, O.F.M
Oh Dios y Padre de Nuestro, que
los méritos de tu Hijo muy amado
Jesucristo y Su Santísima Madre,
y la acción del Espíritu Santo,
concediste a tu Siervo Fray
Cosme Spessotto, OFM,
la gracia de ser un Pastor
ejemplar en defender los
derechos de Cristo y de
la Iglesia, promoviendo la
reconciliación y la paz,
socorriendo a los pobres,
necesitados y aflijidos
Haz, Señor, que yo pueda
también vivir el Santo Evangelio
de tu hijo y dígnate glorificar a
tu Siervo Cosme Spessotto, y
concédeme, por tu intercesión, el
favor que te pido.. (Hacer una
petición). Amén.
Padre Nuestro, Ave María y
Gloria.
Vida de Santos
Celebración de San Lucas
Evangelista
El 18 de octubre es un día especial para
la Iglesia Católica, ya que en esta fecha
se celebra la festividad de San Lucas
Evangelista. San Lucas, conocido como
"el médico gentil", desempeñó un papel
crucial en la historia del cristianismo y dejó
un legado importante que perdura hasta
nuestros días.
Según el historiador Eusebio, San Lucas
nació en Antioquía de Siria y era de origen
gentil, lo que significa que no era judío. Su
conversión al cristianismo y su asociación
con San Pablo son aspectos destacados
de su vida. San Pablo, en su Carta a los
Colosenses, lo menciona como "Lucas, el
médico querido", lo que demuestra la estima
que tenía por él. A lo largo de su vida, San
Lucas mostró una sensibilidad particular
hacia la evangelización de los gentiles,
destacando en su Evangelio parábolas y
relatos que enfatizaban la misericordia de
Dios para con todos.
La relación de San Lucas con San Pablo es
un tema relevante en su biografía. A través
de los Hechos de los Apóstoles, podemos
seguir su colaboración con el apóstol Pablo
en su misión de difundir el cristianismo.
San Lucas acompañó a San Pablo en
varios viajes y momentos cruciales de su
ministerio, demostrando su compromiso
con la causa. Incluso cuando Pablo estuvo
en cautiverio en Roma, Lucas permaneció a
su lado, siendo su fiel compañero.
Uno de los aspectos más notables de
San Lucas Evangelista es su enfoque en
la misericordia y el amor de Dios. Su
Evangelio contiene parábolas y relatos que
resaltan la importancia de la compasión,
el perdón y la acogida de los pecadores
arrepentidos. Algunas de las parábolas más
conocidas, como la del Buen Samaritano
y la del Hijo Pródigo, se encuentran en el
Evangelio de Lucas.
Además de su contribución al Evangelio,
San Lucas también mantuvo una relación
especial con la Virgen María. Gracias a él,
conocemos detalles de la vida de María,
como la Anunciación, la visita a su prima
Isabel y el cántico del "Magnificat". Su
narrativa detallada y su sensibilidad hacia
estos eventos han llevado a la creencia
de que San Lucas era un pintor, capaz de
plasmar con palabras la belleza de estos
momentos.
Aunque las circunstancias exactas de
su muerte son inciertas, algunas fuentes
sugieren que podría haber sido martirizado.
Sin embargo, otros relatos afirman que vivió
una vida larga y fructífera, dedicada a la
difusión de la fe cristiana. La tradición más
antigua señala que murió en Beocia a la edad
de 84 años, después de haberse establecido
en Grecia para escribir su Evangelio.