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Resumen
Es bien conocido por diversas investigaciones en el área
de salud, que la sensibilidad alimentaria existe y se pre-
senta con síntomas tanto intestinales como extraintesti-
nales al consumir ciertos alimentos. Estos síntomas pue-
den ser consecuencia de la reacción inmunológica tardía
entre un alimento y la liberación de la IgG. La mayoría de
los síntomas se pueden controlar siempre que se elimine
el alimento al que se tiene sensibilidad.
Para detectar la sensibilidad alimentaria se utilizan prue-
bas de laboratorio con resultados específicos para cada
paciente. Estas pruebas no son accesibles en todas las po-
blaciones, por lo que se considera importante disponer de
información histórica relativa a estas pruebas y dar a co-
nocer los alimentos que afectan con mayor frecuencia a la
población. Una de las pruebas más reconocidas la realiza el
Laboratorio Immunolabs, usada para detectar reacciones
inmunológicas tipo IgG, basada en el método ELISA.
En el presente estudio Nutriwhite, un equipo de especia-
listas en Inmuno Nutrición describió los resultados de
514 pacientes que asistieron a consulta y se realizaron la
prueba de sensibilidad de alimentos entre los años 2007 -
2014. En los resultados descriptivos se evidenció:
1) El orden en que los 154 alimentos probados producen
sensibilidad de mayor a menor porcentaje.
2) Los 5 alimentos que tienen mayor porcentaje de sen-
sibilidad. Se evidenció que son alimentos comunes en la
dieta venezolana: levaduras (cerveza, pan), trigo, huevo,
leche y queso de vaca.
3) No existen diferencias significativas por sexo en la
cantidad de alimentos ni en tipo de alimento a los que
se es sensible Este trabajo podrá servir de apoyo y de re-
ferencia a personas y profesionales de la salud, para que
tomen en cuenta estos alimentos al momento de hacer
perfiles inmunológicos, diagnósticos y seguir un plan
de alimentación.
Palabras clave: nutrición, sensibilidad alimentaria, in-
munoglobulina IgG.
INTRODUCCIÓN
En los últimos años hemos presenciado un aumento en el
porcentaje de personas que presentan síntomas tanto in-
testinales (sensación de hinchazón, digestión pesada, es-
treñimiento, diarrea, llagas en la boca, acidez), así como
extra-intestinales: a nivel dermatológico (eczemas, urti-
caria, dermatitis, acné), a nivel respiratorio (rinitis, tos,
bronquitis, asma), a nivel de articulaciones (rigidez, do-
lor) y generales (fibromialgia, cansancio, depresión, hi-
peractividad, ansiedad, jaquecas, retención de líquidos)
al ingerir ciertos alimentos. Estos síntomas pueden ser
consecuencia de la reacción inmunológica tardía entre
un alimento y la liberación de la IgG que produce sensi-
bilidad alimentaria. La mayoría de las personas descono-
ce que padecen de una sensibilidad alimentaria debido a
que tienden a relacionar los síntomas con otras patolo-
gías, así como por la falta de información en el tema.
Se quiere concientizar a las personas, a través de esta in-
vestigación, que la sensibilidad alimentaria existe y que
sus síntomas se pueden controlar siempre y cuando se
elimine el alimento al que se tiene sensibilidad. Existen
pruebas de laboratorio específicas que permiten iden-
tificar estos alimentos en cada paciente. Estas pruebas
no son accesibles en todas las poblaciones por lo que se
considera importante disponer de información histórica
relativa a estas pruebas y dar a conocer los alimentos que
afectan con mayor frecuencia a la población.
Esta investigación realizada por Nutriwhite, un equipo
de especialistas en Inmuno Nutrición, tiene como finali-
dad determinar el orden en que los alimentos estudiados
causaron reacción inmunológica tipo IgG en pacientes
que acudieron a consulta durante el periodo 2007-2014.
Con las evidencias descriptivas, este trabajo podrá ser-
vir de apoyo y de referencia a personas y profesionales
de la salud, para que tomen en cuenta estos alimentos al
momento de hacer perfiles inmunológicos, diagnósticos
y seguir un plan de alimentación.
Estudio descriptivo de los resultados de los alimentos que causaron
reacciones inmunológicas tipo IGG, medidos por el método ELISA
en pacientes que asistieron a la consulta de Nutriwhite
durante el periodo 2007 – 2014
Distribución por suscripción
ISBN: PPI201402DC4571 WWW.BOTICA.COM.VE ISSN: 2443-4388
Edición número 47 / Año 2015
2 N° 47, Año 2015
MARCO TEÓRICO
Es muy común que exista una confusión entre sensibili-
dad, alergia o intolerancia alimentaria. Todos estos tér-
minos son reacciones adversas inducidas por alimentos,
y básicamente se diferencian en dos grandes grupos se-
gún los mecanismos que las producen:
1.	 Otros mecanismos: Englobados con el término de
intolerancia alimentaria dentro de la que se encuen-
tran las alteraciones metabólicas, déficits enzimáti-
cos, acción tóxica, etc. (Anderson y Song, 1984).
2.	 Inmunológicos: llamadas reacciones alérgicas y sensi-
bilidades a los alimentos. Se diferencian en los procesos
mediados por elevación de las inmunoglobulinas IgE
(alergias) y los mediados por elevación de las IgG (sen-
sibilidades alimentarias). (Anderson y Song, 1984).
La sensibilidad alimentaria es una respuesta inmunoló-
gica patológica mediada por la formación masiva de in-
munocomplejos alimentarios IgG. La presencia de este
inmunocomplejo a nivel vascular activa un proceso in-
flamatorio responsable de los daños colaterales en los
tejidos próximos a la reacción inmunológica (Janeway y
col., 2001).
Desde hace varios años, las investigaciones apuntan a re-
lacionar la sensibilidad con manifestaciones clínicas en
diferentes niveles, y demuestran que al eliminar los ali-
mentos positivos, los síntomas desaparecían. (Atkinson y
col., 2004) (Yang y Li, 2007), por ejemplo:
1.	 Digestivo: sensación de hinchazón, digestiones pesa-
das, estreñimiento, diarreas, llagas en la boca, acidez,
síndrome del intestino irritable.
Un estudio demostró que el síndrome de intestino
irritable (SII) y los anticuerpos IgG tienen relación
y que al eliminar los alimentos positivos, los sínto-
mas desaparecían. (Atkinson y col., 2004). De igual
manera se ha evaluado la desaparición de la diarrea
y el estreñimiento eliminando de la dieta aquellos
alimentos con IgG positivos y se comprobó que más
del 65% de los pacientes tuvieron mejoría (Yang y Li,
2007). Más recientemente un estudio acerca del SII
acompañado de síntomas como la diarrea, demostró
que la IgG está muy relacionada a este problema, ya
que al eliminar los alimentos con IgG positivo du-
rante 12 semanas, se notó que el dolor abdominal
(hinchazón nivel y frecuencia), la frecuencia de dia-
rrea, distensión abdominal, forma de heces, sensa-
ción general de malestar y síntomas en general ha-
bían mejorado (Guo y col., 2012).
2.	 Dermatológico: eczemas, urticaria, dermatitis, acné.
3.	 Respiratorio: rinitis, tos, bronquitis, asma. (Halpern
y Scott, 1987)
4.	 Articulaciones: rigidez, dolor.
5.	 Generales: fibromialgia, cansancio, depresión, hipe-
ractividad, ansiedad, jaquecas, retención de líquidos.
6.	 Muscular: tensión, dolor, fibromialgia, etc.
7.	 Neurológico: migrañas, cefaleas, hormigueo en las
manos y pies, ataxia y cansancio incrementado sin
motivo aparente. Se ha encontrado que las migrañas
también están fuertemente relacionados con la IgG,
ya que eliminando los alimentos positivos las migra-
ñas desaparecían (Arroyave y col., 2007).
8.	 Psiquiátricos: aún no se ha podido confirmar por es-
tudios controlados. Sin embargo, cada vez están más
claras las implicaciones entre sistema inmunológico
y el sistema nervioso, pudiendo describirse distintas
actitudes consecuentes a la estimulación inmunoló-
gica de distinta índole. El factor tiempo de exposi-
ción al antígeno tiene también importancia en esta y
otras manifestaciones (Crayton, 1986).
Es importante destacar que a diferencia de la alergia, la
sensibilidad puede pasar desapercibida si no se solicitan
estudios de laboratorio, ya que su reacción es más tardía
y varía de minutos, horas y días para su aparición (Her-
nández, 2011). Es por esto, que las pruebas de laboratorio
que miden IgG pueden ser un buen indicador de sensi-
bilidad alimentaria, y en dado caso que no haya acceso
a estas pruebas de laboratorio, la información histórica
relativa a estas pruebas pueden dar a conocer también los
alimentos que afectan con mayor frecuencia a la pobla-
ción, de manera de utilizar esta información como apoyo
en un plan nutricional.
DESCRIPCIÓN DE NUTRIWHITE Y DEL
LABORATORIO
NutriWhite es un equipo de salud que busca mejorar la
salud de sus pacientes a través de la Dieta 3R. Esta dieta
especifica de Nutriwhite consiste en Remover los alimen-
tos a los cuales el paciente presenta una reacción inmu-
nológica adversa, Reponer con los nutrientes adecuados
para lograr Recuperar la salud del paciente.
Para atender los requerimientos de información respecto
a la sensibilidad IgG de los pacientes, NutriWhite utiliza
para este estudio, entre otras pruebas y por preferencia
del paciente, las pruebas ofrecidas por Inmunolabs. Se
trata de un laboratorio ubicado en EEUU , el cual fue
seleccionado por garantizar 90% de reproductibilidad y
95% de sensibilidad y contar con una prueba denomina-
da IgG BloodPrint, basada en el método ELISA (Enzy-
me-Linked Immunosorbent Assay) y está diseñado para
detectar anticuerpos circulantes de clase G (IgG), inmu-
noglobulina específica de alimentos en el suero.
El método ELISA se considera altamente sensible y específi-
coparadeterminaranticuerposIgG,comounindicadorútil
de las reacciones adversas a la alimentación y la intolerancia
alimentaria (Volpi y Maccari, 2009).
Es importante destacar que dicho laboratorio es inspec-
cionado constantemente y cuenta con todas las licencias
y permisos de Estados Unidos. A su vez, está aprobado
por la Food & Drug Administration y es el único acre-
ditado en EEUU por “College of American Pathologists
proficiency testing”. Se deduce que los resultados obteni-
dos en este estudio tienen alta confiabilidad.
3N° 47, Año 2015
DESCRIPCIÓN DEL PROCEDIMIENTO Y DE LOS
DATOS A ANALIZAR
A partir del 2007, el equipo NutriWhite inició la crea-
ción de una base de datos en Microsoft Office Excel, con
los pacientes que se atendían y que aceptaban realizar la
prueba BloodPrint de Inmunolabs. A ningún paciente se
le hizo seguimiento y se decidió hacer un corte en el año
2014 por considerarse que había una muestra importante
de pacientes para efectuar el presente estudio.
