3. 3EL NUEVO SIGLODOMINGO 7 DE JUNIO DE 2020
EL NUEVO SIGLO MIÉRCOLES 16 DE MAYO DE 2018
EDITORIALESEL NUEVO SIGLO VIERNES 24 DE ABRIL DE 2020
EL NUEVO SIGLO MIÉRCOLES 16 DE MAYO DE 2018
EDITORIALESDOMINGO 7 DE JUNIO DE 2020
3
Directores Eméritos:
Alvaro Gómez - Juan Pablo Uribe Fundado el 1 de Febrero de 1936
ELNUEVOSIGLO
Director Adjunto: Alberto Abello - EDITORES: Contenido: José Peñuela; Multimedia: Claudia Bermúdez; Redacción: Carlos Higuera - Gustavo Veloza
Gerente Administrativa y Financiera: Melany Chiari CaballeroDirector General: JUAN GABRIEL URIBE VEGALARA O
Fundadores:
LaureanoGómez-JosédelaVega
L
D GXUDFLyQ GH ODV PHGLGDV GH FRQ¿QD-
miento social que se han tomado en
Colombiaparahacerfrentealapande-
mia del Covid-19 está ya considerada como
de las más largas en todo el planeta. Y no es
para menos, ya que desde el 24 de marzo
el Gobierno ordenó a más del noventa por
ciento de la población que permaneciera en
sus casas como fórmula para frenar el nivel
de contagios y muertes por este coronavirus.
De hecho, para los habitantes de la capital
del país y Cundinamarca la cuarentena ha
sido mayor en la medida en que el encierro
comenzó unos días antes en el marco de
un ejercicio pedagógico pero obligatorio en
todo caso.
Desde un comienzo los expertos en sa-
lud pública fueron claros en advertir que
ante la inédita experiencia de la cuarentena
debía ponerse especial atención no sólo a la
urgencia de evitar infectarse con una enfer-
medad viral de alto grado de transmisión,
sino que también era imperativo evaluar el
LPSDFWR TXH HO FRQ¿QDPLHQWR WHQGUtD HQ OD
salud mental de una población que, como
la colombiana, no había experimentado
nunca esta clase de limitaciones drásticas
a su movilidad y relacionamiento familiar,
social y colectivo.
3DVDGRDPiVGHXQWULPHVWUHGHFRQ¿QD-
miento en el país es claro que las patologías
mentales han aumentado. De hecho, las
autoridades y el sistema de salud activaron
gradualmente una serie de herramientas
para poder orientar a las familias encerradas
en sus casas sobre cómo manejar casos de
ansiedad, depresión, pánico patológico y
otras desórdenes cuya prevalencia podría
aumentar por cuenta de la cuarentena, la in-
certidumbre por los efectos de la pandemia,
la irrupción del teletrabajo y las tensiones
propias de que toda la familia estuviera de
forma permanente en sus casas. Incluso una
de las primeras alertas que se prendió fue
la relativa al riesgo de que se dispararan los
casos de violencia de género e intrafamiliar.
Según varios estudios de expertos publi-
cados en este Diario, aunque la mayoría de
los colombianos ha sabido sobrellevar las
tensiones derivadas de la larga cuarentena,
en algunos casos la salud mental sí se ha
visto afectada. Incluso esos desórdenes
han tenido más incidencia en personas
que padecen algunas patologías físicas o
cuyo temor de infectarse ha sido mayor por
sufrir de algunas de las comorbilidades que
más complican a quienes se contagian de
Covid-19. De esta forma ya no se trata de
enfrentar episodios de depresión, ansiedad
y estrés postraumático, sino del peligro de
que se pueda desembocar en otras mani-
festaciones psicosomáticas. A ello se une
el temor y desespero de muchas personas
por el riesgo de perder su empleo o por no
tener la posibilidad de salir a trabajar para
solventarsusnecesidadesmásbásicas,como
la alimentación, pago de servicios públicos,
arriendos y otro tipo de obligaciones.
De allí la importancia de seguir las re-
comendaciones de los sicólogos y demás
expertos, más ahora que en Colombia está
aumentando la curva de contagios y decesos,
no sólo porque nos acercamos a lo que puede
serelpicoepidemiológicosinotambiéncomo
consecuencianormaldequeexistaunamayor
cantidaddepersonascirculandoporlascalles
debido a la reactivación gradual de una parte
de las actividades productivas y laborales.
