La normalización tiene como objetivo establecer reglas y normas para especificar, unificar y simplificar elementos científicos y tecnológicos. Esto simplifica el diseño y reducción de costos, facilita la intercambiabilidad de productos, y ofrece garantías de calidad. Aunque la normalización puede limitar la inspiración personal y frenar el progreso técnico, las normas se revisan para contribuir al desarrollo continuo de la técnica.
ACERTIJO EL NÚMERO PI COLOREA EMBLEMA OLÍMPICO DE PARÍS. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
Dibujo de piezas_normalizadas
1. D I B U J O D E P I E Z A S N O R M A L I Z A D A S
LA NORMALIZACION
La normalización tiene por objeto establecer una serie de reglas, directrices, o normas, destinadas a
especificar, unificar y simplificar las características de los elementos que intervienen en multitud de
aplicaciones científicas y tecnológicas.
SIMPLIFICAR: seleccionar los elementos que reúnan las características más convenientes, y racionalizarlas al
máximo, a fin de obtener formulaciones más sencillas y procedimientos de fabricación más aconsejables y a
menor coste.
ESPECIFICAR: definir los materiales, dimensiones, etc., a fin de evitar todo error sobre su identidad. Esta
identificación conduce a precisar la terminología y nomenclatura de los productos, incluyendo la determinación
de los métodos de comprobación que regulan la calidad de los mismos.
UNIFICAR: adoptar las medidas necesarias para favorecer la intercambiabilidad de los productos, reduciendo
la gama de productos fabricados.
VENTAJAS E INCONVENIENTES DE LA NORMALIZACION
Algunas ventajas que lleva consigo la aplicación correcta de la normalización son las siguientes:
Para el productor:
1. Disminuye el volumen de materiales y productos almacenados.
2. Reduce el número de tipos a fabricar y los utillajes a emplear.
3. Simplifica el trabajo y aumenta el rendimiento.
4. Simplifica el diseño, y provoca una reducción de los tiempos de fabricación y de los costes de
producción.
Para el distribuidor:
1. Facilita un vocabulario exacto que agiliza los pedidos, entregas y controles.
2. Elimina o reduce en gran medida los productos rechazados por los clientes.
Para el consumidor:
1. Ofrece garantías precisas de calidad, regularidad, seguridad e intercambiabilidad.
2. Permite que la formulación en los pedidos se haga de una manera mucho más fácil.
Para la economía en general:
1. Permite la mejora de la producción en calidad y en cantidad.
2. Aumento de la productividad.
3. Mayores posibilidades de venta de los productos, tanto en los mercados nacionales como
internacionales.
4. Facilita el entendimiento entre la oferta y la demanda.
No obstante, lo anterior no exime a la normalización de algunos reproches, entre los cuales se pueden citar
los siguientes:
1. La influencia negativa que ejerce sobre los componentes estéticos al introducir en ellos la uniformidad,
limitando la inspiración personal.
2. 2. La normalización con sus definiciones, códigos y reglas, tiende a estabilizar la técnica y a frenar el
progreso. Este reproche no tiene fundamento, pues, las normas son elementos vivos que admiten
cuantas revisiones se precisen para contribuir al desarrollo de la técnica.
REPRESENTACION, ACOTACION Y DESIGNACION DE PIEZAS NORMALIZADAS
En la inmensa diversidad de mecanismos y máquinas en general, una gran cantidad de piezas accesorias
que los componen, tienen unas formas y dimensiones ya predeterminadas en una serie de normas, es decir,
son piezas normalizadas.
Entre las piezas normalizadas utilizadas habitualmente, podemos destacar las siguientes: tornillos, tuercas,
espárragos, pasadores, chavetas, arandelas, rodamientos, engrasadores, etc.
En general, la utilización de piezas normalizadas facilita en gran medida la labor de delineación; ya que al
utilizar este tipo de piezas, evitamos tener que realizar sus correspondientes dibujos de taller. No obstante,
tendremos que dibujar piezas normalizadas cuando realicemos el dibujo de conjunto de un mecanismo; para
lo cuál, tendremos que consultar las normas correspondientes.
En la lista de piezas que acompaña al dibujo de conjunto, designaremos este tipo de piezas de una manera
inequívoca, según normas; de esta forma, se podrán elaborar los presupuestos y realizar las compras
pertinentes a los suministradores.
Normalmente, estos suministradores suelen ser empresas especializadas en la fabricación en grandes
cantidades de unos determinados tipos de piezas, por ejemplo: tornillos; en consecuencia, se pueden
adquirir éstos a precios muy competitivos.
Cuando, por razones especiales, se ha de fabricar una pieza normalizada en el propio taller, es preciso
confeccionar el correspondiente dibujo de taller, según los datos suministrados por la norma correspondiente.
Esta norma especificará: forma, dimensiones, tolerancias, materiales y demás características técnicas.