El documento discute los resultados deficientes de las pruebas realizadas a estudiantes que se están preparando para ser docentes. El autor, Enrique Moradiellos, argumenta que para tener una educación de calidad, los maestros primero deben adquirir sólidos conocimientos en sus disciplinas antes de enseñarlas. También señala que las filosofías y antropologías actuales en la pedagogía y didáctica son demasiado pragmáticas y formales.