Se requiere, por tanto, que las familias
puedan contar rápidamente con la asesoría
de profesionales en caso de que alguno de
sus integrantes evidencia algún tipo de ines-
tabilidad mental. La intervención temprana
es clave para enfrentar cualquier contin-
gencia. De igual manera resulta imperativo
que se apliquen algunas recomendaciones
EiVLFDV TXH KDQ VLGR OR VX¿FLHQWHPHQWH VR-
cializadas por múltiples medios a lo largo de
esta larga cuarentena. Se trata de cuestiones
sencillas como las de no ‘intoxicarse’ con el
alud de informaciones falsas e inexactas que
circulan sobre la crisis sanitaria. También
es importante reinventar, aprovechando la
tecnología, la socialización con seres queri-
dos, sobre todo con los niños y los adultos
mayores sobre quienes se mantienen las
medidas de restricción de movilidad más
altas. Es muy útil también conocer los sín-
tomas físicos y mentales de los desórdenes
psicológicos para poder actuar con más di-
ligencia. A todo lo anterior debe sumarse la
necesidad de generar en la casa alternativas
para el descanso, la relajación así como para
la desconexión del teletrabajo y las obliga-
ciones académicas que se están adelantando
por vía digital.
Como se dijo, afortunadamente la gran
mayoría de los colombianos ha sabido ade-
cuarse a las limitaciones de esta etapa de
FXDUHQWHQD 6LQ HPEDUJR FRPR HO FRQ¿QD-
miento puede prolongarse algunas semanas
más, hay que hacer todo lo posible para
mantener la salud mental en casa así como
para detectar cualquier señal de alarma en
la materia. No es una etapa fácil para el país
ni el mundo, pero la esperanza de superar
este desafío es cada día más grande.
Amedida que avanza la emergencia sanitaria
por el Covid-19 es necesario ir pensando en
FXiOHV VHUiQ ODV IXHQWHV GH ¿QDQFLDFLyQ D TXH VH
acudirá para sufragar el plan de contingencia
implementado por el Gobierno para frenar la
curva de muertes y contagios, así como el plan
de reactivación nacional una vez se dé por su-
perada la crisis pandémica.
Hasta el momento se han puesto sobre la
PHVD GLVWLQWDV DOWHUQDWLYDV SDUD SRGHU ¿QDQ-
ciar todo el plan de contingencia, que algunos
cálculos ya sitúen en no menos de 60 billones
de pesos hasta 120 billones, dependiendo del
EDODQFH ¿QDO GH GDxRV TXH VH KDJD XQD YH]
¿QDOLFH OD FULVLV
Inicialmente, como se sabe, el Gobierno
GHFLGLy DFXGLU D OD ¿QDQFLDFLyQ H[WHUQD VREUH
todo acudiendo a los cupos de endeudamiento
que tiene Colombia con la banca multilateral,
especialmente con el Fondo Monetario Inter-
nacional. Pero también se ha acudido a fondeo
con el Banco de la República a través de dis-
tintas herramientas destinadas a dar liquidez
y respaldar las herramientas presupuestales
de apoyo a las empresas en medio de la crisis
sanitaria.
$ HOOR VH VXPD OD SRVLELOLGDG GH EXVFDU ¿QDQ-
ciamiento en el mercado interno de capitales.
Por ejemplo, esta semana se indicó que ante
la muy segura caída en las proyecciones de
recaudo tributario el Gobierno acudiría a una
mayor emisión de Títulos de Tesorería (TES)
GHQRPLQDGRV HQ SHVRV D WDVD ¿MD /D QRYHGDG
sería que el plazo estaría a 30 años.
Según el Director de Crédito Público del
Ministerio de Hacienda este sería el primer
bono TES colombiano a 30 años de duración,
por lo que la idea es expandir esas obligaciones
en el tiempo y buscar las mejores tasas posibles.
Cuando arrancó este mandato presidencial el
SOD]R Pi[LPR HQ WDVDV ¿MDV HUD GH DxRV
Como se sabe, los TES son papeles de deuda
pública expedidos por el Gobierno Nacional y
administrados por el Banco de la República.
6X REMHWLYR HV REWHQHU ¿QDQFLDFLyQ SDUD ODV
actividades del Estado y se emiten mediante un
sistema de subasta. Colombia tiene la ventaja
que por la solidez de su economía y la seriedad
en el manejo de su deuda, los inversionistas
nacionales e internacionales siempre compiten
por comprarlos.
