Las fracturas de pelvis se clasifican en tres tipos (A, B y C) dependiendo de su estabilidad, con el Tipo C siendo el más inestable. Las luxaciones de cadera también se clasifican en cinco tipos dependiendo de la gravedad de la fractura acetabular asociada, siendo el Tipo IV y V los más graves con fractura de la pared o techo acetabular y de la cabeza femoral respectivamente. El tratamiento depende de la estabilidad ósea, usando reposo y tracción para las lesiones estables y cirugía para las inest