Este documento describe la necesidad de una revalorización de la profesión docente para preparar a las nuevas generaciones en un mundo cambiante. Argumenta que los maestros deben convertir las escuelas en espacios democráticos que fomenten la convivencia intercultural y respeten la diversidad a través de prácticas pedagógicas transformadas que promuevan el aprendizaje activo de los estudiantes. También enfatiza la importancia de que los docentes reflexionen sobre su práctica para facilitar que los estudiantes aprendan