Para esta emisión de bonos a 30 años el Go-
bierno ya seleccionó a Bancolombia, CitiBank
y al Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA),
como los bancos que ayudarán en la transac-
ción. Estas entidades son las 3 primeras en el
ranking del programa de Creadores de Merca-
GR TXH FXHQWD FRQ LQVWLWXFLRQHV ¿QDQFLHUDV
y que cada semana colaboran con este tipo de
subastas.
Salud mental, otra prioridad
O Cuarentena y tensiones psicológicas
O Aprender a detectar señales de alarma
EL NUEVO SIGLO
Los bonos TES a treinta años
4. 4 EL NUEVO SIGLO DOMINGO 7 DE JUNIO DE 2020OPINIÓN
Si bien es cierto el desafío que
la pandemia le plantea a las
finanzas del Gobierno central
es gigantesco, el reto para las
entidades territoriales no es
menor. Acaso pudiera decirse
que guardadas las proporciones
es aún mayor.
A uno y a otras la emergencia
les ha derrumbado sus recaudos
tributarios; pero la capacidad de
maniobra del Gobierno para enfrentar la
emergencia vía un mayor endeudamiento
es mayor que la que tienen los depar-
tamentos y municipios. Estos últimos
reciben en primera línea las angustias de
las familias afectadas por el desempleo. Y
sus rentas son especialmente sensibles al
FRQ¿QDPLHQWR FLXGDGDQR D OD FHUUD]yQ
del comercio
Como lo ha señalado Mauricio Cabrera
en un artículo reciente, durante abril de
este año comparado con igual mes del año
pasado, los ingresos de los departamentos
desplomaron 45%. Cuando salgan los
datos consolidados de los municipios las
cifras serán todavía más inquietantes. Sus
principales rentas han sido especialmente
DIHFWDGDV SRU HO FRQ¿QDPLHQWR FRPR HO
impuesto de industria y comercio), ade-
más de haber tenido que diferir el pago
de impuestos tan importantes para la vida
¿VFDO GH ORV PXQLFLSLRV FRPR HO SUHGLDO
Para Bogotá se calcula que a lo largo
del 2020 la caída de los ingresos tributa-
ULRV VHUi GHO RUGHQ GH XQ ELOOyQ GH SHVRV
Y la Alcaldía de la Capital calcula que el
derrumbe del PIB local podrá estar este
año entre el 4% y el 8%.
A todo lo anterior viene a sumarse la
profunda crisis en que han caído los siste-
mas de transporte masivo, primero con el
FRQ¿QDPLHQWRFLXGDGDQROXHJRFXDQGR
ODV DFWLYLGDGHV HFRQyPLFDV HPSLH]DQ D
reactivarse, con el perentorio límite que
se les ha impuesto por razones
de salubridad del 35%.
Las cifras para el Transmile-
nio de Bogotá son bien elocuen-
tes, pero seguramente las de las
otras grandes ciudades donde
existen sistemas de transporte
PDVLYR QR GL¿HUHQ HQ JUDYHGDG
Se calcula que Transmilenio
está perdiendo $43.000 millo-
nes por semana, lo que le abre
un hueco en cifras anualizadas del orden
de $ 800.000 millones. Faltante que viene
siendo asumido por el llamado “fondo de
HVWDELOL]DFLyQ WDULIDULD´ TXH PDQHMD HO
Distrito, pero que obviamente no aguan-
WDUi PXFKR WLHPSR VLQ FRODSVDU ¿QDQFLH-
ramente. A no ser que se renegocien los
contratos que existen con los operadores
TXH JDQDQ SRU NLOyPHWURV UHFRUULGRV DVt
OOHYHQ XQD FDUJD GH SDVDMHURV GHO
(VWD UHQHJRFLDFLyQ SDUHFH LPSUREDEOH
El SITP está enfrentando igualmente
XQD VLWXDFLyQ FDODPLWRVD $OJXQDV DXWRUL-
GDGHV GLVWULWDOHV KDQ D¿UPDGR TXH FRPR
van las cosas, al Transmilenio y al SITP les
TXHGD FRPEXVWLEOH ¿QDQFLHUR KDVWD DJRV-
to. El Gobierno tendrá que ayudar a los
sistemas de transporte masivo del país. Ya
OD DOFDOGHVD GH %RJRWi PHQFLRQy TXH HQ HO
Palacio de Nariño le habían ofrecido algún
WLSR GH FR¿QDQFLDPLHQWR DQWH WDQ JUDYH
HPHUJHQFLD 2MDOi VH FRQFUHWH SURQWR
Pero el problema de los sistemas de
transporte públicos es general. El con-
¿QDPLHQWR FLXGDGDQR OHV KD SURSLQDGR
XQ WHUULEOH JROSH /D 8QLyQ ,QWHUQDFLRQDO
de Transporte Público informa que los
sistemas en Europa incurrirán este año en
pérdidas tarifarias de €40.000 millones.