Para la realización de este trabajo se tomaron en cuenta
aquellos pacientes que requerían y aceptaron la sugerencia
de realizarse una prueba en EE.UU. Se escogió la prueba
BloodPrint de Immunolabs que está diseñada para la detec-
ción y cuantificación de IgG específica de 154 alimentos.
Una vez aceptada la sugerencia de efectuar la prueba, el
paciente procede a la extracción de sangre en un labo-
ratorio de su escogencia, en unos tubos separadores de
suero (4 ml), a primera hora del día.
Por otra parte se le facilita a cada paciente las planillas
requeridas para que las muestras puedan ser exportadas
con todos los permisos legales necesarios que exige el
gobierno venezolano para tal fin. El laboratorio la ana-
liza y envía los resultados de la prueba a NutriWhite,
tanto en formato físico como digital.
Los resultados recibidos se vacían en una base de datos
discriminada por año, identificando al paciente junto a sus
resultados. Los resultados se registran en escala del 0 – 4
dependiendo de qué tan sensible es el paciente al alimento.
Sin embargo, en el estudio no se tomó en cuenta la inten-
sidad y se consideró únicamente si el paciente es sensible o
no a cada alimento en particular.
ANÁLISIS DESCRIPTIVO
Para describir la información contenida en los resul-
tados de la prueba, se realizó una recodificación de los
resultados de la prueba, para determinar únicamente si
el paciente presentó sensibilidad al alimento (valor 1) o
no la presentó (valor 0). Procediéndose posteriormente a
conteos de pacientes en base a la presencia de sensibili-
dad a cada alimento, sin tomar en consideración el nivel
de la misma en la escala descrita previamente 0 – 4. Se
realizaron los análisis descriptivos según sexo para de-
terminar la posible diferencia entre ambos sexo lo largo
de los años.
En la Tabla n° 1 se registra el número de pacientes aten-
didos dentro de la población estudiada, discriminados
por año y sexo. De un total de 514 pacientes, 327 fueron
mujeres y 187 hombres.
Los años que más pacientes aportaron al estudio fueron
2013 y 2014 (31% y 22% respectivamente), lo que suma
más de la mitad. Los años 2010 y 2011 solo representan el
4% y 3% de los pacientes masculinos, además estos años
fueron los que menos pacientes se realizaron la prueba.
Tabla nº 1. Distribución absoluta de los pacientes
incluidos en el estudio por año y sexo.
Año
nº Pacientes
Femeninos
nº Pacientes
Masculinos
Total
2007 34 10 44
2008 63 22 85
2009 12 26 38
2010 14 7 21
2011 12 5 17
2012 26 12 38
2013 100 60 160
2014 66 45 111
Total 327 187 514
En general para la totalidad de los pacientes, los femeni-
nos representan el 64%, y los masculinos el 36%.
Únicamente el año 2009 presentó mayor cantidad de
pacientes masculinos que femeninos, en tanto que los
demás años la relación fue de casi dos a uno a favor de
pacientes femeninos (Gráfico n° 1).
Para medir la sensibilidad general que cada uno de los
154 alimentos estudiados genera en los pacientes de Nu-
triWhite, se consolidaron los datos de los años en una
única tabla y se contó el número de pacientes que presen-
taron sensibilidad a cada alimento.
En la Tabla n° 2 se muestran las mediciones a la sensibilidad
de los 148 alimentos que presentó al menos algún paciente
con sensibilidad. Cabe destacar, que 6% de este grupo, no
fueron reportados ya que no causaron sensibilidad.
Con mayor porcentaje se presenta la levadura de cerveza
(94,7%), correspondiente a 487 pacientes, y de segundo lugar
encontramos la levadura de pan (94,4%) correspondiente a
485 pacientes que presentaron sensibilidad a este alimento.
En el otro extremo de la tabla podemos observar que alimen-
tos como rábano picante, pimienta, entre otros; apenas pro-
dujeron sensibilidad 0,2% de los pacientes estudiados.
0%
10%
20%
30%
40%
50%
60%
70%
80%
90%
100%
2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014
# Pacientes Femeninos # Pacientes Masculinos
Gráfico nº 1. Distribución porcentual de pacientes según
sexo por año.
4 N° 47, Año 2015
La tabla n° 2 demuestra que casi el 95% de los pacientes
presenta reacción de sensibilidad a las levaduras (cerveza
y pan). Con un 80% y 70% de los pacientes mostraron
reacción al huevo, trigo y leche de vaca. Entre 69% y 50%
de la muestra mostraron reacción al arándano y queso de
vaca. Esto resultados arrojan que más de la mitad de los
pacientes mostraron sensibilidad a las levaduras, huevo,
trigo, leche de vaca, queso de vaca y arándano.
Entre el 30% y el 49% de los pacientes mostraron reac-
ción a la avena, piña, cambur, leche de cabra, champiño-
nes, alfalfa, ajonjolí, frijoles pinta, tomate y calabaza.
En la Tabla n° 3 se resume la descripción de los pacien-
tes según el número de alimentos a los que presentaron
sensibilidad en la prueba. Entre los pacientes femeninos
más del 40% presentó reacción entre 11 y 20 alimentos y
más del 35% presentó reacción entre 21 y 30 alimentos.
En cuanto a los pacientes masculinos, se puede observar
que más del 40% de la muestra presentaron reacción de
21 a 30 alimentos, en segundo lugar con más del 35% de
11 a 20 alimentos.
Tabla nº 3. Distribución porcentual de pacientes según
rango de reacciones de sensibilidad alimentaria.
Número de Sensibilidades por Paciente
% por Sexo 1 a 10 11 a 20 21 a 30 31 a 40 > a 40
Femeninos 15,0% 42,5% 35,5% 6,4% 0,6%
Masculinos 13,4% 36,4% 41,2% 8,6% 0,5%
En cuanto al número de reacciones de sensibilidad, para el
sexo femenino se observó una media de 18,96 reacciones
por paciente, con mínimo de 4 reacciones y casos extre-
mos de 52 reacciones por paciente. En tanto que para los
pacientes masculinos, la media resultó de 20,06 reacciones
por paciente, con mínimo de 5 reacciones en un paciente
y máximo 45 reacciones en otro paciente. No se reportan
diferencias de sexo estadísticamente significativas.
De esta tabla se puede concluir que casi el 80% de los
pacientes (sin distinción de sexo) presentaron entre 11 y
30 reacciones de sensibilidad en la prueba. Si bien apa-
rentemente los hombres tuvieron mayor número de re-
acciones que las mujeres, la diferencia observada no es
estadísticamente significativa para una prueba Chi-Cua-
drado y no se puede asumir que hombres y mujeres tie-
nen comportamientos diferentes.
Tabla nº 2. Porcentaje de Sensibilidad en Pacientes por Alimento.
ALIMENTO % ALIMENTO % ALIMENTO % ALIMENTO % ALIMENTO %
Levadura cerveza 94,7 Frijoles 18,9 Salvia 9,5 Cerdo 4,9 Manzana 1,6
Levadura panad. 94,4 Papaya 16,7 Clavo 9,3 Pimienta verde 4,7 Trucha 1,6
Huevo 77,6 Cebada 16,5 Papa blanca 9,3 Lenteja 4,5 Perca 1,4
Trigo 76,5 Melón 16,3 Té 9,3 Comino 4,1 Sandía 1,4
Leche vaca 71,4 Mostaza 16,3 Algarrobo 9,1 Espárragos 3,9 Semilla alcaravea 1,2
Arándano agrio 61,7 Nuez negra 16,0 Cacao / chocol. 9,1 Frijol mung 3,9 Garbanzo 1,2
Queso 59,3 Almeja 15,8 Orégano 9,1 Pavo 3,9 Bacalao 1,0
Avena 47,3 Amaranto 15,6 Maní 8,4 Camote 3,7 Malta 1,0
Piña 46,9 Ajo 14,8 Mijo 8,4 Espinacas 3,5 Nuez inglesa 1,0
Cambur 41,4 Vieiras 14,6 Nuez de Brasil 8,4 Pimentón dulce 3,5 Semilla eneldo 1,0
Leche de cabra 38,5 Apio 14,4 Quinoa 8,4 Fresa 3,3 Pimienta de Chile 0,8
Champig. / setas 36,4 Coliflor 14,4 Trigo sarraceno 8,2 Batata 3,1 Avellana 0,6
Alfalfa 35,8 Nuez moscada 14,2 Canela 7,8 Aceituna 2,9 Dátil 0,6
Ajonjolí 34,4 Arroz 13,8 Cangrejo 7,4 Menta 2,9 Frambuesa 0,6
Frijoles pinta 32,5 Azúcar, caña 13,8 Frijoles lima 6,8 Judías blancas 2,7 Tapioca 0,6
Tomate 31,3 Lechuga 13,8 Remolacha 6,4 Pollo 2,7 Arenque 0,4
Calabaza 30,2 Brócoli 13,6 Atún 6,2 Grosella 2,5 Laurel 0,4
Pimienta n/b 25,5 Limón 13,4 Perejil 6,2 Lenguado 2,5 Mora 0,4
Centeno 24,7 Col de Bruselas 12,8 Vainilla 6,0 Pargo 2,5 Pepino 0,4
Habichuelas 24,5 Lima 12,8 Carne de res 5,8 Platija 2,5 Pimienta Cayena 0,4
Rábano 24,5 Repollo / col 12,6 Girasol 5,8 Cordero 2,3 Mostaza de India 0,4
Frijol amarillo 23,3 Jengibre 12,3 Uva 5,6 Halibut (pez) 2,3 Calabaza amarilla 0,4
Cártamo 22,8 Toronja 12,3 Camarón 5,4 Timalo (pez) 2,3 Albaricoque 0,2
Frijol rojo 22,2 Naranja 12,1 Canola 5,4 Tomillo 2,3 Bagre 0,2
Almendra 21,6 Cereza 11,9 Pacana 5,4 Millo 2,1
Calabaza de
verano
0,2
Anacardo 21,0 Haba soja / soja 11,9 Zanahoria 5,4 Ciruela 1,8 Nabo 0,2
Chile molido 20,4 Mandarina 11,9 Langosta 5,3 Salmón 1,8 Pimiento 0,2
Maíz 20,0 Cebolla 11,3 Melocotón / dur. 5,3 Albahaca 1,6 Rábano picante 0,2
Café 19,3 Coco 10,9 Merluza 5,3 Caballa (pez) 1,6
Ostra 19,3 Berenjena 10,5 Aguacate 4,9 Calabacín 1,6
5N° 47, Año 2015
No obstante en la tabla nº4 se aprecian algunas diferencias
según el sexo de los pacientes. En el consolidado de todos
los años se encuentra que la piña, el queso y la leche (cabra
y vaca) generan sensibilidades alimentarias en mayor me-
dida en los pacientes femeninos (al menos 10% de diferen-
cia sobre pacientes masculinos), en tanto que la pimienta
negra genera más sensibilidades en los hombres.
