La consolidación osea es el proceso de regeneración ósea que restaura las propiedades biomecánicas del hueso tras un traumatismo. Este proceso involucra cuatro fases: inflamatoria, reparadora, de osificación y remodelación. La consolidación puede ser directa u indirecta, dependiendo del tratamiento y la estabilidad de la fractura. Factores como la inmovilización inadecuada pueden modificar la consolidación o causar un retraso o pseudoartrosis en la curación.