El Gobierno ha dictado dentro del mar-
co de la emergencia algunas normas que
vanenayudadelasentidadesterritoriales,
la última de las cuales fue el decreto 678
del 2020. Esta norma les permite orientar
UHQWDV GH GHVWLQDFLyQ HVSHFt¿FD KDFLD QH-
cesidades urgentes; les da un plazo mayor
D ORV FUpGLWRV GH WHVRUHUtD ÀH[LELOL]D OD OH
617 del 2000 para facilitar los procesos de
HQGHXGDPLHQWR GH DWHQFLyQ D ORV JDVWRV
de funcionamiento, entre otras medidas.
3HUR VRQ FODUDPHQWH LQVX¿FLHQWHV
Casi todas las entidades territoriales
tienen margen en la actualidad para au-
mentar sus índices de endeudamiento.
%RJRWi FRORFy H[LWRVDPHQWH XQ ERQR GH
deuda pública por $600.000 millones.
Pero si todas las grandes municipalidades
salen al mismo tiempo al mercado habrá
un gran desorden y muy probablemente
ODVWDVDVGHLQWHUpVPRVWUDUtDQXQDSUHVLyQ
alcista inconveniente.
El Europa se viene discutiendo una
ILJXUD GHQRPLQDGD ³PXWXDOL]DFLyQ GH
OD GHXGD´ TXH FRQVLVWH HQ TXH DQWH ODV
grandes necesidades de recursos que
esta emergencia plantea para los países
PLHPEURV GH OD 8QLyQ (XURSHD XQD VROD
entidad, el Banco Central Europeo, coloca
los títulos de deuda pública que luego
distribuiría entre los países miembros. La
GHXGD ¿QDOPHQWH TXHGD HQ FDEH]D GH ORV
miembros pero se evita el desorden y que
el mercado discrimine en cuanto a costos
y condiciones entre unos países y otros.
Algo parecido podría pensarse para
Colombia. El Gobierno colocaría al por
mayor deuda pública que luego distribui-
ría entre las entidades territoriales que
requieren afanosamente de recursos para
hacerle frente a esta grave emergencia. La
deuda queda en cabeza de las territoriales
HQ OD SURSRUFLyQ TXH VH GH¿QD 3HUR VH
evita el desorden en que se caería si todas
pretenden concurrir al mismo tiempo al
mercado de deuda.
/D VLWXDFLyQ ¿VFDO TXH DIURQWD WDQWR HO
Gobierno como las entidades territoriales
HV DSUHPLDQWH /OHJy HO PRPHQWR GH SHQ-
VDU IyUPXODV LPDJLQDWLYDV
No se puede tapar el sol con las
manos.Enestecaso,elsolesla
inmensidaddepersonasdenuestro
país -y del mundo- que viven en
condiciones muy precarias. Ahora,
FRQ RFDVLyQ GH OD FXDUHQWHQD HVWD
UHDOLGDG KD VDOLGR D OD VXSHU¿FLH
de manera contundente. Entre las
distintassugerenciasinteresantese
inteligentesquesehacenparaabrir-
OH FDPLQR GH ELHQHVWDU GH¿QLWLYR D
HVWD SREODFLyQ VH HQFXHQWUD OD GH OD UHQWD
EiVLFD 8Q WHPD FRPSOHMR SHUR TXH ELHQ
vale la pena estudiarlo para ver si contiene
solucionesreales.Suideabásicaesquetodo
ciudadano,cuandoporsusmediosnopueda
lograr lo mínimo necesario para vivir bien,
recibirá del Estado una renta que le supla
HVD GH¿FLHQFLD 1R SXHGH VHU XQD VXPD GH
$80.000, $100.000, $350.000, pues con
esonadievivedecentemente.Tienequeser,
encifrasactuales,algomuysuperior.Y,esto,
multiplicadopormiles,daunasmillonadas
que asustan. Pero ahí está la calve: no hay
asustarse.
