La innovación educativa ha existido desde tiempos antiguos cuando se buscaban nuevas formas de facilitar el aprendizaje. A lo largo de la historia, varios idealistas lucharon por hacer que la educación estuviera disponible para más personas. En 2002, la UNESCO inició un esfuerzo para que los recursos educativos como libros, material multimedia y programas de computadora estuvieran disponibles de forma gratuita para cualquier estudiante, con el fin de enriquecer y facilitar el aprendizaje.