4.- La fiesta de las primicias y la cuenta del omer

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La fiesta de las primicias y la cuenta del omer
Autor del comentario: Humberto Rendón Rojas
Transcripción: Humberto Rendón Talmid Yisrael
Revisión: Sara Téllez Girón Díaz
México; Enero del 2020.
La fiesta de las primicias se encuentra registrada en la Torah como una de las
fiestas bíblicas que proféticamente hace una referencia a todos aquellos que somos el
fruto de la aflicción del Mesías y que de acuerdo al mandamiento, la forma de cumplir con
esta festividad era en un sentido agrícola, como forma didáctica pues la forma en que Dios
nos enseña a vivir es aprendiendo los principios más elementales en lo material para que
en su momento aprendamos a discernir su voluntad en el espíritu ante la verdad
irrefutable que comprendió el apóstol Pablo acerca de que la ley de Dios es espiritual y
nosotros carne, (Rom. 7:14).
Por lo que resulta indispensable para la exposición de este importantísimo tema
reflexionar primeramente en el mandamiento tal y como fue dado a Israel a través de
Moisés:
 Levítico 23.- 9 Y habló Jehová a Moisés, diciendo: 10 Habla a los hijos de Israel y
diles: Cuando hayáis entrado en la tierra que yo os doy, y seguéis su mies,
traeréis al sacerdote una gavilla por primicia de los primeros frutos de vuestra
siega. 11 Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis
aceptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá. 12 Y el día que ofrezcáis la
gavilla, ofreceréis un cordero de un año, sin defecto, en holocausto a Jehová. 13
Su ofrenda será dos décimas de efa de flor de harina amasada con aceite,
ofrenda encendida a Jehová en olor gratísimo; y su libación será de vino, la
cuarta parte de un hin. 14 No comeréis pan, ni grano tostado, ni espiga fresca,
hasta este mismo día, hasta que hayáis ofrecido la ofrenda de vuestro Dios;
estatuto perpetuo es por vuestras edades en dondequiera que habitéis. 15 Y
contaréis desde el día que sigue al día de reposo, desde el día en que ofrecisteis
la gavilla de la ofrenda mecida; siete semanas cumplidas serán. 16 Hasta el día
siguiente del séptimo día de reposo contaréis cincuenta días; entonces ofreceréis

el nuevo grano a Jehová. 17 De vuestras habitaciones traeréis dos panes para
ofrenda mecida, que serán de dos décimas de efa de flor de harina, cocidos con
levadura, como primicias para Jehová. 18 Y ofreceréis con el pan siete corderos
de un año, sin defecto, un becerro de la vacada, y dos carneros; serán holocausto
a Jehová, con su ofrenda y sus libaciones, ofrenda encendida de olor grato para
Jehová. 19 Ofreceréis además un macho cabrío por expiación, y dos corderos de
un año en sacrificio de ofrenda de paz. 20 Y el sacerdote los presentará como
ofrenda mecida delante de Jehová, con el pan de las primicias y los dos corderos;
serán cosa sagrada a Jehová para el sacerdote. 21 Y convocaréis en este mismo
día santa convocación; ningún trabajo de siervos haréis; estatuto perpetuo en
dondequiera que habitéis por vuestras generaciones. 22 Cuando segareis la mies
de vuestra tierra, no segaréis hasta el último rincón de ella, ni espigarás tu siega;
para el pobre y para el extranjero la dejarás. Yo Jehová vuestro Dios…
Como podemos ver, la fiesta de las primicias se comenzaría a celebrar hasta después
de 40 años de haberse dado el mandamiento pues aún se encontraban en el desierto, lo
que significa que durante todo ese tiempo Israel dependería solo de la misericordia y el
sustento de Dios.
Primicias se vincula a través de la cuenta del omer con la fiesta de las semanas,
pentecostés o shavuot en hebreo en donde se ofrecían dos panes con levadura, lo
contrario a la fiesta de panes sin levadura en donde el mandamiento implica comer panes
sin levadura durante los 7 días de la fiesta.
A la fiesta de las primicias también se le conoce como la fiesta de los primogénitos y
éste nombre precisamente es una alusión a un aspecto profético muy importante
referente a Israel como el primogénito de Dios:
 Éxodo 4.- 21 Y dijo Jehová a Moisés: Cuando hayas vuelto a Egipto, mira que
hagas delante de Faraón todas las maravillas que he puesto en tu mano; pero yo
endureceré su corazón, de modo que no dejará ir al pueblo. 22 Y dirás a Faraón:
Jehová ha dicho así: Israel es mi hijo, mi primogénito. 23 Ya te he dicho que dejes
ir a mi hijo, para que me sirva, mas no has querido dejarlo ir; he aquí yo voy a
matar a tu hijo, tu primogénito.