Al proponer este tema, especialmente
en Colombia, veo que muchos analistas
entran en pánico. Aparentemente por
UD]RQHV HFRQyPLFDV ¢GH GyQGH
va a salir ese dinero? Pregunta
MXVWL¿FDGD GHVGH WRGR SXQWR GH
vista. Pero pienso que a ratos les
asusta más el que toda la gente,
no unos cuantos, lleguen a vivir
bien, que todos puedan hablar
PLUDQGR D ORV RMRV TXH WRGRV
tengan la oportunidad de escoger
lo que quieren en la vida pues
tienen medios para hacerlo, que
desaparezca todo un grupo poblacional
que no hace sino obedecer y aguantar
porque no tiene otra forma para subsistir.
Cuando las personas tienen asegurados
ORV PHGLRV HFRQyPLFRV SDUD YLYLU ELHQ
ganan en autonomía, en sentido de sus
derechos, se sube su autoestima, piensan
por sí mismos, etc. Y todo esto puede ser
LQFyPRGR SDUD TXLHQHV VLJXHQ WHQLHQGR
una idea vertical de la sociedad.
Creo que vale la pena y es necesario que
HQRORPELDKDJDPRVHOHMHUFLFLRGHSHQVDU
FRQ LOXVLyQ SHUVHJXLU FRQ HPSHxR OD PHWD
dequenadiepasehambre,nadiecarezcade
WHFKRQLGHHGXFDFLyQVDOXG/RVSULPHURV
EHQH¿FLDGRV GH HVWD VLWXDFLyQ VHUtDQ ORV UL-
cos, a los cuales ya no miraría con sospecha
tanta gente. Pero el tema es poner dinero
en las manos de todos los colombianos que
no lo han logrado por sus propios medios.
Aunquehabrávividoresqueseinstalaránen
lavagancia,lagranmayoríadepersonasse-
JXUDPHQWH OR TXH KDUi HV PHMRUDU VX IRUPD
GH YLGD (VH HV HO SURSyVLWR
R QR FUHR TXH QR KDD GH GyQGH VDFDU
plata. Ahora, en emergencia, el dinero ha
aparecido y por billones. Nuestros hacen-
distas han sido prudentes y racionales en
HO PDQHMR GHO GLQHUR S~EOLFR /HV IDOWD
una dosis más alta de riesgo sano para
impactar más positivamente a los más
pobres. La clave: dinero en la mano: no
tantos bonos, ni subsidios, ni suscripcio-
nes. Dinero contante y sonante, como si la
gente fuera adulta, no niños incapaces de
resolver sus retos. Entre los muchos mie-
dos que gobiernan la vida en Colombia,
uno tiene que ver con aceptar que todos
somosigualesyportantodeberíamosvivir
igualmente bien. La pandemia puede ser
OD RFDVLyQ SDUD URPSHU SDUDGLJPDV GH
desigualdad que algunos creen que son
mandato divino. En la Biblia se repite
PXFKtVLPDV YHFHV ³QR WHQJDQ PLHGR´ 1R
aplican restricciones.
Juan Camilo
Restrepo
No temer a la igualdad
Rafael de
Brigard, Pbro
Las entidades territoriales en la pandemia
SH FHOHEUy HO YLHU-
nes pasado el día
mundial del medio am-
biente, día que fue ins-
tituido por la Asamblea
General de la Organi-
]DFLyQ GH ODV 1DFLRQHV
8QLGDV HO GH MXQLR GH
1972, coincidiendo con
eliniciodelaConferen-
cia de Estocolmo sobre
HO $PELHQWH (VH PLVPR GtD XQD UHVROXFLyQ
GHO PLVPR IRUR GLR RULJHQ D OD FUHDFLyQ GHO
Programa de las Naciones Unidas para el
0HGLR $PELHQWH 3QXPD
5. Tradicionalmente, este día se convierte en
un evento multimedia que inspira a periodis-
WDV EORJXHURV D KDFHU UHSRUWDMHV HQWXVLDVWDV
y críticas acerca del medio ambiente. Es un
acontecimiento visual con documentales
WHOHYLVLYRV H[KLELFLRQHV IRWRJUi¿FDV GHV-
plegados, así como un evento intelectual
para aquellos que organizan y participan en
seminarios, mesas redondas y conferencias.
