El documento define el pleno empleo como una situación en la que todos los factores productivos de una economía, incluido el trabajo, se utilizan completamente. Explica que un pequeño nivel de desempleo friccional o voluntario es aceptable. También señala que lograr el pleno empleo es un objetivo deseable por sus beneficios económicos y sociales, pero que existen enfoques divergentes sobre cómo alcanzar esta meta entre keynesianos y liberales.