Tabla nº 4. Alimentos con diferencias en las
sensibilidades por sexo
Alimentos
Destacados
Pacientes
Femeninos
Pacientes
Masculinos
Piña 48% 37%
Queso 58% 48%
Leche de vaca 70% 59%
Leche de cabra 39% 28%
Pimienta B/N 19% 30%
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
En el presente estudio se analizaron 514 casos de pacien-
tes de NutriWhite (63,4% femeninos y 36,6% masculinos)
que accedieron a realizar una prueba para determinar la
sensibilidad a los alimentos mediante reacciones inmuno-
lógicas IgG. Se observa que a la consulta de NutriWhite
acuden más personas del sexo femenino que masculino.
En las revisiones efectuadas no se encontraron diferencias
significativas por sexo en los alimentos que generaron
sensibilidad ni en el número de reacciones; observándo-
se que ambos sexos se comportan de manera similar. Los
siguientes resultados deben tomarse en cuenta al realizar
perfiles de alimentos y planes de alimentación:
Los alimentos que causaron sensibilidad con un porcen-
taje mayor al 90% son la levadura de cerveza y pan. En-
tre 78% y 70% se encuentran el huevo, el trigo y la leche
de vaca. Con un porcentaje aproximado del 60% se en-
cuentra el queso de vaca. Es importante destacar que los
alimentos que causaron sensibilidad en casi 60% de los
pacientes son muy comunes en la dieta del venezolano.
Llamó la atención la aparición del arándano agrio con un
porcentaje del 61,7%. Sería importante realizar futuras
investigaciones para conocer la razón de estos resultados.
En cuanto a los cereales, el trigo fue el que se encontró
con mayor porcentaje de sensibilidad en un 76,5% segui-
do por la avena en un 47,3%.
En los lácteos de distintas especies, se observa diferencia
entre la leche de vaca (71%) y la leche de cabra (38%),
indicando que ambas generan reacciones distintas.
De 18 frutas analizadas se observó que la mayoría, excepto
el cambur (41%) y la piña (46%) presentaron porcentajes de
sensibilidad menores al 26%. Estos resultados indican que
las frutas de diferentes familias causan diferentes reacciones.
De las leguminosas se notó que en su totalidad generaron
reacción en menos de 33% de los pacientes.
Por último, luego de realizar exploraciones descriptivas
a la sensibilidades mostradas por un grupo de pacientes
que asistió a la consulta mediante técnicas multivariantes
(Análisis Cluster, Análisis de Componentes Principales y
Análisis del Factor Inflacionario de la Varianza), surgen
pistas de que las sensibilidades a algunos alimentos po-
drían estar relacionadas. Entre los alimentos estudiados
se podrían distinguir los siguientes grupos:
1.	 ColesdeBruselas-Repollocol–Brócoli–Repollo–Coliflor
2.	 Almejas – Vieras – Ostras
3.	 Salmón – Trucha – Perca
4.	 Mandarina – Naranja -Toronja – Limón – Lima
5.	 Clavo–Orégano–Canela–Salvia–Jengibre-Nuezmoscada
6.	 Camarón – Langosta - Cangrejo
7.	 Frijol de cera – Habichuela
8.	 Mora - Pimienta de Chile
9.	 Leche de vaca – Queso de vaca
10.	Levadura de cerveza – Levadura de pan
Estos hallazgos resaltan que:
•	 Existe relación entre el alimentos que produce sensibi-
lidad y la familia a la que corresponde, como lo fue en
cítricos, levaduras, moluscos, crustáceos, coles, lácteos
de vaca, algunas leguminosas y peces de agua fría. Sin
embargo, las especies culinarias aparecen relaciona-
das, aunque taxonicamente no pertenezcan a la misma
familia, se encontró relación entre clavo – orégano –
canela – salvia – jengibre. A su vez, se observa que la
mora y la pimienta de Chile sin pertenecer a la misma
familia están relacionadas.
•	 Los lácteos de la misma especie, queso y leche de
vaca, producen reacciones de sensibilidad similares
entre sí pero distantes a los lácteos de otras especies
como los de cabra.
Por último, luego de analizar los resultados arrojados, este
trabajo podrá servir de apoyo y de referencia a personas y
profesionales de la salud, para que tomen en cuenta estos
alimentos al momento de hacer perfiles inmunológicos,
diagnósticos y seguir un plan de alimentación.
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Representante para Argentina:
artereal19@gmail.com
0221 156211573 La Plata
7N° 47, Año 2015
Estimados Mayo Clinic,
¿Qué hace la terapia con rayo de protones por los pacientes
que no haga la radioterapia estándar? ¿Cómo deciden los
médicos cuándo aplicar la terapia con rayo de protones?
La terapia con rayo de protones es un tipo de radiotera-
pia que se emplea en el tratamiento del cáncer. A dife-
rencia de la radioterapia estándar, cuyos rayos X viajan
hasta llegar al cuerpo de la persona, los protones van
al tumor, descargan la energía y se detienen. Eso sig-
nifica que la terapia con rayo de protones tiende a ser
más eficaz y ocasiona menos efectos secundarios que la
radioterapia estándar.
Los protones son partículas subatómicas que se combi-
nan con los neutrones para formar el núcleo del átomo,
alrededor del cual orbitan los electrones. La radiación
es la energía liberada desde los átomos, sea como ondas
electromagnéticas (rayos X o rayos gamma), o como di-
minutas partículas (electrones o protones). Durante más
de 20 años, la radiación ha servido para destruir a las cé-
lulas cancerosas.
Actualmente, la radioterapia estándar utiliza rayos X de
alta energía que se desplazan por el cuerpo, pero la te-
rapia con rayo de protones es diferente porque ese tra-
tamiento dirige los protones hacia el tumor, donde libe-
ran su energía. Los oncólogos radioterapeutas pueden
ajustar la energía de los protones para controlar cuán
profundo penetrarán y dónde liberarán la energía. La
regla es que mientras mayor sea la energía, más profun-
do penetrarán los protones.
La cantidad de energía que se libera a medida que el pro-
tón ingresa al cuerpo de una persona es muy baja y la ma-
yor parte se libera en los últimos milímetros del recorrido
del protón, lo que significa que la cantidad más grande de
radiación se libera directamente dentro del tumor.
Por ejemplo, en una persona con un tumor localizado
cerca de la parte posterior del pulmón, los rayos X es-
tándar se apuntarán hacia el tumor desde la espalda y se
desplazarán por todo el tumor hasta salir por delante de
éste, a través del pulmón y corazón normales. En cambio,
en la terapia con rayo de protones, pese a que igualmente
se apuntarán los protones hacia el cuerpo desde la espal-
da, éstos se detendrán en el tumor y llevarán la radiación
sólo hasta allí, sin que nada llegue al pulmón y corazón
ubicados delante.
Debido a que la terapia con rayo de protones no irra-
dia a muchos órganos sanos alrededor del tumor, es
menor la probabilidad de presentar efectos secunda-
rios y, de hacerlo, éstos son menos graves que con la
radioterapia estándar.
La terapia con rayo de protones también permite con-
trolar con más exactitud y precisión la energía de la ra-
diación. Eso significa que por lo general se puede au-
mentar sin peligro la cantidad de radiación liberada en
el tumor para posiblemente mejorar la eficacia del trata-
miento y disminuir la cantidad de sesiones necesarias al
administrar una dosis mayor en cada tratamiento. Eso
hace que el tratamiento sea más conveniente y menos
caro para el paciente.
La terapia con rayo de protones puede servir para mu-
chos tipos de tumores y es particularmente útil en el cán-
cer localizado cerca de órganos vitales que son sensibles
a los efectos de la radiación. Además, es muy adecuada
para tratar aquellos tumores localizados en las profundi-
dades del cuerpo, con los que es preciso reducir la dosis
de la radioterapia estándar debido a la preocupación de
ocasionar daños en órganos y tejidos sanos. De manera
particular, la terapia con rayo de protones suele consi-
derarse una buena alternativa para las personas adultas
con cáncer de cerebro, cabeza y cuello, esófago, mama,
hígado y pulmón.
La terapia con rayo de protones es ideal para los niños.
La radioterapia administrada a niños y jóvenes para cu-
rarlos puede décadas más tarde ocasionar cáncer, enfer-
medad cardíaca y otros problemas de salud crónicos. La
terapia con rayo de protones reduce el riesgo de sufrir
problemas de salud crónicos porque el cuerpo del niño se
expone a dosis menores de radiación, comparado frente a
la radioterapia estándar.
A pesar de las varias ventajas, es poco probable que la
terapia con rayo de protones reemplace completamente
a la radioterapia estándar, puesto que ésta suele ser
mejor alternativa para cánceres superficiales, como el
depiel.Laradioterapiaestándaresigualmentepreferida
en los ancianos que padecen otras enfermedades, así
como para tratar los síntomas relacionados con un
cáncer diseminado■
La terapia con rayo de protones produce menos
efectos secundarios que la radioterapia estándar
Información
Clínica Mayo
Jacksonville, Florida, USA
intl.mcj@mayo.edu
8 N° 47, Año 2015
Los trastornos músculo esqueléticos (ME) son altera-
ciones de músculos, tendones, nervios o articulaciones;
comprenden un grupo diverso de condiciones que, inde-
pendientemente de su fisiopatogenia, están relacionadas
entre sí porque comparten un mismo sustrato anatómico
(la unidad músculo-osteo-tendinosa) y una expresión
clínica característica que conjuga dolor y deterioro fun-
cional o discapacidad, pueden ocurrir en cualquier zona
del cuerpo, aunque las más comunes son las que afectan
el cuello, espalda y extremidades superiores e inferiores.
Las evidencias epidemiológicas disponibles indican que
los principales problemas dolorosos ME agudos, diag-
nosticados, ya sea en servicios de urgencias o de aten-
ción primaria, corresponden en orden de importancia a
la lumbalgia aguda, el dolor cervical, el hombro doloroso
y los dolores en ciertas articulaciones (en particular, ca-
dera, rodilla y tobillo).
IDENTIFICACIÓN DEL DOLOR
La valoración del dolor debe ser individualizada. Debido
al gran número de características intrínsecas y extrínse-
cas ligadas al dolor, su evaluación es a menudo difícil y
obliga a recurrir a diversas técnicas que engloban aspec-
tos verbales, conductuales y fisiológicos.
Al valorar el dolor debemos tener en cuenta tres aspectos:
1.	 LA SUBJETIVIDAD DEL DOLOR. Nadie mejor que
el propio paciente sabe si le duele y cuánto le duele.
La valoración por parte del paciente acerca de su pro-
pio dolor se ve muy influenciada por la dimensión
psicosociológica, que a su vez depende del nivel so-
ciológico, cultura y valores ético/religiosos, contexto
social y nivel individual, personalidad, cualificación
del dolor, tolerancia, aceptación, resonancias del pa-
ciente que dependen de su estado de ánimo, como
inquietud, exasperación, resignación, utilización,
desesperación, derivación.
2.	 LOS CAMBIOS EN LA INTENSIDAD DEL DO-
LOR. Los cambios en la intensidad del dolor a lo lar-
go del día siguen un patrón circadiano.
