La hemofilia es una enfermedad genética recesiva ligada al cromosoma X que causa un defecto en los factores de coagulación VIII o IX y provoca hemorragias espontáneas o tardías tras traumatismos. Afecta todos los aspectos de vida de los pacientes y aunque es poco prevalente, impacta fuertemente los sistemas de salud. El diagnóstico se basa en la historia clínica, examen físico y análisis de laboratorio de los factores de coagulación.