Este documento discute el uso de tecnologías de la información y comunicación (TIC) en la educación chilena. Aunque las TIC están ampliamente disponibles, a menudo no están bien integradas en el currículo escolar y se usan como un fin en sí mismas en lugar de como herramientas de aprendizaje. Los docentes a menudo carecen de la capacitación adecuada para usar efectivamente las TIC en el aula. Se necesita un mayor enfoque en integrar las TIC de manera invisible en el proceso de enseñanza y apre
1. Universidad de Santiago de Chile
Facultad de Ciencias
Departamento de Matemática y Ciencias de la Computación
Licenciatura en Educación Matemática y Computación
Las TIC en la educación chilena: Dentro del aula, fuera de contexto
Actualmente, las tecnologías ligadas a la información prácticamente están en todo
lo que nos rodea. Si queremos enterarnos de los últimos acontecimientos
noticiosos que ocurren dentro de nuestro país o al otro lado del mundo, tenemos
acceso a información en tiempo real y desde diversas fuentes, no tan solo las
convencionales de hace algunos años, para así formar nuestra opinión al
respecto. Algo similar ocurre dentro del aula de clases. En algunos
establecimientos se ha realizado una fuerte inversión para incorporar nuevas
tecnologías, siempre con el propósito de lograr mejores resultados. Sin embargo,
cabe preguntarse sobre estas, ¿están realmente contextualizadas a la realidad
escolar chilena? Más aún, ¿está la comunidad escolar preparada para
incorporarlas curricularmente y lograr aprendizaje en base a estas?
El por qué de esta pregunta nace en primer lugar desde la experiencia personal.
Hace algunos años, la concepción que tenían los alumnos sobre las clases de
computación en el colegio es que eran para ir a “chatear” o buscar juegos en
Internet. Muchos docentes, en base a esto, se formaron una mala opinión respecto
a llevar a los alumnos a la sala de enlaces, considerando esto como una pérdida
de tiempo, una distracción o algo que no era de real ayuda para el aprendizaje.
Cabe mencionar que hoy en día muchos profesores aún mantienen esa
percepción sobre los elementos relacionados con tecnología en clases.
Sin embargo, que esto ocurriera era algo bastante obvio. La tecnología, si bien no
era nueva, todavía no tenía un propósito final, los software educacionales eran de
gráficas pobres y temáticas típicamente destinadas a niños de enseñanza básica,
pues estaban en desarrollo. Los docentes no estaban totalmente capacitados para
2. trabajar con estos elementos y los alumnos, al ver esto, inconscientemente
generaban la percepción de que esto no servía demasiado y que era un rato libre.
Como se ha mencionado recientemente, uno de los motivos principales de esto
era la poca capacitación de los docentes. Según Jaime Sanchez, en su artículo1
del año 2003, podemos definir tres niveles para la integración de TIC de parte del
docente:
Apresto, que es el proceso en que el docente comienza a conocer las
herramientas, pero no necesariamente tienen un fin educativo. El enfoque
está puesto en las TIC.
Uso de TIC implica el conocimiento y primeras intenciones para usarlas en
diferentes tareas, pero sin tener un propósito curricular claro. Si bien son
utilizadas para apoyar actividades educativas, tanto al docente como al
alumno les cuesta enfocarse en el proceso de enseñanza aprendizaje y se
concentran más en la tecnología. Nuevamente, el enfoque está puesto en
las tecnologías, no en el proceso educativo.
Integración de TIC (o Integración Curricular de TIC) es lograr embeberlas
en el curriculum educativo con un fin claro. La tecnología no es el centro,
sino que es una herramienta más para lograr un propósito mayor, que es el
aprendizaje. El docente tiene un nivel de manejo alto de las tecnologías,
logrando hacer estas invisibles dentro del proceso educativo, tanto para él
como para los alumnos.
Volviendo a la actualidad, tanto los docentes como los estudiantes de pedagogía
tenemos un mayor nivel de manejo de tecnologías. Ambos hemos tenido cursos,
los docentes de capacitación y especialización, y los futuros profesores tenemos
cursos dedicados a la computación integrados en nuestras mallas curriculares. Sin
embargo, desde mi perspectiva, seguimos cometiendo errores que ocurrían hace
10 años. Se ha realizado una gran inversión en algunos establecimientos, incluso
apoyados por planes de gobierno, para así comprar tecnologías como notebooks,
netbooks, tablets, proyectores, programas de capacitación para docentes, etc. Sin
embargo, la tecnología sigue siendo el eje central de las clases. Tomemos el
3. ejemplo que se cita en la noticia2
sobre el colegio British Royal School, de la
comuna de La Reina. Uno de los testimonios indica que una profesora ha
modificado los materiales entregados por Santillana, digitalizando los contenidos
en un PDF que entrega a los alumnos y ella guía el proceso de aprendizaje. Mi
crítica la haré en forma de pregunta. ¿Era realmente necesario hacer esto? Se
está realizando una clase con TIC, pero no están siendo integradas al curriculum.
¿Qué diferencia la clase de la profesora al realizarla con sus guías, textos, plumón
y pizarra, en vez de con un tablet? Las tecnologías no están siendo invisibles para
los alumnos. Al terminar la clase, si se le consulta a los estudiantes qué hicieron,
¿responderán que estuvieron ocupando un tablet o que aprendieron algún
contenido en esta? Antes de realizar la clase, el docente debería preguntarse si es
realmente necesario utilizar TIC o puede enseñar el contenido sin estas. No niego
que las tecnologías son un gran aporte. Simplemente creo que muchos docentes
todavía no entienden el real fin de utilizarlas, o el significado de integrarlas al
curriculum.
A modo de conclusión, quiero recalcar que las TIC son una gran herramienta, con
muchísimo potencial aún no descubierto y en constante actualización. Así mismo,
el docente debe estar actualizando sus conocimientos respecto a estas, para así
idear nuevas formas de integrarlas curricularmente al proceso de enseñanza. No
debemos permitir que las tecnologías sean el foco de nuestras clases, dejando en
segundo plano el aprendizaje. Siempre debe quedar claro que las TIC son
herramientas para un fin, que es el aprendizaje.
Trabajos citados
1. Sanchez, Jaime (2003). Integración curricular de TIC, Conceptos y
Modelos. Santiago: Universidad de Chile
2. Ibarra, Alexis (2013). Las tabletas se vuelven aliadas de los profesores para
una clase más participativa. El Mercurio.