3.	 LA EXISTENCIA DE SINTOMATOLOGÍA ACOM-
PAÑA AL DOLOR. Ya sea como resultado de dis-
función, enfermedad sistémica o trauma (único o a
repetición), el dolor ME agudo traduce la lesión de
la unidad músculo-osteo-tendinosa y su componente
orgánico involucra una serie de eventos desencade-
nados por el daño tisular (resultante de un estímulo
lesivo de tipo mecánico, físico o químico), los cuales
comienzan con la liberación local de diversas sustan-
cias (bradicinina, leucotrienos, nociceptina, prosta-
noides, monofosfato cíclico de adenosina, sustancia P,
ATP) que, por una parte, desencadenan una reacción
inflamatoria y, por otra, estimulan los nociceptores
polimodales correspondientes a fibras de tipo A delta
(poco mielinizadas) y C (no mielinizadas); mientras
que los primeros responden preferencialmente a es-
tímulos mecánicos y térmicos, los segundos son más
sensibles a estímulos químicos y desarrollan su sensi-
bilidad mecánica en caso de lesión.
En los trastornos dolorosos ME (agudos, subagudos o
crónicos), el dolor y el espasmo muscular guardan una
estrecha relación; así, la lesión inicial suele provocar un
espasmo muscular reflejo que, además de su función pro-
tectora, genera isquemia de la fibra muscular y esta activa
los receptores nociceptivos de tipo C a la vez que indu-
ce la secreción de sustancias proinflamatorias (citocinas,
factores quimiotácticos, leucotrienos), se establece así un
círculo vicioso que mantiene y amplifica el fenómeno do-
loroso. La intervención oportuna dirigida a brindar una
analgesia apropiada y a romper el círculo dolor-espasmo
muscular es fundamental para prevenir los cambios mal
adaptativos debidos a la plasticidad neuronal y a la sen-
sibilización, que se traducen en la persistencia del dolor
ME y el desarrollo de síndromes dolorosos crónicos.
El tratamiento temprano de los trastornos dolorosos ME
es fundamental, ya que el control efectivo del dolor duran-
te la fase inicial de los cambios fisiopatológicos inducidos
por la lesión tisular, disminuye la discapacidad asociada,
favorece la recuperación funcional y el reintegro rápido
de los pacientes a sus actividades cotidianas, a la vez que
está asociado a una mejor evolución y previene la progre-
sión hacia un dolor crónico. Ello implica no solo brindar
una analgesia efectiva, sino eliminar, además, el espasmo
muscular que, a menudo, acompaña a las condiciones
dolorosas agudas, subagudas y crónicas originadas en las
estructuras de la unidad músculo-osteo-tendinosa pues la
contracción muscular refleja y la subsiguiente sobrecarga
de tensión pasiva en los tejidos del área afectada son los
principales factores exacerbadores del dolor y favorecen la
persistencia del mismo.
Actualmente los AINE y los agentes miorrelajantes con-
forman la piedra angular del tratamiento farmacológico
del dolor ME no complicado y su combinación brinda
una analgesia satisfactoria a la vez que permite aliviar
tanto el proceso inflamatorio resultante de la lesión tisu-
lar, como el espasmo muscular asociado, lo que se tradu-
ce en una recuperación funcional más rápida.
Como los AINE tradicionales están asociados con poten-
ciales efectos adversos, especialmente de índole gastroin-
testinal (GI) y dicha toxicidad puede verse potenciada
debido a la coadministración de diversos medicamentos,
Consideraciones acerca del tiocolchicósido
9N° 47, Año 2015
al momento de instaurar el esquema analgésico es impor-
tante tener en cuenta el perfil de seguridad GI de estos me-
dicamentos, así como los factores de riesgo del paciente.
Consideraciones similares deben aplicarse a los relajan-
tes musculares. Así, para el tratamiento del dolor ME
solo están indicados los miorrelajantes antiespasmódi-
cos no benzodiacepínicos y no los agentes antiespásticos
pues no hay suficientes evidencias favorables con estos
últimos, mientras que la utilidad clínica de los primeros
está limitada por las reacciones adversas que ocasionan,
en particular el vértigo y la sedación.
Como los estudios comparativos muestran que los dis-
tintos antiespasmódicos son equiparables en términos de
su eficacia para inducir la relajación muscular y aliviar el
dolor asociado, la selección del miorrelajante debe hacerse
basada en su perfil de tolerabilidad y efectos colaterales.
TIOCOLCHICÓSIDO
RELAJANTE MUSCULAR NO SEDANTE
Tiocolchicósido es un derivado semisintético sulfurado
del colchicósido, un glicósido natural obtenido del Colchi-
cum autunnale, y se diferencia de este último por la pre-
sencia de un grupo tiometil en sustitución de un grupo
metoxi. Tal como han evidenciado las investigaciones rea-
lizadas en animales de experimentación y seres humanos,
este fármaco, además de exhibir un potente efecto relajan-
te sobre el músculo estriado, tiene una notable actividad
antiinflamatoria y analgésica.
Tiocolchicósido está indicado para el manejo de los tras-
tornos dolorosos músculo esqueléticos no complicados,
de intensidad leve a moderada, en los que predomina el
componente muscular (evidenciado por espasmo, espas-
ticidad, puntos gatillo con un patrón de dolor referido,
incremento de la tensión muscular o disminución del
rango de movimiento). Por sus comprobadas propieda-
des analgésicas y antiinflamatorias, tiocolchicósido es una
alternativa satisfactoria al uso de AINE en pacientes con
dolor ME agudo que no toleran tales medicamentos o que
presentan factores de riesgo para el desarrollo de compli-
caciones (gastrointestinales o renales, por ejemplo) asocia-
das a la terapia con dichos agentes.
Aunque los mecanismos de acción de tiocolchicósido no
se conocen por completo y continúan siendo motivo de in-
vestigación, se ha demostrado que tanto el efecto miorrela-
jante como el analgésico obedecen a su actividad agonista
específica sobre los receptores GABA presinápticos, sobre
todo de tipo GABA-A, localizados en las neuronas de la
médula espinal. Así, mientras que la activación de tales re-
ceptores en las motoneuronas localizadas en las astas ante-
riores induce la relajación muscular, en las neuronas de los
núcleos de las astas posteriores interfiere con la transmi-
sión de los impulsos nociceptivos periféricos, al potenciar
la actividad de los circuitos inhibidores descendentes.
Algunos estudios experimentales sugieren que la actividad
miorrelajante no depende tan solo del efecto central (me-
dular) de tiocolchicósido, sino también parece obedecer a
una acción periférica directa sobre las células muscu-
lares estriadas, mientras que la analgesia obedece, ade-
más, a la interacción del medicamento con los recepto-
res para glicina.
Los estudios farmacocinéticos y farmacodinámicos efec-
tuados en individuos sanos demuestran que luego de la
administración oral, tiocolchicósido exhibe una rápida y
satisfactoria absorción GI, la cual comienza a nivel gás-
trico y no se altera en presencia de alimentos, de modo
que alcanza concentraciones plasmáticas máximas luego
de 0,5 a 1 hora (Tmax) y tiene una amplia distribución
tisular. El metabolismo es principalmente hepático y lle-
va a la producción de tres metabolitos, de los cuales solo
uno posee actividad biológica; la vida media de elimina-
ción plasmática es de 2 a 6 horas, como resultado de me-
canismos esencialmente extra renales, pues 16% a 20%
del fármaco es excretado en la orina y el resto (alrededor
de 82%) se elimina con las heces.
EVIDENCIAS CLÍNICAS
Los resultados de numerosos ensayos clínicos compa-
rativos, con placebo u otros miorrelajantes, han con-
firmado la eficacia de tiocolchicósido para el alivio del
dolor y el espasmo muscular en pacientes con diversos
trastornos ME, entre ellos dorsolumbalgia y dolor cer-
vical (incluyendo tortícolis), así como su seguridad fa-
vorable, ya que ocasiona mínimos efectos colaterales,
sobre todo de tipo gastrointestinal (dispepsia, pirosis,
diarrea), cuya incidencia en la mayoría de estudios es
similar a la registrada con placebo.
Las evidencias derivadas de estudios controlados e inves-
tigaciones en animales de experimentación indican que
tiocolchicósido exhibe una muy baja afinidad por los re-
ceptores gabaérgicos cerebrales de modo que no tiene ac-
ción sedante ni altera el desempeño psicomotor y por lo
tanto, brinda un perfil de seguridad superior al de los de-
más relajantes musculares. En pacientes con dorsolumbal-
gia aguda, la terapia con tiocolchicósido brinda un rápido
alivio del dolor, que precede a la mejoría del espasmo y la
movilidad, disminuye la utilización adicional de analgési-
cos y obtiene una evaluación satisfactoria por parte de la
mayoría de pacientes tratados, tal como han demostrado
diversos estudios controlados con placebo.
En comparación con relajantes musculares de acción
central y placebo, tiocolchicósido logró una mejoría
significativamente superior del dolor en reposo, aso-
ciada a un menor porcentaje de pacientes con postura
antálgica al finalizar el seguimiento (21%, 25% y 59%,
respectivamente); por otra parte, solo los pacientes
tratados con relajantes musculares de acción central
exhibieron un deterioro del desempeño en las pruebas
psicomotoras aplicadas. En otros estudios, la adición
de tiocolchicósido a la terapia estándar con analgési-
cos o AINE en pacientes con dolor lumbar agudo, no
solo resultó significativamente más efectiva que esta
última para lograr el alivio sintomático, sino que fue
bien tolerada.
10 N° 47, Año 2015
Para llegar a tal conclusión los autores determinaron
la severidad del dolor (mediante escala visual análoga)
en 372 pacientes, de los cuales 155 fueron tratados solo
con el esquema estándar, mientras que los restantes 174
recibieron, además de dicho régimen, tiocolchicósido
(en dosis de 8 mg, cada 12 horas); si bien al cabo de 7
días los pacientes de ambos grupos mejoraron, quienes
fueron tratados con terapia estándar + tiocolchicósido
exhibieron una mayor mejoría del dolor en reposo y la
discapacidad que se mantuvo y fue más notable luego
de tres semanas.
Para noviembre del año 2013, la Agencia reguladora de
medicamentos de Italia, la AIFA, recomendó restringir el
uso de tiocolchicósido por vía oral o inyectable, después
de conocer nuevos datos experimentales que indicaban
que el tiocolchicósido se descomponía en el organismo
formando un metabolito llamado M2 o SL59.0955, que
podría dañar a las células que se están dividiendo y pro-
vocar aneuploidía (alteración del número o de la disposi-
ción de los cromosomas, que es un factor de riesgo que
puede dañar al feto en desarrollo, reducir la fertilidad
masculina y, en teoría, podría aumentar el riesgo de cán-
cer). Por ello, la AIFA solicitó al el Comité de Medica-
mentos de Uso Humano (CHMP) de la Agencia Europea
de Medicamentos que examinara el perfil de seguridad
de este medicamento y que estimara la acción normativa
que fuera pertinente.
El CHMP revisó los datos, entre otros los peritajes de
expertos en el campo de la seguridad de los medica-
mentos, y concluyó que se podía producir aneuploidía
con M2 a niveles no muy superiores a los observados
con las dosis orales recomendadas de tiocolchicósido.