En ese sentido resulta muy valioso separar el aspecto práctico respecto a la forma en
que se cumplía el mandamiento en tiempos del templo de Jerusalén y el aspecto
simbólico por el que podemos comprender la fiesta para lo cual por supuesto que es de
mucha ayuda hacer uso de la alegoría cuidando de no llegar a descontextualizar el origen
y motivo por el que Dios estableció esta y todas las fiestas bíblicas.
Pesaj se celebra al final del 14 de aviv, justo al inicio del 15 en que inicia la fiesta de
Panes sin levadura, por lo que la fiesta de las primicias que es el primer día del conteo del
omer es el día 16.
Si de una manera general tomamos en cuenta que Yeshua murió hacia el final del día
14 (entre las 2 tardes) Jn 19:31, fue puesto en la tumba poco antes caer el sol conforme,
es decir poco antes de que iniciara el día 15 conforme a la forma hebrea de contar los
días, Yeshúa fue puesto en la tumba poco antes del día de reposo de la fiesta de pésaj y
panes sin levadura, conocido como el shabat anual del primer día panes sin levadura y
resucito 3 días después, esto es el día 17 de aviv.
En ese sentido secuencial, vemos que Yeshúa no resucitó en el shabat anual o día de
reposo de la fiesta de panes sin levadura, pues si consideramos que el día 14 de aquella
ocasión fue un día miércoles, entonces Yeshúa resucitó en el día de reposo de la semana
pero no en el día de reposo de la fiesta.
Lo anterior nos proporciona un indicio más acerca de quién o quienes representan las
primicias en el ámbito profético en el contexto de esta fiesta.

La razón de la confusión acerca de que Yeshúa debió nacer en la fiesta de las
primicias se debe al error de olvidar que además del día de reposo que se debe guardar
conforme al mandamiento en la fiesta anual de que se trate, debemos considerar que se
debe continuar guardando el día de reposo de cada semana y que en ocasiones de
acuerdo al calendario pueden unirse ambos días de reposo pero regularmente siempre
hay un día de reposo en los días intermedios de la fiesta de panes sin levadura que dura 7
días.
Así es que la pregunta a que si Yeshúa debió resucitar en el día de la fiesta de las
primicias queda resuelta al observar la cronología de las fechas establecidas para la fiesta
en la imagen anterior, pues de acuerdo a los evangelios Yeshúa tuvo que haber estado
bajo tierra tres días y tres noches, lo que significa que Yeshúa resucitó al final del día 17
del mes de aviv, a punto de iniciar el segundo día de la cuenta del omer.
De acuerdo a una teoría muy aceptada por muchos, el día en que Yeshúa fue
crucificado antes de terminar el 14 de aviv, fue un día miércoles, esto implica que al hacer

la cuenta de los tres días en que estuvo bajo tierra, las tres noches y tres días se cumplen
poco después de la hora novena del día sábado; lo que significa que Yeshúa resucitó a
partir de las tres de la tarde del sábado que aún es día de reposo
Por otro, la enseñanza acerca de que Yeshúa tuvo que haber resucitado en la fiesta
de las primicias se basa en la cita del apóstol Pablo donde refiere que Yeshúa es las
primicias de la resurrección y básicamente se asume que Él es las “primicias” de entre los
muertos y eso lo hace comparable con las “primicias” de la cosecha.
Sin embargo, la palabra Griega aparche traducida como “primicias” es una palabra
singular, y no plural, así que, Yeshua es el primer (singular) Pero cuando la escritura se
refiere a la ofrenda mecida representa las primicias (plural), esto visto desde un punto de
vista contextual en referencia a la fiesta de las primicias;
 1 Corintios 15.- 20 Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de
los que durmieron es hecho…
Si leemos con detenimiento todo el capítulo 15 de la primera carta del apóstol Pablo a
los corintios veremos que el contexto no son las primicias en el tema del grano, hablando
de la cosecha. Por otro lado, por supuesto que todas las fiestas bíblicas se encuentran
vinculadas a Yeshúa conforme al plan de redención profético, Yeshúa es el motivo de
todas y cada una de las fiestas, sin embargo, en el caso de la fiesta de las primicias la
conexión con Yeshúa tiene que ver con el hecho de que Él es el autor de las primicias en
referencia a nosotros los que conformamos su iglesia, en ese sentido el pasaje que se
conecta con el contexto de la siembra, la cosecha y los frutos la proporciona el evangelio
del apóstol Juan:
 Juan 12.- 20 Había ciertos griegos entre los que habían subido a adorar en la
fiesta. 21 Estos, pues, se acercaron a Felipe, que era de Betsaida de Galilea, y le
rogaron, diciendo: Señor, quisiéramos ver a Jesús. 22 Felipe fue y se lo dijo a