Para no ser menos, desde esta columna
queremos unirnos al clamor general por darle
a la gente el impulso necesario para convertir-
se en agentes activos del desarrollo sostenible;
promoviendo un entendimiento en donde las
comunidades sean fundamentales en las acti-
tudes de cambio hacia los temas ambientales
desde las diferentes perspectivas del tema.
(O IXQGDPHQWR HSLVWHPROyJLFR GH OD FHOH-
EUDFLyQ HVWi IXQGDPHQWDGR HQ EXVFDU TXH ORV
seres humanos nos convirtamos en agentes de
desarrollo sostenible, siendo actores y partes
fundamentales del tema.
Lamentablemente parece que debo repetir
el símil utilizado en días pasados, en el que
aseveré que las celebraciones ambientales
que hacemos los seres humanos, equivalen a
OD FHOHEUDFLyQ GHO FXPSOHDxRV TXH KDFHQ ORV
maltratadores a las personas maltratadas. No
es una simple frase, se basa en hechos, datos
y cifras reales.
Hoy por hoy más de 20 millones de hectá-
reas de bosques se pierden en el mundo anual-
mente, sin incluir las grandes extensiones que
son degradadas por prácticas forestales des-
tructivas, que no es del caso enumerar. A su
vez, el planeta ha perdido alrededor del 39%
de sus ecosistemas naturales en los últimos 35
DxRV DO WLHPSR TXH OD SUHVLyQ VREUH OD WLHUUD
se ha incrementado en más del 53% durante
el mismo período de tiempo, principalmente
debido al aumento en los patrones de consu-
mo sobre los recursos naturales renovables y
OD FRQWDPLQDFLyQ
Estos indicadores aportados por el Pro-
grama de las Naciones Unidas para el Medio
Ambiente -Pnuma-, dicen qué “tales presiones
H[FHGHQ OD FDSDFLGDG GH UHJHQHUDFLyQ TXH SR-
see la biosfera de nuestro planeta para recupe-
rarse, con lo cual estaríamos encaminándonos
a una inminente debacle ambiental, de no
lograrse un cambio sostenible en los patrones
GH FRQVXPR GH ORV UHFXUVRV QDWXUDOHV´
DEH HQWRQFHV SUHJXQWDUVH ¢XiOHV VRQ
las políticas de estado que permitan detener
el deterioro y revertir la tendencia? La pan-
GHPLD QR SXHGH VHU GLVFXOSD SDUD GHMDUQRV
abandonados a nuestra suerte.
alsanchez2006@yahoo.es
@alvaro080255
Día del medio
ambiente (I)
Álvaro
Sánchez
6. 5EL NUEVO SIGLODOMINGO 7 DE JUNIO DE 2020 OPINIÓN
PalosaEl poder para qué
Tenemos un lla-
mado a conti-
nuar nuestro pro-
ceso de integración,
la actualización de
esa posibilidad de
encarnar la totali-
dad que somos y esa
totalidad mayor de la
cual hacemos parte.
No es un reto ni
un desafío, palabras prove-
nientes del lenguaje de la
guerra y de la competencia;
es una ruta consciente que
podemostransitar,cadaquien
a su ritmo y en sus tiempos.
Tenemos la potencialidad de
vivir mejor cada día; para ello
necesitamos dejar de sobrevi-
vir. Muchas de las relaciones
que establecemos son de su-
pervivencia: una relación de
pareja que no es armónica,
pero que se mantiene por con-
vencionalismo familiar, social
o con la excusa de un supuesto
bienestar de los hijos; una
enfermedad contra la cual
luchamos, pues aún no reco-
nocemos que es una maestra
maravillosa y que aloja un
sentido profundo para nues-
tras vidas; o la confrontación
permanente con el mundo
exterior, tan imperfecto y en
continua creación como no-
sotros mismos.