El CHMP, por tanto, recomendó que se tomaran me-
didas para garantizar que los medicamentos que con-
tienen tiocolchicósido se usaran de una forma lo más
segura posible. Entre estas medidas se incluye restrin-
gir la dosis y el número máximo de días de tratamien-
to cuando se administran por vía oral o por inyección.
También está contraindicado el uso durante el emba-
razo y la lactancia o en mujeres en edad fértil que no
utilizan anticonceptivos, así como en niños o para pato-
logías crónicas (a largo plazo). Las preparaciones para
aplicación local sobre la piel que no producen un nivel
importante de M2 en el organismo no se ven afectadas
por esta revisión.
El dictamen del CHMP se remitió a la Comisión Euro-
pea, que lo aprobó y adoptó una decisión definitiva jurí-
dicamente vinculante para toda la Unión Europea el 17
de enero de 2014.
CONCLUSIONES
El tratamiento temprano de los trastornos músculo es-
queléticos, es fundamental ya que el control efectivo del
dolor durante la fase inicial, disminuye la discapacidad
asociada, favorece la recuperación funcional y el reinte-
gro rápido de los pacientes a sus actividades cotidianas,
a la vez que previene la progresión hacia un problema
doloroso crónico, por lo que tiocolchicósido en dosis oral
máxima de 8 mg, cada 12 horas constituye una opción
adecuada para el tratamiento farmacológico, la duración
del tratamiento no debe ser superior a 7 días consecuti-
vos. Cuando se administra por vía intramuscular, la do-
sis máxima debe ser de 4 mg cada 12 horas, durante un
máximo de 5 días en adultos y adolescentes a partir de
los 16 años.
Frente a las opciones analgésicas y de relajación mus-
cular, tiocolchicósido se coloca en primer lugar, ya que
ocasiona mínimos efectos colaterales, sobre todo de tipo
gastrointestinal y renal. Para aquellos pacientes que se
encuentran cumpliendo con obligaciones laborales, con-
tar con un relajante muscular, analgésico que no compro-
meta la capacidad de reacción, los reflejos y el estado de
alerta se considera de gran ventaja. Tiocolchicósido por
su de acción no sedante, no altera el desempeño psico-
motor y por lo tanto, brinda un perfil de seguridad supe-
rior a los demás relajantes musculares, lo que disminuye
el ausentismo laboral.
Por su efecto de rápido alivio del dolor, que precede a la
mejoría del espasmo y la movilidad, disminuye la utiliza-
ción adicional de analgésicos. Los estudios demostraron
que tiocolchicósido ofrece una mayor eficacia, seguridad
y tolerabilidad, frente a otras alternativas cuando se trata
de patologías agudas, puesto que no está recomendado
para el tratamiento prolongado de patologías crónicas.
Por todo lo anterior constituye una opción adecuada
para el tratamiento farmacológico de diversas condicio-
nes traumáticas, ortopédicas y reumáticas, asociadas a
dolor y espasmo de la musculatura esquelética■
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Erika Bustillos Troccoli
Licenciada en medicina física y rehabilitación
Especialista en salud ocupacional
fisiosalud@gmail.com
Autora
12 N° 47, Año 2015
Estimados Mayo Clinic,
Estoy atravesando por la menopausia desde hace apro-
ximadamente un año y no he tenido muchos problemas,
aparte de lo que el médico diagnosticó como atrofia va-
ginal. ¿Pueden los productos de venta libre generalmente
aliviar los síntomas o necesito terapia hormonal?
Su experiencia es común y se calcula que casi 50 por ciento
de las mujeres a partir de la mediana edad pierden la lubri-
cación y la elasticidad en la zona vaginal (atrofia vaginal).
La terapia hormonal sistémica, sea en pastilla oral o parche
dérmico, no es el único tratamiento para la atrofia vaginal
relacionada con la menopausia, sino que existen otros tra-
tamientos específicos para la afección. De hecho, si usted
solamente presenta los síntomas vaginales propios de la
menopausia, sin sofocos ni sudores nocturnos, esas otras
terapias probablemente sean mejores alternativas.
La atrofia vaginal es producto del descenso en la produc-
ción de estrógenos. A medida que una mujer se aproxima
a la menopausia, la producción corporal de estrógenos
(principal hormona femenina) decae, mengua y termi-
na por disminuir de forma permanente. Dicha cantidad
menor de estrógeno puede adelgazar, secar, tornar menos
elásticos y hacer más frágiles a los tejidos vaginales. La
reducción de estrógeno y la atrofia vaginal también pue-
den presentarse a consecuencia de ciertos tratamientos
médicos, tales como la extirpación de ambos ovarios, la
radiación pélvica, la quimioterapia o el tratamiento hor-
monal para el cáncer de mama.
Enalgunasmujeres,laatrofiavaginaldebidaalamenopau-
sia puede empezar durante los años previos a la menopau-
sia; mientras que en otras, no se convierte en un problema
sino hasta después de varios años de menopausia. Por otro
lado, algunas mujeres nunca enfrentan este problema.
Las señales y síntomas de la atrofia vaginal generalmente
incluyen sequedad, inflamación, comezón, ardor, san-
grado y dolor durante las relaciones sexuales. La atrofia
vaginal también puede ser un factor de riesgo para vejiga
hiperactiva, incontinencia por estrés y repetidas infeccio-
nes vesicales. A diferencia de los sofocos y sudores noc-
turnos, que tienden a desaparecer por sí solos, la atrofia
vaginal puede empeorar sin un tratamiento. Cuando el
problema se deja sin tratar, los cambios ocurridos en el
tejido vaginal, tales como estrechez en la abertura, menor
elasticidad y sangrado con facilidad, pueden convertirse
en permanentes. El empeoramiento de la atrofia puede
conducir a evitar las relaciones sexuales, lo que a su vez
puede conducir a más atrofia.
Cuando los síntomas son leves, lo primero con lo que
se podría intentar son los humectantes y lubricantes
familiares de venta sin receta médica. Usar humectantes
vaginales cada pocos días sirve para mantener húmedos
a los tejidos vaginales y los lubricantes se aplican a
necesidad para mantener relaciones sexuales. Los
lubricantes vaginales ayudan a disminuir el dolor durante
la relación sexual y pueden aplicarse con la frecuencia que
sea necesaria durante el acto sexual. Si recurre a condones,
evite los lubricantes que no aparezcan mencionados como
seguros para usar con condones.
La actividad sexual regular en sí misma ayuda a man-
tener activo el flujo sanguíneo hacia la vagina y ayuda
a producir lubricación vaginal. La estimulación con un
dilatador o vibrador vaginal lubricado también ayuda a
mantener la salud vaginal y a prevenir o revertir el estre-
chamiento de la vagina.
Cuando las terapias no hormonales no bastan para ali-
viar los síntomas, el médico puede recomendar estró-
geno vaginal en crema, tableta o anillo. Todos estos tie-
nen una dosis de estrógeno mucho menor que la terapia
hormonal y, por lo tanto, limitan la exposición general
al estrógeno con los riesgos pertinentes. Las terapias de
estrógeno vaginal sirven para revertir los cambios del te-
jido vaginal porque restablecen el equilibrio normal del
pH vaginal, engrosan el tejido superficial, aumentan el
flujo sanguíneo y la lubricación. Pueden también reducir
los síntomas de infección de las vías urinarias y de vejiga
hiperactiva. Las terapias de estrógeno vaginal suelen fun-
Los tratamientos para la atrofia vaginal
pueden evitar complicaciones
13N° 47, Año 2015
cionar mejor que las terapias no hormonales, e incluso
que la terapia hormonal sistémica, cuando los síntomas
son entre moderados y graves.
La tableta oral de estrógeno se ofrece a las mujeres que
no desean usar productos vaginales, pero no está auto-
rizada para quienes padecen cáncer de mama o tienen
alto riesgo de presentarlo, ni para quienes padecen cán-
cer del útero.
No posponga buscar ayuda para la atrofia vaginal porque
existen tratamientos que pueden ayudarla a sentirse me-
jor y evitar complicaciones. Consulte con el médico para
determinar si alguno de ellos funcionaría bien en su caso.