Andrés; entonces Andrés y Felipe se lo dijeron a Jesús. 23 Jesús les respondió
diciendo: Ha llegado la hora para que el Hijo del Hombre sea glorificado. 24 De
cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere,
queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.
De acuerdo al comentario de Alfred Edersheim (un judío convertido al cristianismo y
un erudito bíblico conocido especialmente por su libro La vida y los tiempos de Jesús el
Mesías.) El procedimiento de la gavilla de ofrenda mecida es como sigue:
“Al llegar el tiempo para cortar la gavilla, esto es la sobretarde del
15 de aviv, al declinar el sol, tres hombres, cada uno de ellos con
una hoz y una cesta se ponian a trabajar. Cortaban la cebada hasta
una cantidad de un efa o diez omers que es igual a 37 litros de
nuestra medida. Las espigas eran llevadas al atrio del Templo y
batidas con cañas o varas de manera que no se dañara el grano;
luego lo “tostaban” en una sartén con agujeros, para que cada
grano pudiera ser tocado por el fuego y finalmente se exponía al
viento… El grano así preparado era molido en un molino de
cebada. Aunque se cortaba un efa o diez omers de cebada, solo se
empleaba un omer de harina, alrededor de 3.7 litros el día 16 de
aviv. El omer de harina era mezclado con un “log” (casi medio litro)
de aceite y se ponía encima un puñado de incienso, meciéndose
luego delante del Señor y se tomaba un puñado que se quemaba
en el altar…”
De lo anterior deducimos con claridad que no era un grano lo que se ofrecía como
gavilla, sino miles de granos. De acuerdo al diccionario Bíblico de Westminster, un Omer
podría contener hasta 50,000 granos.

Como nota adicional:
El grano ofrecido no tenía que ser maduro o una verdadera primicia y debía ser
traído al Sacerdote sin importar la etapa de desarrollo del grano, consistía en un ofrenda
del comienzo de la cosecha y no literalmente primicias del fruto maduro; lo que
alegóricamente podría representar que todos y cada uno de aquellos que son convertidos
a la fe de Yeshúa son como esos granos en la gavilla de Yeshúa, que aunque inmaduros,
son como ofrenda de los cuatro vientos, agradable delante de Dios.
Entonces, si la Fiesta de las primicias en relación a lo que representan los granos no
solo se encuentra relacionada con Yeshúa, la pregunta es ¿Qué representa la gavilla?
¿Qué o quiénes son la Primicias?
Bíblicamente una gavilla representa a una persona o a un grupo de personas:
 Génesis 37.- 5 Y soñó José un sueño, y lo contó a sus hermanos; y ellos llegaron a
aborrecerle más todavía. 6 Y él les dijo: Oíd ahora este sueño que he soñado: 7
He aquí que atábamos manojos en medio del campo, y he aquí que mi manojo se
levantaba y estaba derecho, y que vuestros manojos estaban alrededor y se
inclinaban al mío. 8 Le respondieron sus hermanos: ¿Reinarás tú sobre nosotros,
o señorearás sobre nosotros? Y le aborrecieron aún más a causa de sus sueños y
sus palabras. 9 Soñó aun otro sueño, y lo contó a sus hermanos, diciendo: He aquí
que he soñado otro sueño, y he aquí que el sol y la luna y once estrellas se
inclinaban a mí. 10 Y lo contó a su padre y a sus hermanos; y su padre le
reprendió, y le dijo: ¿Qué sueño es este que soñaste? ¿Acaso vendremos yo y tu
madre y tus hermanos a postrarnos en tierra ante ti? 11 Y sus hermanos le tenían
envidia, más su padre meditaba en esto.
La razón por la que Jacob, el padre de José meditaba en el sueño de su hijo es porque
sabía que ambos sueños eran proféticos, pero no podía discernirlos; así como vemos que
la escritura habla de manojos, es una referencia a las gavillas que en el caso de las gavillas
de los hermanos de José representan a muchas personas como las tribus de Israel y en el

