Este documento resume los aspectos clínicos y diagnósticos de la enfermedad de Alzheimer. Explica que el diagnóstico de demencia es clínico y debe ajustarse a criterios estandarizados como los del DSM-IV o NIA-AA. También destaca la importancia de las medidas no farmacológicas como la estimulación cognitiva y el tratamiento multidisciplinar, así como el seguimiento de pacientes con deterioro cognitivo leve.