(Adaptado de Mayo Clinic Health Letter)■
Información
Clínica Mayo
Jacksonville, Florida, USA
intl.mcj@mayo.edu

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Sensibilidad alimentos más frecuentes

  • 1. Resumen Es bien conocido por diversas investigaciones en el área de salud, que la sensibilidad alimentaria existe y se pre- senta con síntomas tanto intestinales como extraintesti- nales al consumir ciertos alimentos. Estos síntomas pue- den ser consecuencia de la reacción inmunológica tardía entre un alimento y la liberación de la IgG. La mayoría de los síntomas se pueden controlar siempre que se elimine el alimento al que se tiene sensibilidad. Para detectar la sensibilidad alimentaria se utilizan prue- bas de laboratorio con resultados específicos para cada paciente. Estas pruebas no son accesibles en todas las po- blaciones, por lo que se considera importante disponer de información histórica relativa a estas pruebas y dar a co- nocer los alimentos que afectan con mayor frecuencia a la población. Una de las pruebas más reconocidas la realiza el Laboratorio Immunolabs, usada para detectar reacciones inmunológicas tipo IgG, basada en el método ELISA. En el presente estudio Nutriwhite, un equipo de especia- listas en Inmuno Nutrición describió los resultados de 514 pacientes que asistieron a consulta y se realizaron la prueba de sensibilidad de alimentos entre los años 2007 - 2014. En los resultados descriptivos se evidenció: 1) El orden en que los 154 alimentos probados producen sensibilidad de mayor a menor porcentaje. 2) Los 5 alimentos que tienen mayor porcentaje de sen- sibilidad. Se evidenció que son alimentos comunes en la dieta venezolana: levaduras (cerveza, pan), trigo, huevo, leche y queso de vaca. 3) No existen diferencias significativas por sexo en la cantidad de alimentos ni en tipo de alimento a los que se es sensible Este trabajo podrá servir de apoyo y de re- ferencia a personas y profesionales de la salud, para que tomen en cuenta estos alimentos al momento de hacer perfiles inmunológicos, diagnósticos y seguir un plan de alimentación. Palabras clave: nutrición, sensibilidad alimentaria, in- munoglobulina IgG. INTRODUCCIÓN En los últimos años hemos presenciado un aumento en el porcentaje de personas que presentan síntomas tanto in- testinales (sensación de hinchazón, digestión pesada, es- treñimiento, diarrea, llagas en la boca, acidez), así como extra-intestinales: a nivel dermatológico (eczemas, urti- caria, dermatitis, acné), a nivel respiratorio (rinitis, tos, bronquitis, asma), a nivel de articulaciones (rigidez, do- lor) y generales (fibromialgia, cansancio, depresión, hi- peractividad, ansiedad, jaquecas, retención de líquidos) al ingerir ciertos alimentos. Estos síntomas pueden ser consecuencia de la reacción inmunológica tardía entre un alimento y la liberación de la IgG que produce sensi- bilidad alimentaria. La mayoría de las personas descono- ce que padecen de una sensibilidad alimentaria debido a que tienden a relacionar los síntomas con otras patolo- gías, así como por la falta de información en el tema. Se quiere concientizar a las personas, a través de esta in- vestigación, que la sensibilidad alimentaria existe y que sus síntomas se pueden controlar siempre y cuando se elimine el alimento al que se tiene sensibilidad. Existen pruebas de laboratorio específicas que permiten iden- tificar estos alimentos en cada paciente. Estas pruebas no son accesibles en todas las poblaciones por lo que se considera importante disponer de información histórica relativa a estas pruebas y dar a conocer los alimentos que afectan con mayor frecuencia a la población. Esta investigación realizada por Nutriwhite, un equipo de especialistas en Inmuno Nutrición, tiene como finali- dad determinar el orden en que los alimentos estudiados causaron reacción inmunológica tipo IgG en pacientes que acudieron a consulta durante el periodo 2007-2014. Con las evidencias descriptivas, este trabajo podrá ser- vir de apoyo y de referencia a personas y profesionales de la salud, para que tomen en cuenta estos alimentos al momento de hacer perfiles inmunológicos, diagnósticos y seguir un plan de alimentación. Estudio descriptivo de los resultados de los alimentos que causaron reacciones inmunológicas tipo IGG, medidos por el método ELISA en pacientes que asistieron a la consulta de Nutriwhite durante el periodo 2007 – 2014 Distribución por suscripción ISBN: PPI201402DC4571 WWW.BOTICA.COM.VE ISSN: 2443-4388 Edición número 47 / Año 2015
  • 2. 2 N° 47, Año 2015 MARCO TEÓRICO Es muy común que exista una confusión entre sensibili- dad, alergia o intolerancia alimentaria. Todos estos tér- minos son reacciones adversas inducidas por alimentos, y básicamente se diferencian en dos grandes grupos se- gún los mecanismos que las producen: 1. Otros mecanismos: Englobados con el término de intolerancia alimentaria dentro de la que se encuen- tran las alteraciones metabólicas, déficits enzimáti- cos, acción tóxica, etc. (Anderson y Song, 1984). 2. Inmunológicos: llamadas reacciones alérgicas y sensi- bilidades a los alimentos. Se diferencian en los procesos mediados por elevación de las inmunoglobulinas IgE (alergias) y los mediados por elevación de las IgG (sen- sibilidades alimentarias). (Anderson y Song, 1984). La sensibilidad alimentaria es una respuesta inmunoló- gica patológica mediada por la formación masiva de in- munocomplejos alimentarios IgG. La presencia de este inmunocomplejo a nivel vascular activa un proceso in- flamatorio responsable de los daños colaterales en los tejidos próximos a la reacción inmunológica (Janeway y col., 2001). Desde hace varios años, las investigaciones apuntan a re- lacionar la sensibilidad con manifestaciones clínicas en diferentes niveles, y demuestran que al eliminar los ali- mentos positivos, los síntomas desaparecían. (Atkinson y col., 2004) (Yang y Li, 2007), por ejemplo: 1. Digestivo: sensación de hinchazón, digestiones pesa- das, estreñimiento, diarreas, llagas en la boca, acidez, síndrome del intestino irritable. Un estudio demostró que el síndrome de intestino irritable (SII) y los anticuerpos IgG tienen relación y que al eliminar los alimentos positivos, los sínto- mas desaparecían. (Atkinson y col., 2004). De igual manera se ha evaluado la desaparición de la diarrea y el estreñimiento eliminando de la dieta aquellos alimentos con IgG positivos y se comprobó que más del 65% de los pacientes tuvieron mejoría (Yang y Li, 2007). Más recientemente un estudio acerca del SII acompañado de síntomas como la diarrea, demostró que la IgG está muy relacionada a este problema, ya que al eliminar los alimentos con IgG positivo du- rante 12 semanas, se notó que el dolor abdominal (hinchazón nivel y frecuencia), la frecuencia de dia- rrea, distensión abdominal, forma de heces, sensa- ción general de malestar y síntomas en general ha- bían mejorado (Guo y col., 2012). 2. Dermatológico: eczemas, urticaria, dermatitis, acné. 3. Respiratorio: rinitis, tos, bronquitis, asma. (Halpern y Scott, 1987) 4. Articulaciones: rigidez, dolor. 5. Generales: fibromialgia, cansancio, depresión, hipe- ractividad, ansiedad, jaquecas, retención de líquidos. 6. Muscular: tensión, dolor, fibromialgia, etc. 7. Neurológico: migrañas, cefaleas, hormigueo en las manos y pies, ataxia y cansancio incrementado sin motivo aparente. Se ha encontrado que las migrañas también están fuertemente relacionados con la IgG, ya que eliminando los alimentos positivos las migra- ñas desaparecían (Arroyave y col., 2007). 8. Psiquiátricos: aún no se ha podido confirmar por es- tudios controlados. Sin embargo, cada vez están más claras las implicaciones entre sistema inmunológico y el sistema nervioso, pudiendo describirse distintas actitudes consecuentes a la estimulación inmunoló- gica de distinta índole. El factor tiempo de exposi- ción al antígeno tiene también importancia en esta y otras manifestaciones (Crayton, 1986). Es importante destacar que a diferencia de la alergia, la sensibilidad puede pasar desapercibida si no se solicitan estudios de laboratorio, ya que su reacción es más tardía y varía de minutos, horas y días para su aparición (Her- nández, 2011). Es por esto, que las pruebas de laboratorio que miden IgG pueden ser un buen indicador de sensi- bilidad alimentaria, y en dado caso que no haya acceso a estas pruebas de laboratorio, la información histórica relativa a estas pruebas pueden dar a conocer también los alimentos que afectan con mayor frecuencia a la pobla- ción, de manera de utilizar esta información como apoyo en un plan nutricional. DESCRIPCIÓN DE NUTRIWHITE Y DEL LABORATORIO NutriWhite es un equipo de salud que busca mejorar la salud de sus pacientes a través de la Dieta 3R. Esta dieta especifica de Nutriwhite consiste en Remover los alimen- tos a los cuales el paciente presenta una reacción inmu- nológica adversa, Reponer con los nutrientes adecuados para lograr Recuperar la salud del paciente. Para atender los requerimientos de información respecto a la sensibilidad IgG de los pacientes, NutriWhite utiliza para este estudio, entre otras pruebas y por preferencia del paciente, las pruebas ofrecidas por Inmunolabs. Se trata de un laboratorio ubicado en EEUU , el cual fue seleccionado por garantizar 90% de reproductibilidad y 95% de sensibilidad y contar con una prueba denomina- da IgG BloodPrint, basada en el método ELISA (Enzy- me-Linked Immunosorbent Assay) y está diseñado para detectar anticuerpos circulantes de clase G (IgG), inmu- noglobulina específica de alimentos en el suero. El método ELISA se considera altamente sensible y específi- coparadeterminaranticuerposIgG,comounindicadorútil de las reacciones adversas a la alimentación y la intolerancia alimentaria (Volpi y Maccari, 2009). Es importante destacar que dicho laboratorio es inspec- cionado constantemente y cuenta con todas las licencias y permisos de Estados Unidos. A su vez, está aprobado por la Food & Drug Administration y es el único acre- ditado en EEUU por “College of American Pathologists proficiency testing”. Se deduce que los resultados obteni- dos en este estudio tienen alta confiabilidad.
  • 3. 3N° 47, Año 2015 DESCRIPCIÓN DEL PROCEDIMIENTO Y DE LOS DATOS A ANALIZAR A partir del 2007, el equipo NutriWhite inició la crea- ción de una base de datos en Microsoft Office Excel, con los pacientes que se atendían y que aceptaban realizar la prueba BloodPrint de Inmunolabs. A ningún paciente se le hizo seguimiento y se decidió hacer un corte en el año 2014 por considerarse que había una muestra importante de pacientes para efectuar el presente estudio. Para la realización de este trabajo se tomaron en cuenta aquellos pacientes que requerían y aceptaron la sugerencia de realizarse una prueba en EE.UU. Se escogió la prueba BloodPrint de Immunolabs que está diseñada para la detec- ción y cuantificación de IgG específica de 154 alimentos. Una vez aceptada la sugerencia de efectuar la prueba, el paciente procede a la extracción de sangre en un labo- ratorio de su escogencia, en unos tubos separadores de suero (4 ml), a primera hora del día. Por otra parte se le facilita a cada paciente las planillas requeridas para que las muestras puedan ser exportadas con todos los permisos legales necesarios que exige el gobierno venezolano para tal fin. El laboratorio la ana- liza y envía los resultados de la prueba a NutriWhite, tanto en formato físico como digital. Los resultados recibidos se vacían en una base de datos discriminada por año, identificando al paciente junto a sus resultados. Los resultados se registran en escala del 0 – 4 dependiendo de qué tan sensible es el paciente al alimento. Sin embargo, en el estudio no se tomó en cuenta la inten- sidad y se consideró únicamente si el paciente es sensible o no a cada alimento en particular. ANÁLISIS DESCRIPTIVO Para describir la información contenida en los resul- tados de la prueba, se realizó una recodificación de los resultados de la prueba, para determinar únicamente si el paciente presentó sensibilidad al alimento (valor 1) o no la presentó (valor 0). Procediéndose posteriormente a conteos de pacientes en base a la presencia de sensibili- dad a cada alimento, sin tomar en consideración el nivel de la misma en la escala descrita previamente 0 – 4. Se realizaron los análisis descriptivos según sexo para de- terminar la posible diferencia entre ambos sexo lo largo de los años. En la Tabla n° 1 se registra el número de pacientes aten- didos dentro de la población estudiada, discriminados por año y sexo. De un total de 514 pacientes, 327 fueron mujeres y 187 hombres. Los años que más pacientes aportaron al estudio fueron 2013 y 2014 (31% y 22% respectivamente), lo que suma más de la mitad. Los años 2010 y 2011 solo representan el 4% y 3% de los pacientes masculinos, además estos años fueron los que menos pacientes se realizaron la prueba. Tabla nº 1. Distribución absoluta de los pacientes incluidos en el estudio por año y sexo. Año nº Pacientes Femeninos nº Pacientes Masculinos Total 2007 34 10 44 2008 63 22 85 2009 12 26 38 2010 14 7 21 2011 12 5 17 2012 26 12 38 2013 100 60 160 2014 66 45 111 Total 327 187 514 En general para la totalidad de los pacientes, los femeni- nos representan el 64%, y los masculinos el 36%. Únicamente el año 2009 presentó mayor cantidad de pacientes masculinos que femeninos, en tanto que los demás años la relación fue de casi dos a uno a favor de pacientes femeninos (Gráfico n° 1). Para medir la sensibilidad general que cada uno de los 154 alimentos estudiados genera en los pacientes de Nu- triWhite, se consolidaron los datos de los años en una única tabla y se contó el número de pacientes que presen- taron sensibilidad a cada alimento. En la Tabla n° 2 se muestran las mediciones a la sensibilidad de los 148 alimentos que presentó al menos algún paciente con sensibilidad. Cabe destacar, que 6% de este grupo, no fueron reportados ya que no causaron sensibilidad. Con mayor porcentaje se presenta la levadura de cerveza (94,7%), correspondiente a 487 pacientes, y de segundo lugar encontramos la levadura de pan (94,4%) correspondiente a 485 pacientes que presentaron sensibilidad a este alimento. En el otro extremo de la tabla podemos observar que alimen- tos como rábano picante, pimienta, entre otros; apenas pro- dujeron sensibilidad 0,2% de los pacientes estudiados. 0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70% 80% 90% 100% 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 # Pacientes Femeninos # Pacientes Masculinos Gráfico nº 1. Distribución porcentual de pacientes según sexo por año.