caso de la gavilla podría representar a Uno, es decir a Yeshúa como aquel que reinaría
sobre las doce tribus en un futuro aunque el sueño tuvo un primer cumplimiento en el
tiempo de hambre de la tierra y que Jacob con sus descendientes tuvieron que acudir a
Egipto por comida, época en la que José se encontraba en autoridad como gobernador de
Egipto.
 Salmo 126.- 5 Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán. 6 Irá
andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con
regocijo, trayendo sus gavillas…
 Amos 9.- 9 Porque he aquí yo mandaré y haré que la casa de Israel sea
zarandeada entre todas las naciones, como se zarandea el grano en una criba, y
no cae un granito en la tierra.
Este grano somos tú y yo, el Israel de Dios. Y aquí vemos la referencia a Yeshúa como el
autor y consumador de la voluntad del Padre a fin de que por su muerte, como la muerte
de un grano, nosotros llegáramos a ser hechos sus primicias como nuevas criaturas en
Yeshúa:
 Santiago 1.- 18 El, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra de verdad, para
que seamos primicias de sus criaturas.
En esas circunstancias es como los creyentes redimidos en Yeshúa somos llamados
¡Primicias! Por cuanto que tenemos las primicias del Espíritu de la resurrección en Yeshúa
y así podríamos reconsiderar que las primicias de la fiesta ordenada en levítico capítulo 23
como la ofrenda mecida de las primicias es una referencia profética a todos los creyentes
en Yeshúa.
Por otro lado es muy importante considerar que las primicias que se describen en el
mandamiento de la fiesta no tienen que ver con los diezmos, ya que para empezar son

mandamientos distintos a pesar de que siempre se relacionó porque se llevaba el omer al
templo y tomaron la idea de entregar las primicias (en dinero) al sacerdote. Una gavilla de
ninguna manera se relaciona con el diezmo y de la siguiente lectura se deduce:
 Levítico 23.- 9 Y habló Jehová a Moisés, diciendo: 10 Habla a los hijos de Israel y
diles: Cuando hayáis entrado en la tierra que yo os doy, y seguéis su mies,
traeréis al sacerdote una gavilla por primicia de los primeros frutos de vuestra
siega. 11 Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis
aceptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá. 12 Y el día que ofrezcáis la
gavilla, ofreceréis un cordero de un año, sin defecto, en holocausto a Jehová. 13
Su ofrenda será dos décimas de efa de flor de harina amasada con aceite,
ofrenda encendida a Jehová en olor gratísimo; y su libación será de vino, la
cuarta parte de un hin. 14 No comeréis pan, ni grano tostado, ni espiga fresca,
hasta este mismo día, hasta que hayáis ofrecido la ofrenda de vuestro Dios;
estatuto perpetuo es por vuestras edades en dondequiera que habitéis.
Para una mayor referencia al tema del mandamiento del diezmo recomiendo el
comentario titulado: “El diezmo conforme a la enseñanza de Yeshúa”
Un omer es una gavilla, un manojo de cebada de 2.2 kgs.
 Levítico 23.- 11 Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis
aceptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá.
Como vemos, la escritura dice que la gavilla sería mecida y esto es una referencia
profética ya que el sacerdote debía mecer la gavilla hacia los cuatro ángulos de la tierra, lo
que proféticamente simboliza que el viento que en el hebreo se traduce como ruaj y que
bíblicamente tiene que ver con el Espíritu de Dios, soplaría de los cuatro vientos a fin de
que ése Espíritu le de vida y resucite a las primicias; aquí ambas profecías anunciadas por
Isaías y Ezequiel:

 Isaías 11.- 11 Asimismo acontecerá en aquel tiempo, que Jehová alzará otra vez
su mano para recobrar el remanente de su pueblo que aún quede en Asiria,
Egipto, Patros, Etiopía, Elam, Sinar y Hamat, y en las costas del mar. 12 Y
levantará pendón a las naciones, y juntará los desterrados de Israel, y reunirá los
esparcidos de Judá de los cuatro confines de la tierra…
La palabra pendón en el hebreo es la palabra “nes” y significa: “Bandera”, por lo que el
pendón a las naciones que fue profetizado es Yeshúa, quien como bandera fue levantado
en un asta (la cruz) para que el Israel de Dios que se encuentra en las naciones del mundo
sean reunidos de los cuatro confines de la tierra. De manera que puedes imaginarte el
momento en el que el sacerdote mecía todos estos granos como una visión de Yeshúa
nuestro Sumo Sacerdote que está reuniendo a los hijos del reino.
 Ezequiel 37.- 9 Y me dijo: Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al
espíritu: Así ha dicho Jehová el Señor: Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla
sobre estos muertos, y vivirán. 10 Y profeticé como me había mandado, y entró
espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies; un ejército grande en
extremo. 11 Me dijo luego: Hijo de hombre, todos estos huesos son la casa de
Israel. He aquí, ellos dicen: Nuestros huesos se secaron, y pereció nuestra
esperanza, y somos del todo destruidos. 12 Por tanto, profetiza, y diles: Así ha
dicho Jehová el Señor: He aquí yo abro vuestros sepulcros, pueblo mío, y os haré
subir de vuestras sepulturas, y os traeré a la tierra de Israel. 13 Y sabréis que yo
soy Jehová, cuando abra vuestros sepulcros, y os saque de vuestras sepulturas,
pueblo mío. 14 Y pondré mi Espíritu en vosotros, y viviréis, y os haré reposar
sobre vuestra tierra; y sabréis que yo Jehová hablé, y lo hice, dice Jehová.
Como vemos la profecía de Ezequiel es una clara referencia al viento como el Espíritu
que reuniría al pueblo de Dios. En estas circunstancias si Yeshúa resucitó en el shabat de la
semana o al inicio del primer día de la semana, significa que resucitó después de que la
gavilla fue mecida, esto representa que Yeshúa es la causa del fruto de la gavilla que
representa a todo Israel.

 Levítico 23.- 15 Y contaréis desde el día que sigue al día de reposo, desde el día en
que ofrecisteis la gavilla de la ofrenda mecida; siete semanas cumplidas serán. 16
Hasta el día siguiente del séptimo día de reposo contaréis cincuenta días;
entonces ofreceréis el nuevo grano a Jehová…
La referencia para determinar a partir de cuándo se debe empezar el conteo del omer
lo vemos en los versículos siguientes:
Levítico 23.- 6 Y a los quince días de este mes es la fiesta solemne de los panes sin
levadura a Jehová; siete días comeréis panes sin levadura. 7 El primer día tendréis santa
convocación; ningún trabajo de siervos haréis.
Como ya hemos visto, la cronología de la celebración de estas tres primeras fiestas
anuales indica que son una tras otra empezando por Pésaj, seguida de Panes sin levadura
y Primicias
Una de las fuentes tempranas y cercanas a Yeshúa acerca de la forma en que se
cumplía el mandamiento de las primicias corresponde al historiador Flavio Josefo que data
del siglo primero después de Yeshúa el Mesías, en su obra “Antigüedad de los Judíos”,
relata lo siguiente:
La fiesta del pan ácimo (panes sin levadura) sucede al de la pascua y cae en
el decimoquinto día del mes y continúa durante 7 días durante los cuales
nos alimentamos de pan ácimo, cada uno de estos días se matan dos toros y
un carnero y siete corderos, los carneros se queman enteramente además
del cabrito que se añade al resto para los pecados porque el propósito es
que sea una fiesta para el sacerdote durante todos esos días. El segundo día
de los panes sin levadura que es el decimosexto del mes (16 de Abib) se
participa por primera vez de los frutos de la tierra, porque antes de ese día
no se tocan, se considera apropiado honrar a Dios de quien se obtiene una
abundante provisión ofreciendo la primicia de la cebada de la siguiente
manera: Se toma un puñado de espigas, se secan y se machacan, separando
la cebada del afrecho, luego se lleva una décima parte al altar ante Dios y

