La PCR es una técnica que permite amplificar una secuencia específica de ADN. Requiere ADN molde, cebadores, enzima Taq polimerasa, nucleótidos y solución buffer. Consiste en ciclos repetidos de desnaturalización, hibridación y elongación para duplicar la secuencia de interés. Tiene aplicaciones como detección de mutaciones y diagnóstico de enfermedades.