  • 4. 4 N° 47, Año 2015 La tabla n° 2 demuestra que casi el 95% de los pacientes presenta reacción de sensibilidad a las levaduras (cerveza y pan). Con un 80% y 70% de los pacientes mostraron reacción al huevo, trigo y leche de vaca. Entre 69% y 50% de la muestra mostraron reacción al arándano y queso de vaca. Esto resultados arrojan que más de la mitad de los pacientes mostraron sensibilidad a las levaduras, huevo, trigo, leche de vaca, queso de vaca y arándano. Entre el 30% y el 49% de los pacientes mostraron reac- ción a la avena, piña, cambur, leche de cabra, champiño- nes, alfalfa, ajonjolí, frijoles pinta, tomate y calabaza. En la Tabla n° 3 se resume la descripción de los pacien- tes según el número de alimentos a los que presentaron sensibilidad en la prueba. Entre los pacientes femeninos más del 40% presentó reacción entre 11 y 20 alimentos y más del 35% presentó reacción entre 21 y 30 alimentos. En cuanto a los pacientes masculinos, se puede observar que más del 40% de la muestra presentaron reacción de 21 a 30 alimentos, en segundo lugar con más del 35% de 11 a 20 alimentos. Tabla nº 3. Distribución porcentual de pacientes según rango de reacciones de sensibilidad alimentaria. Número de Sensibilidades por Paciente % por Sexo 1 a 10 11 a 20 21 a 30 31 a 40 > a 40 Femeninos 15,0% 42,5% 35,5% 6,4% 0,6% Masculinos 13,4% 36,4% 41,2% 8,6% 0,5% En cuanto al número de reacciones de sensibilidad, para el sexo femenino se observó una media de 18,96 reacciones por paciente, con mínimo de 4 reacciones y casos extre- mos de 52 reacciones por paciente. En tanto que para los pacientes masculinos, la media resultó de 20,06 reacciones por paciente, con mínimo de 5 reacciones en un paciente y máximo 45 reacciones en otro paciente. No se reportan diferencias de sexo estadísticamente significativas. De esta tabla se puede concluir que casi el 80% de los pacientes (sin distinción de sexo) presentaron entre 11 y 30 reacciones de sensibilidad en la prueba. Si bien apa- rentemente los hombres tuvieron mayor número de re- acciones que las mujeres, la diferencia observada no es estadísticamente significativa para una prueba Chi-Cua- drado y no se puede asumir que hombres y mujeres tie- nen comportamientos diferentes. Tabla nº 2. Porcentaje de Sensibilidad en Pacientes por Alimento. ALIMENTO % ALIMENTO % ALIMENTO % ALIMENTO % ALIMENTO % Levadura cerveza 94,7 Frijoles 18,9 Salvia 9,5 Cerdo 4,9 Manzana 1,6 Levadura panad. 94,4 Papaya 16,7 Clavo 9,3 Pimienta verde 4,7 Trucha 1,6 Huevo 77,6 Cebada 16,5 Papa blanca 9,3 Lenteja 4,5 Perca 1,4 Trigo 76,5 Melón 16,3 Té 9,3 Comino 4,1 Sandía 1,4 Leche vaca 71,4 Mostaza 16,3 Algarrobo 9,1 Espárragos 3,9 Semilla alcaravea 1,2 Arándano agrio 61,7 Nuez negra 16,0 Cacao / chocol. 9,1 Frijol mung 3,9 Garbanzo 1,2 Queso 59,3 Almeja 15,8 Orégano 9,1 Pavo 3,9 Bacalao 1,0 Avena 47,3 Amaranto 15,6 Maní 8,4 Camote 3,7 Malta 1,0 Piña 46,9 Ajo 14,8 Mijo 8,4 Espinacas 3,5 Nuez inglesa 1,0 Cambur 41,4 Vieiras 14,6 Nuez de Brasil 8,4 Pimentón dulce 3,5 Semilla eneldo 1,0 Leche de cabra 38,5 Apio 14,4 Quinoa 8,4 Fresa 3,3 Pimienta de Chile 0,8 Champig. / setas 36,4 Coliflor 14,4 Trigo sarraceno 8,2 Batata 3,1 Avellana 0,6 Alfalfa 35,8 Nuez moscada 14,2 Canela 7,8 Aceituna 2,9 Dátil 0,6 Ajonjolí 34,4 Arroz 13,8 Cangrejo 7,4 Menta 2,9 Frambuesa 0,6 Frijoles pinta 32,5 Azúcar, caña 13,8 Frijoles lima 6,8 Judías blancas 2,7 Tapioca 0,6 Tomate 31,3 Lechuga 13,8 Remolacha 6,4 Pollo 2,7 Arenque 0,4 Calabaza 30,2 Brócoli 13,6 Atún 6,2 Grosella 2,5 Laurel 0,4 Pimienta n/b 25,5 Limón 13,4 Perejil 6,2 Lenguado 2,5 Mora 0,4 Centeno 24,7 Col de Bruselas 12,8 Vainilla 6,0 Pargo 2,5 Pepino 0,4 Habichuelas 24,5 Lima 12,8 Carne de res 5,8 Platija 2,5 Pimienta Cayena 0,4 Rábano 24,5 Repollo / col 12,6 Girasol 5,8 Cordero 2,3 Mostaza de India 0,4 Frijol amarillo 23,3 Jengibre 12,3 Uva 5,6 Halibut (pez) 2,3 Calabaza amarilla 0,4 Cártamo 22,8 Toronja 12,3 Camarón 5,4 Timalo (pez) 2,3 Albaricoque 0,2 Frijol rojo 22,2 Naranja 12,1 Canola 5,4 Tomillo 2,3 Bagre 0,2 Almendra 21,6 Cereza 11,9 Pacana 5,4 Millo 2,1 Calabaza de verano 0,2 Anacardo 21,0 Haba soja / soja 11,9 Zanahoria 5,4 Ciruela 1,8 Nabo 0,2 Chile molido 20,4 Mandarina 11,9 Langosta 5,3 Salmón 1,8 Pimiento 0,2 Maíz 20,0 Cebolla 11,3 Melocotón / dur. 5,3 Albahaca 1,6 Rábano picante 0,2 Café 19,3 Coco 10,9 Merluza 5,3 Caballa (pez) 1,6 Ostra 19,3 Berenjena 10,5 Aguacate 4,9 Calabacín 1,6
  • 5. 5N° 47, Año 2015 No obstante en la tabla nº4 se aprecian algunas diferencias según el sexo de los pacientes. En el consolidado de todos los años se encuentra que la piña, el queso y la leche (cabra y vaca) generan sensibilidades alimentarias en mayor me- dida en los pacientes femeninos (al menos 10% de diferen- cia sobre pacientes masculinos), en tanto que la pimienta negra genera más sensibilidades en los hombres. Tabla nº 4. Alimentos con diferencias en las sensibilidades por sexo Alimentos Destacados Pacientes Femeninos Pacientes Masculinos Piña 48% 37% Queso 58% 48% Leche de vaca 70% 59% Leche de cabra 39% 28% Pimienta B/N 19% 30% DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES En el presente estudio se analizaron 514 casos de pacien- tes de NutriWhite (63,4% femeninos y 36,6% masculinos) que accedieron a realizar una prueba para determinar la sensibilidad a los alimentos mediante reacciones inmuno- lógicas IgG. Se observa que a la consulta de NutriWhite acuden más personas del sexo femenino que masculino. En las revisiones efectuadas no se encontraron diferencias significativas por sexo en los alimentos que generaron sensibilidad ni en el número de reacciones; observándo- se que ambos sexos se comportan de manera similar. Los siguientes resultados deben tomarse en cuenta al realizar perfiles de alimentos y planes de alimentación: Los alimentos que causaron sensibilidad con un porcen- taje mayor al 90% son la levadura de cerveza y pan. En- tre 78% y 70% se encuentran el huevo, el trigo y la leche de vaca. Con un porcentaje aproximado del 60% se en- cuentra el queso de vaca. Es importante destacar que los alimentos que causaron sensibilidad en casi 60% de los pacientes son muy comunes en la dieta del venezolano. Llamó la atención la aparición del arándano agrio con un porcentaje del 61,7%. Sería importante realizar futuras investigaciones para conocer la razón de estos resultados. En cuanto a los cereales, el trigo fue el que se encontró con mayor porcentaje de sensibilidad en un 76,5% segui- do por la avena en un 47,3%. En los lácteos de distintas especies, se observa diferencia entre la leche de vaca (71%) y la leche de cabra (38%), indicando que ambas generan reacciones distintas. De 18 frutas analizadas se observó que la mayoría, excepto el cambur (41%) y la piña (46%) presentaron porcentajes de sensibilidad menores al 26%. Estos resultados indican que las frutas de diferentes familias causan diferentes reacciones. De las leguminosas se notó que en su totalidad generaron reacción en menos de 33% de los pacientes. Por último, luego de realizar exploraciones descriptivas a la sensibilidades mostradas por un grupo de pacientes que asistió a la consulta mediante técnicas multivariantes (Análisis Cluster, Análisis de Componentes Principales y Análisis del Factor Inflacionario de la Varianza), surgen pistas de que las sensibilidades a algunos alimentos po- drían estar relacionadas. Entre los alimentos estudiados se podrían distinguir los siguientes grupos: 1. ColesdeBruselas-Repollocol–Brócoli–Repollo–Coliflor 2. Almejas – Vieras – Ostras 3. Salmón – Trucha – Perca 4. Mandarina – Naranja -Toronja – Limón – Lima 5. Clavo–Orégano–Canela–Salvia–Jengibre-Nuezmoscada 6. Camarón – Langosta - Cangrejo 7. Frijol de cera – Habichuela 8. Mora - Pimienta de Chile 9. Leche de vaca – Queso de vaca 10. Levadura de cerveza – Levadura de pan Estos hallazgos resaltan que: • Existe relación entre el alimentos que produce sensibi- lidad y la familia a la que corresponde, como lo fue en cítricos, levaduras, moluscos, crustáceos, coles, lácteos de vaca, algunas leguminosas y peces de agua fría. Sin embargo, las especies culinarias aparecen relaciona- das, aunque taxonicamente no pertenezcan a la misma familia, se encontró relación entre clavo – orégano – canela – salvia – jengibre. A su vez, se observa que la mora y la pimienta de Chile sin pertenecer a la misma familia están relacionadas. • Los lácteos de la misma especie, queso y leche de vaca, producen reacciones de sensibilidad similares entre sí pero distantes a los lácteos de otras especies como los de cabra. Por último, luego de analizar los resultados arrojados, este trabajo podrá servir de apoyo y de referencia a personas y profesionales de la salud, para que tomen en cuenta estos alimentos al momento de hacer perfiles inmunológicos, diagnósticos y seguir un plan de alimentación. Referencias 1. Anderson J.A., Song D.D., ed. (1984). Adverse reac- tions to foods. American Academy of Allergy and In- munology. NIH Publication. 2442: 1-6. 2. Arroyave C.M., Echevarría M., Hernández H.L. (2007). Food allergy mediated by IgG antibodies associated with migraine in adults. Revista Alergia Mexico. Vol. 54, n° 5, pp. 162-168. 3. Atkinson W., Sheldon T.A., Shaath N., Whorwell P.J. (2004). Food elimination based on IgG antibodies in irritable bowel syndrome: a randomised controlled trial. Gut. Vol. 53 (10), pp. 1459-1464. 4. Barboza F. (2009). Aspectos clínicos de la alergia ali- mentaria. Revista GASTROHNUP. Vol. 11, no. 3, 2009.