arrojando un puñado al fuego se deja el resto para uso del sacerdote,
después de esto se puede recoger la cosecha pública o privadamente, con
ésta participación de las primicias de la tierra se sacrifica un cordero como
holocausto al Señor… (Antigüedad de los Judíos, tomo 1. Libro 5 parte 5).
Filón de Alejandría, quien fue un filósofo del judaísmo del siglo primero, en su obra
“Las Leyes Especiales”, también da testimonio del cumplimiento al mandamiento en dicha
época:
“Hay también un festival en el día de la Fiesta de la Pascua, el cual sigue del
primer día, y éste es llamado ‘gavilla’, por lo que acontece en él; puesto que
la gavilla es traída al altar como parte de los primeros frutos…”, (‘Las Leyes
Especiales’, tomo 2, capítulo XXIX:162)
Los dos textos presentados anteriormente son de gran trascendencia porque
demuestran que el mandamiento que se seguía en los días de la muerte de Yeshúa era la
sostenida por los Fariseos, es decir, era ofrecida después del Shabatón que acontecía el 15
de Aviv.
Por otro lado la Septuaginta (La Traducción de los 70), que corresponde a la
primera traducción que se hizo de la Torá a otro idioma (dejando de lado los Targumim
que no son traducciones propiamente tales). La ‘Traducción de los 70’, según datan los
historiadores, fue elaborada por 72 rabinos en una fecha cercana al 250 antes de Yeshúa y
en relación al texto del libro de levítico dice lo siguiente:
 Levítico 23.- 11 Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis
acéptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá.
Notemos lo que dice la septuaginta en éste versículo que como dijimos es una
traducción del segundo al tercer siglo antes de Yeshúa del texto hebreo al griego y por
supuesto que es una traducción mucho más antigua que la que tenemos actualmente:

Versión septuaginta:
 Levítico 23.- 11 Y él mecerá la gavilla delante del Señor para ser aceptado al
siguiente día del primer día… Ésta es una diferencia muy importante que hace la
septuaginta: al siguiente día del primer día… aquí no dice del Shabat, aquí dice del
primer día.
En Reina Valera dice: el día siguiente del día de reposo
En la Septuaginta dice: al siguiente día del primer día…
En la septuaginta no dice del Shabat o del día de reposo, sino que dice: del primer
día esto hace suponer que se esta hablando del primer día de la fiesta de los panes sin
levadura
Otro de los textos que aportan convicción acerca del inicio de la cuenta del omer
es la siguiente cita bíblica:
 Josué 5.- 11 Al otro día de la pascua comieron del fruto de la tierra, los panes sin
levadura, y en el mismo día espigas nuevas tostadas…
Entonces ya vimos que de acuerdo a Levítico 23:14 no se comía del grano sin que primero
se ofreciera la gavilla. Por lo anterior tenemos la siguiente secuencia de eventos por día:
 Día 14 de Abib, sacrificio por la tarde
 Día 14 por la noche entrando el 15 de Abib cena de pésaj (Inicia el día de reposo)
 Día 16 de Abib es el día después del día de reposo ya se ofreció la gavilla y ha
comenzado la cuenta del omer. (Día 16 de Abib, día 1 de la cuenta del omer)
En los evangelios y en las cartas no hay registro de que los apóstoles hayan tenido
diferencias en cuanto a las fechas en que se celebraban las fiestas:
 Hechos 20.- 16 Porque Pablo se había propuesto pasar de largo a Efeso, para no
detenerse en Asia, pues se apresuraba por estar el día de Pentecostés, si le fuese
posible, en Jerusalén.

Recordemos que Pentecostés es una de las tres fiestas en las que de acuerdo al
mandamiento todo varón debía presentarse ante el Señor (Deut.16:16) y el apóstol Pablo
así lo hizo.
De manera que la forma práctica en que los creyentes cumplen el mandamiento es
haciendo conciencia de cada día rumbo a Shavuot, como un tiempo en el que recordamos
la preparación que tuvo Israel en el desierto para recibir los mandamientos en el Sinaí,
como una profecía del tiempo de preparación que tendría el pueblo de Dios como la novia
preparándose con los vestidos que son las acciones justas y que le confieren el derecho a
ser la esposa del Cordero.
Actualmente como las otras fiestas no es posible cumplir el mandamiento de la gavilla
mecida, como lo describe la torah porque no hay templo, sin embargo, tenemos la gran
encomienda de escudriñar acerca de cuál es la voluntad de Dios en estos tiempos de
festividades en que espiritualmente ocurren cosas en las vidas de las personas que
definitivamente les revela cada día un poco más de lo que espera el Señor de parte de su
pueblo, en cada cita en que le rinde honor y gloria, a pesar de no tener lo que un día fue
su casa de oración para todos los pueblos.
Mientras que Yeshúa regresa por su pueblo, podríamos considerar que tenemos en
Yeshúa un Sumo Sacerdote del orden de Melquisedec, que en cada día de la fiesta de las
primicias, es Él quien nos presenta nosotros como la ofrenda mecida en el tabernáculo
celestial delante del Padre, pues somos nosotros el fruto de la aflicción de su alma…

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