2. 7.1Reacción Social en la Antigüedad
En las sociedades arcaicas la reacción social frente a
conductas o sujetos considerados como peligrosos o dañinos
a la sociedad, consistía instintivamente en infligir un sacrificio
o sufrimiento al delincuente, encaminado casi siempre a
quitarle la vida. La base sobre la que descansaba esta reacción
social era la existencia de valores universales, algunos
comprensibles a nivel intersubjetivo, otros irracionales, que
todos los individuos aceptaban cumplir y respetar.
3. Las máximas éticas se encontraban en los libros sagrados
ponderados en esa época y la violación a una norma
implicaba una ofensa a la divinidad.
Era común en esa época encontrar incongruencia entre el
comportamiento considerado criminal y la reacción social que
conducía a penas extremadamente crueles y
desproporcionadas.
La pena que siempre acompañaba a la reacción social, como
decíamos, era la de muerte, con muy diversas modalidades:
despeñamiento, lapidamiento, apaleamiento, enterramiento,
hoguera, descuartizamiento, etc.
4. 7.2 Reacción Social en México
Prehispánico.
En el primer caso se habla, de la mujer náhuatl, y
de todas las mujeres de las culturas
contemporáneas de la mexica. Para poder
entender su contexto cultural, necesitamos
situarnos en el ambiente en que vivían, el cual era
extraordinariamente rígido por las normas tan
estrictas que lo regían, y en el que toda conducta
humana estaba previamente determinada.
5. en el ambiente de los siglos XIV y XVI, había
múltiples causas de angustia, además del
determinismo mencionado. Por las normas sociales y
religiosas en las que casi toda infracción a las mismas
era castigada con la muerte.
6. Por ejemplo:
.- SE APLICABA LA PENA DE MUERTE A:
La persona adúltera, la homosexual.
la transvestista.
la alcohólica.
la ladrona.
la hechicera.
a la mujer que abortaba.
la medica que daba el remedio para el aborto.
la escandalosa, etc.
7. La mujer acusada de adulterio, comparecía ante los jueces y si se
comprobaba el delito, de inmediato se le daba muerte, se descuartizaba el
cuerpo y se les repartían los pedazos entre los testigos.
La adultera también era castigada, con autorización de los jueces por el
propio marido, quien en publico le cortaba la nariz y las orejas. En cambio
el marido adultero, cuando sus relaciones extramaritales las efectuaba con
una mujer soltera, no se le castigaba.
A las lesbianas las ajusticiaban a ambas ahogándolas.
La indisciplina. Entre las adolescentes era castigada punzándoles los
brazos, las piernas y las orejas con espinas de maguey y se les rapaba
públicamente.
El alcoholismo. Moría apedreada.
Robo. La ladrona moría apedreada en el mismo sito del robo.