Este documento describe la importancia de la educación artística y el desarrollo del pensamiento creativo en los estudiantes. La educación artística ayuda a los estudiantes a expresar sus emociones y desarrolla habilidades como la observación, imaginación, memoria, análisis, interpretación y creatividad. La enseñanza del arte también mejora la actitud hacia el aprendizaje, fomenta el crecimiento personal y el desarrollo de la capacidad crítica.

1. MÓDULO III
CONSTRUCCIÓN DE HABILIDADES DE PENSAMIENTO
MODELOS CREATIVOS DE APRENDIZAJE EN Y PARA LA VIDA.
HABILIDADES DEL PENSAMIENTO Y CREATIVIDAD EN LA ENSEÑANZA DE
EDUCACIÓN ARTÍSTICA.
Elaboro: Araceli Vega Sánchez.
06 de Junio del 2015

2. La educación artística es el método de enseñanza que ayuda al sujeto a canalizar
sus emociones a través de la expresión artística. En este sentido, este tipo de
educación contribuye al desarrollo cultural del hombre. La educación artística se
ubica en el campo formativo de desarrollo personal y para la convivencia.
La enseñanza en el área de educación artística se basa en un enfoque formativo de
expresión y apreciación artística. En el se favorece la competencia artística cultural
que se conceptualiza como: una construcción de habilidades perceptivas y
expresivas que dan apertura al conocimiento de los lenguajes artísticos (artes
visuales, expresión corporal y danza, música, teatro) el fortalecimiento de las
actitudes y los valores que favorecen el desarrollo del pensamiento artístico,
mediante experiencias estéticas para impulsar y fomentar el aprecio, la
comprensión y la conservación del patrimonio cultural.

3. Para lograrlo es necesario promover la creación del pensamiento artístico mediante
la sensibilidad, la percepción, la imaginación y la creatividad, así como apreciar la
cultura como bien colectivo.
La competencia artística y cultural implica la utilización de conocimientos,
habilidades, valores y actitudes que le permiten al alumno comprender e interpretar
críticamente las manifestaciones del arte y de la cultura, expresar ideas y
sentimientos con capacidad estética y creadora por medio de los código presentes en
los lenguajes artísticos.
La Educación Artística permite sentir, explorar, conocer y transformar la realidad a
la vez que facilita el desarrollo integral y armónico de las cualidades humanas. La
presencia del arte en la educación favorece la comprensión y expresión de la
belleza. Su propósito, por tanto, es el desarrollo de la sensibilidad estética, el
despertar de los procesos creadores y la ampliación de los potenciales personales,
posibilitando profundizar en el papel del arte como una esencial e irrenunciable
forma de conocimiento.

4. Los propósitos de la educación primaria están organizados a partir de
competencias y habilidades entendidas sintéticamente como la capacidad de utilizar
el saber adquirido para aprender, actuar y relacionarse con los demás.
Las habilidades del pensamiento que se promueven y desarrollan en el área de
educación artística son: la observación, la imaginación, la memorización, el
análisis, la interpretación, la representación, la creatividad.
Son habilidades que puede desarrollar cada individuo con el propósito de crear
mejoras en un entorno determinado, que comprende actividades psicomotoras,
cognitivas y afectivas.

5. La creatividad es, la pequeña luz que todas las personas tenemos, creada por medio
de nuestros sentimientos, pensamientos e imaginación.
Con la educación artística el alumno enfrenta situaciones que lo llevan a poner en
practica su creatividad, a producir ideas que la desarrollen y fortalezcan, tomar
decisiones, responder a retos y resolver problemas de forma creativa.
El reto de la educación en la escuela es buscar las maneras o estrategias para que ese
potencial creativo que lo niños llevan en el momento de su ingreso encuentre
puertas para la expresión.
Por lo que es importante y necesario acercar a los alumnos a experiencias que
despierten su ingenio y curiosidad.

6. La escuela de hoy necesita clases creativas, necesita un profesor que como guía del proceso
docente asuma la necesidad de educar para el cambio, de formar individuos creativos y originales
con una mentalidad productiva e innovadora.
La enseñanza de la educación artística genera unos determinados efectos como: la mejora de la
actitud respecto a la escuela y al aprendizaje, un mayor conocimiento de la identidad cultural y
una sensación de satisfacción personal y bienestar, la vitalidad de la sensibilidad, el fomento del
crecimiento personal, el desarrollo de la capacidad crítica, el fortalecimiento de la estima propia
y la comprensión de la realidad en que se vive.
Una educación que se potencia a través de la enseñanza de las artes contribuye a mejorar los
resultados académicos, reducir la apatía escolar, establecer una relación de calidad con el medio
ambiente que difícilmente se da en otras materias de conocimiento, e incentivar el aprecio por la
diversidad, la libertad de expresión, la capacidad crítica y la tolerancia.