1. Nombre: Stephania Cuellar Londoño Codigo:1023842
Negociando con un colombiano
Si bien, las diferentes cátedras académicas que he recibido durante mis años de
estudio, me han impartido la enseñanza de que cuando negocios se trata se debe
llegar a una zona de posible acuerdo o de “Ganar-ganar”. Sin embargo, al
escuchar experiencias o incluso vivirlas, por supuesto no tan formalmente, pero si
en mi vida cotidiana, y luego de tener conocimiento del escrito titulado ¿Cómo
negocian los colombianos?, he llegado a denotar que nuestra cultura tiene aun
rezagos de la cultura tradicionalista en la que la del demarcación del poder se
hace presente, nos desenvolvemos en torno a un elemento no tangible pero
perceptible y que la mayoría llevamos dentro de querer “sacarle ventaja” a la
situación y por supuesto esto se evidencia a la hora de negociar, siempre
buscamos ganar con una mentalidad que uno de los dos perderá, pero por
supuesto queriendo salir “victoriosos”, regateamos hasta en cuanto dinero de
mesada o semanal me deben dar, en cuanta comida me sirven en comparación al
otro, la hora de llegada los fines de semana, regateamos en todo y para todo y en
las negociaciones es igual establecemos valores o precios altos para luego “dejar
en” pero esto no asegura que los términos se cierren y que le demos fiel
cumplimiento a estos, somos una cultura que tiende al incumplimiento, e
impuntualidad ya que tenemos la percepción de que todo acto es como una
reunión social y hay que observar el comportamiento de la contraparte para
actuar, sino recurrimos al “apague y vámonos”, enaltecemos las jerarquías y más
si son extranjeras, el compartir con personas de un rango superior nos genera una
cierta envidia de querer ser así, pero es algo que de cierta forma admiramos.
“La jerarquía es muy importante en Colombia, aunque en cualquier tipo
de negociación pueden participar ejecutivos y empleados de nivel
intermedio. No obstante, las decisiones finales, siempre están en manos
de los gerentes y ejecutivos de mayor nivel.” (Conocimientos previos a
una negociación. Negociar en Colombia. Protocolo empresarial.)
Esto no es en parámetros generales, en mi casocomo valluna y citando a los
costeños somos un poco más solidarios al momento de llegar a un acuerdo, pero
esto tal vez porque lo interpreto porque las relaciones afectivas y la informalidad
son más presentes en estas zonas del país, mientras los bogotanos tiendes a ser
más frívolos.
2. “La confianza es de gran importancia para los empresarios colombianos.
Si tienen alguna sospecha o presentimiento sobre lo que les expone, por
muchas razones favorables que les dé es fácil que no lleguen a un
acuerdo e incluso que cancelen las negociacione s.” (Conocimientos
previos a una negociación. Negociar en Colombia. Protocolo
empresarial.)
El colombiano vive el día a día, se desarrolló en un medio donde en la
televisión habla de conflicto armado, por lo tanto, su sentimiento
inherente de lucha y esfuerzo por salir adelante es muy presente, la
mayoría trabajan para ganar un sustento en un país en el que los
ingresos por persona no se comparan al índice “Big Mac”, y pues todo
esto nos hace personas emprendedoras, porque como nosotros tal vez
pocos estén realmente interesados en pactar un negocio, así al principio
nos mostremos reacios, porque vivimos de sueños grandes y la mayoría
pensamos así, pero todo esto es una discurso muy bonito cuando no se
evidencian aspectos de corrupción, dinero fácil y contrabando, por eso
también los hay ventajosos y oportunistas pero sobre toda las cosas hay
que tener claro que si te formas como persona durante determinado
tiempo en una universidad o instituto no es para que sigamos con esta
imagen ante el mundo es para sembrar un cambio.