Los lípidos se absorben desde el intestino y se transportan en la sangre en forma de quilomicrones. Los quilomicrones transportan triglicéridos, fosfolípidos, colesterol y proteínas al tejido adiposo y otros órganos, donde la lipoproteína lipasa hidroliza los triglicéridos para su uso o almacenamiento. Los restos de los quilomicrones y otros lípidos se transportan unidos a lipoproteínas como VLDL, IDL, LDL y HDL. El colesterol se sintetiza en el hígado