Los vínculos que estable-
cemos afuera no son sanos
porque aún no tenemos una
relación sana con nosotros
mismos. A medida que vamos
integrando todas nuestras
experiencias -para lo cual una
acciónfundamentalesagrade-
cer todo lo que hemos vivido,
sin excepción alguna-, pode-
mos integrar a los demás, tal
como son, no como quisiéra-
mos que fueren. Una
vez podemos recono-
cer nuestra totalidad
inherente, también
vemos en las demás
personas su propia
totalidad particular y
abrazar sus sombras,
penumbras y luces
desde la consciencia
de las propias. Es jus-
tamente ahí donde el amor
FRPR IXHU]D VH PDQL¿HVWD HQ
lo concreto. Cuando recono-
cemos que en esta experiencia
encarnada tenemos un cami-
no, con avances y retrocesos,
coherenciasycontradicciones,
y cuando asimismo compren-
demos que todo ello es preciso
para aprender y trascender,
nos podemos amar sin con-
diciones. Nos hacemos uno,
nos integramos en nosotros
mismos.
Esa incondicional acepta-
ción propia es la base para que
el amor como fuerza se revele
en la relación con los otros y
lo otro. La idealización de las
demás personas o de las rela-
ciones conlleva una temprana
o tardía frustración. Sin em-
bargo, en la medida en que
nos podemos admitir como
somos la aceptación de los
demás y de todo lo que sucede
dejará de ser una lucha para
convertirse en una resultante
de esa aprobación interior sin
ambages. El amor, ese orden
implicado, se hace presente
en el acto de amar, el orden
explicado. Cuando podemos
comprender esto se hace fac-
tible el amor propio y el amor
a otros, en forma sana. Amar
a otra persona es reconocerla
en su totalidad, honrarla es
darle su lugar.
¿Quién iba a pensar que
una convocatoria de
una reunión del G-7 hecha
desde Washington caería
en el vacío?
Pero así ha sido. No
más conocerse la iniciati-
va del presidente Trump,
presentada como un “gran
signo, para todos, del re-
torno a la normalidad”
(¡en medio de una pandemia que
está lejos de haber remitido!), la
canciller Merkel descartó de plano
laposibilidaddeconcurrir. Elpresi-
dente Macron, por su parte, advirtió
que,silosdemássociosdelgrupono
seapersonaban,éltampocoloharía.
Y cuando, de manera tan impruden-
te como inconsulta, Trump expuso
su intención de transformar el G-7
en un G-11 -Rusia incluida-, acabó
de arruinar sus propios planes. Ca-
nadá rechazó cualquier posibilidad
de recibir a Rusia, “por su continuo
irrespeto y desdén de las normas
internacionales”.
Y el gobierno de Boris Johnson
anticipó su veto a semejante ocu-
rrencia, en tanto el Kremlin “no cese
su actividad agresiva y desestabili-
zadora, que amenaza la seguridad
de los ciudadanos del Reino Unido
y la seguridad colectiva
de nuestros aliados”. Con
todo lo cual, no habrá por
ahora cumbre del G-7.
Ni en Washington, ni en
Mar-a-Lago, donde quiso
Trump que tuviera lugar
LQLFLDOPHQWH SDUD EHQH¿-
ciar, de paso, sus negocios.
¿Quién iba a pensar
que Estados Unidos re-
cibiría lecciones sobre derechos y
libertades no sólo de rivales y con-
tradictores,sinoinclusodecercanos
aliados?
Pero así fue. Al fragor de las
protestassuscitadasporelasesinato
del señor Floyd en Minneápolis, el
jefe de la diplomacia europea ex-
presó su preocupación por “el uso
excesivo de la fuerza policial”. La
Comisión, por su parte, pidió que
se respetaran el Estado de Derecho
y los derechos humanos. La Unión
Africana denunció las “continuas
prácticas discriminatorias contra
los ciudadanos negros de los Esta-
dos Unidos”. Y con cínica ironía, un
portavoz de Pekín replicó lacónica-
mente -I can’t breathe- al reclamo
de Washington por las medidas re-
cientemente adoptadas en relación
con Hong Kong.
¿Quién iba a pensar que, en
lugar de la foto de los expresiden-
tes en el rosedal de la Casa Blanca
-recurrente en momentos cruciales
que, como el presente, reclaman la
mayor unidad- habría una solitaria,
provocadora y profanadora imagen
del titular en ejercicio -Biblia en
mano- ante un templo convertido
en tinglado de la impudicia?
¿Quién iba a pensar que un ex-
VHFUHWDULR GH 'HIHQVD FDOL¿FDUtD DO
Presidente en cuyo gabinete sirvió
de “amenaza a la Constitución”?
¿Que el actual jefe del Pentágono
tomaría distancia explícita del man-
datario, en sintonía con el rechazo
que sus instrucciones provocaron
HQ GHVWDFDGRV R¿FLDOHV HQ UHWLUR
en activo, del ejército más poderoso
del mundo?
¿Quién iba a pensar que el In-
ternational Crisis Group -que habi-
tualmente se ocupa de Siria, Libia,
Yemen y otros Estados a su juicio
“débiles” o “colapsados”- fuera a
pronunciarse alguna vez sobre su
propio país?
Y,sinembargo,asífue. Estosson
los signos de estos tiempos. Quien
los pueda leer, que lea. Y quien quie-
ra entender, que entienda.
*Analista y profesor de Relaciones Internacionales
Una vez más Wall
Street sorprende a
los que anunciaban el
fatal hundimiento del
sistema financiero y el
colapso económico de
esa gran potencia por
cuenta de la tragedia
del Covit-19. Las fuerzas
productivas de esa na-
ción, aún en medio de la maraña
GH GL¿FXOWDGHV HO JROSH WHUULEOH
que ha sufrido la gran manzana y
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gran parte de la Nación, donde
numerosos cronistas llegaron in-
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capitalismo, hoy se sorprenden con
la capacidad de reactivación de que
da muestras el país gobernado por
Donald Trump.
En medio de los pronósticos
negativos y duras críticas al go-
bernante que intenta reactivar la
economía a todo trance, pese a los
riesgos que implica trabajar en
medio de la penosa infección que
agobia a todos, es evidente que los
opositores al gobierno en medio de
la virulenta campaña presidencial,
apuestan a que el país se hunda
con Trump, para aparecer ellos
como los salvadores y conseguir
los votos para llegar al poder. Más
cuando se usa el desgraciado inci-
dente de la muerte de un activista
por cuenta de los excesos de un
policía, que ha provocado
la protesta de millones de
seres en ese país y en el
exterior.
En parte la reacción po-
pular masiva se debe a la
tensión que existe en la
conciencia colectiva por
cuenta del peligro del con-
tagio del virus así como del
encierro y la perdida de millones de
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algo así como el fin del mundo,
de su mundo, que parece crujir
en sus cimientos con la tendencia
a desplomarse. Algo que agobia
los nervios de los políticos, de los
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dustria, de la banca y los negocios
de toda índole, como de la gentes
del común, cuyos ahorros se han
esfumado y no sabe cómo van a
sobrevivir mañana. Esa acumu-
lación de factores negativos en la
conciencia colectiva, para utilizar
un término de Jung, ha convertido
la forzosa cuarentena en una suerte
de olla exprés o bomba de tiempo.
Siendo así la presencia masiva de
las gentes en las calles confrontadas
con la policía, más el cumulo de
asaltos y destrozos, puede quizás
servir para drenar las heridas y
calmar a las masas que gritan y se
agitan en las grandes urbes, hasta
cuando se sienten un tanto libe-
radas y regresan a sus casas, sus
barrios o la cuadra en donde pasan
la mala hora que los oprime. Puesto
que ellos, también, son parte del
país, así se encuentren en oposición
ciega al gobierno de turno, y estén
siendo motivados por agitadores y
elementos que buscan la destruc-
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que luego de la tormenta puede
venir una calma incierta.
Los Estados Unidos contra la
predica de los economistas y analis-
tasnativoseinternacionales,capita-
neadaporTrump,consigueenmayo
2.5 millones de nuevos empleos,
al tiempo que se reduce la tasa de
desempleo al 13,3%. Cuando, según
informaban los distintos medios, se
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millones de nuevos desempleados.
Después de haber pasado por una
largaetapadeplenoempleodurante
el actual gobierno, la pandemia
derribó 20 millones de puestos
de trabajo, por lo que ésta alza en
el empleo es un indicador que el
país puede recuperarse antes de lo
calculado por los más pesimistas.
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está superando el coronavirus y
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dispuesto por el gobierno y los
cheques a los más necesitados para
reactivar el consumo, se produce
esté fenómeno de reacción positiva
frente al malestar social y político
causado por el virus.
Alberto
Abello
Andrés
Molano-Rojas*
El renacer de Estados Unidos
¿Quién iba a pensarlo?
Ser amor (3)
Eduardo
Vargas M.
ESENCIA
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