  • 6. 6 N° 47, Año 2015 5. Hernández J. (2011). Guía para vivir sano en un mundo toxico. Editorial BIOS. 6. Crayton J.W. (1986). Adverse reactions to foods: rele- vance to psychiatric disorders. Journal of Allergy and Clinical Immunology. Vol. 78, n°1, pp. 243-250. 7. Guo H., Jiang T., Wang J., Chang Y., Guo H., Zhang, W. (2012). The value of eliminating foods according to food-specific immunoglobulin G antibodies in irritable bowel syndrome with diarrhoea. Journal of International Medical Research. Vol. 40, n° 1, pp. 204-210. 8. Halpern G.M., Scott J.R. (1987). Non-IgE mediated mechanisms in food allergy. Annals of Allergy; Vol. 58, n° 1, pp. 14-27. 9. Janeway C.A., Travers Jr.P., Walport M., Shlomchik, M.J. (2001). Immunobiology. 5ta ed. Garland Scien- ce,New York. 10. Volpi N., Maccari F. (2009). Serum IgG responses to food antigens in the italian population evaluated by highly sensitive and specific ELISA test. Journal of immunoassay and immunochemistry. VOl. 30, n° 1, pp. 51-69. 11. Yang C.M., Li Y.Q. (2007). The therapeutic effects of eliminating allergic foods according to food-specific IgG antibodies in irritable bowel syndrome. Zhon- ghua Nei Ke Za Zhi. Vol. 46, n° 8, pp. 641-643. Mercedes White, A. mercedes@nutriwhitedietas.com Autora Directora: Lic. Eva Godoy evagodoy@gmail.com Depósito legal: pp200702DC3285 Av. Andrés Bello con Av. Buenos Aires Edificio Kontiki PH, Los Caobos, Caracas, Venezuela 1050 Teléfono: 0212- 833 3770 godoyeditor@gmail.com Ediciones anteriores en: www.botica.com.ve Representante para Argentina: artereal19@gmail.com 0221 156211573 La Plata
  • 7. 7N° 47, Año 2015 Estimados Mayo Clinic, ¿Qué hace la terapia con rayo de protones por los pacientes que no haga la radioterapia estándar? ¿Cómo deciden los médicos cuándo aplicar la terapia con rayo de protones? La terapia con rayo de protones es un tipo de radiotera- pia que se emplea en el tratamiento del cáncer. A dife- rencia de la radioterapia estándar, cuyos rayos X viajan hasta llegar al cuerpo de la persona, los protones van al tumor, descargan la energía y se detienen. Eso sig- nifica que la terapia con rayo de protones tiende a ser más eficaz y ocasiona menos efectos secundarios que la radioterapia estándar. Los protones son partículas subatómicas que se combi- nan con los neutrones para formar el núcleo del átomo, alrededor del cual orbitan los electrones. La radiación es la energía liberada desde los átomos, sea como ondas electromagnéticas (rayos X o rayos gamma), o como di- minutas partículas (electrones o protones). Durante más de 20 años, la radiación ha servido para destruir a las cé- lulas cancerosas. Actualmente, la radioterapia estándar utiliza rayos X de alta energía que se desplazan por el cuerpo, pero la te- rapia con rayo de protones es diferente porque ese tra- tamiento dirige los protones hacia el tumor, donde libe- ran su energía. Los oncólogos radioterapeutas pueden ajustar la energía de los protones para controlar cuán profundo penetrarán y dónde liberarán la energía. La regla es que mientras mayor sea la energía, más profun- do penetrarán los protones. La cantidad de energía que se libera a medida que el pro- tón ingresa al cuerpo de una persona es muy baja y la ma- yor parte se libera en los últimos milímetros del recorrido del protón, lo que significa que la cantidad más grande de radiación se libera directamente dentro del tumor. Por ejemplo, en una persona con un tumor localizado cerca de la parte posterior del pulmón, los rayos X es- tándar se apuntarán hacia el tumor desde la espalda y se desplazarán por todo el tumor hasta salir por delante de éste, a través del pulmón y corazón normales. En cambio, en la terapia con rayo de protones, pese a que igualmente se apuntarán los protones hacia el cuerpo desde la espal- da, éstos se detendrán en el tumor y llevarán la radiación sólo hasta allí, sin que nada llegue al pulmón y corazón ubicados delante. Debido a que la terapia con rayo de protones no irra- dia a muchos órganos sanos alrededor del tumor, es menor la probabilidad de presentar efectos secunda- rios y, de hacerlo, éstos son menos graves que con la radioterapia estándar. La terapia con rayo de protones también permite con- trolar con más exactitud y precisión la energía de la ra- diación. Eso significa que por lo general se puede au- mentar sin peligro la cantidad de radiación liberada en el tumor para posiblemente mejorar la eficacia del trata- miento y disminuir la cantidad de sesiones necesarias al administrar una dosis mayor en cada tratamiento. Eso hace que el tratamiento sea más conveniente y menos caro para el paciente. La terapia con rayo de protones puede servir para mu- chos tipos de tumores y es particularmente útil en el cán- cer localizado cerca de órganos vitales que son sensibles a los efectos de la radiación. Además, es muy adecuada para tratar aquellos tumores localizados en las profundi- dades del cuerpo, con los que es preciso reducir la dosis de la radioterapia estándar debido a la preocupación de ocasionar daños en órganos y tejidos sanos. De manera particular, la terapia con rayo de protones suele consi- derarse una buena alternativa para las personas adultas con cáncer de cerebro, cabeza y cuello, esófago, mama, hígado y pulmón. La terapia con rayo de protones es ideal para los niños. La radioterapia administrada a niños y jóvenes para cu- rarlos puede décadas más tarde ocasionar cáncer, enfer- medad cardíaca y otros problemas de salud crónicos. La terapia con rayo de protones reduce el riesgo de sufrir problemas de salud crónicos porque el cuerpo del niño se expone a dosis menores de radiación, comparado frente a la radioterapia estándar. A pesar de las varias ventajas, es poco probable que la terapia con rayo de protones reemplace completamente a la radioterapia estándar, puesto que ésta suele ser mejor alternativa para cánceres superficiales, como el depiel.Laradioterapiaestándaresigualmentepreferida en los ancianos que padecen otras enfermedades, así como para tratar los síntomas relacionados con un cáncer diseminado■ La terapia con rayo de protones produce menos efectos secundarios que la radioterapia estándar Información Clínica Mayo Jacksonville, Florida, USA intl.mcj@mayo.edu
  • 8. 8 N° 47, Año 2015 Los trastornos músculo esqueléticos (ME) son altera- ciones de músculos, tendones, nervios o articulaciones; comprenden un grupo diverso de condiciones que, inde- pendientemente de su fisiopatogenia, están relacionadas entre sí porque comparten un mismo sustrato anatómico (la unidad músculo-osteo-tendinosa) y una expresión clínica característica que conjuga dolor y deterioro fun- cional o discapacidad, pueden ocurrir en cualquier zona del cuerpo, aunque las más comunes son las que afectan el cuello, espalda y extremidades superiores e inferiores. Las evidencias epidemiológicas disponibles indican que los principales problemas dolorosos ME agudos, diag- nosticados, ya sea en servicios de urgencias o de aten- ción primaria, corresponden en orden de importancia a la lumbalgia aguda, el dolor cervical, el hombro doloroso y los dolores en ciertas articulaciones (en particular, ca- dera, rodilla y tobillo). IDENTIFICACIÓN DEL DOLOR La valoración del dolor debe ser individualizada. Debido al gran número de características intrínsecas y extrínse- cas ligadas al dolor, su evaluación es a menudo difícil y obliga a recurrir a diversas técnicas que engloban aspec- tos verbales, conductuales y fisiológicos. Al valorar el dolor debemos tener en cuenta tres aspectos: 1. LA SUBJETIVIDAD DEL DOLOR. Nadie mejor que el propio paciente sabe si le duele y cuánto le duele. La valoración por parte del paciente acerca de su pro- pio dolor se ve muy influenciada por la dimensión psicosociológica, que a su vez depende del nivel so- ciológico, cultura y valores ético/religiosos, contexto social y nivel individual, personalidad, cualificación del dolor, tolerancia, aceptación, resonancias del pa- ciente que dependen de su estado de ánimo, como inquietud, exasperación, resignación, utilización, desesperación, derivación. 2. LOS CAMBIOS EN LA INTENSIDAD DEL DO- LOR. Los cambios en la intensidad del dolor a lo lar- go del día siguen un patrón circadiano. 3. LA EXISTENCIA DE SINTOMATOLOGÍA ACOM- PAÑA AL DOLOR. Ya sea como resultado de dis- función, enfermedad sistémica o trauma (único o a repetición), el dolor ME agudo traduce la lesión de la unidad músculo-osteo-tendinosa y su componente orgánico involucra una serie de eventos desencade- nados por el daño tisular (resultante de un estímulo lesivo de tipo mecánico, físico o químico), los cuales comienzan con la liberación local de diversas sustan- cias (bradicinina, leucotrienos, nociceptina, prosta- noides, monofosfato cíclico de adenosina, sustancia P, ATP) que, por una parte, desencadenan una reacción inflamatoria y, por otra, estimulan los nociceptores polimodales correspondientes a fibras de tipo A delta (poco mielinizadas) y C (no mielinizadas); mientras que los primeros responden preferencialmente a es- tímulos mecánicos y térmicos, los segundos son más sensibles a estímulos químicos y desarrollan su sensi- bilidad mecánica en caso de lesión. En los trastornos dolorosos ME (agudos, subagudos o crónicos), el dolor y el espasmo muscular guardan una estrecha relación; así, la lesión inicial suele provocar un espasmo muscular reflejo que, además de su función pro- tectora, genera isquemia de la fibra muscular y esta activa los receptores nociceptivos de tipo C a la vez que indu- ce la secreción de sustancias proinflamatorias (citocinas, factores quimiotácticos, leucotrienos), se establece así un círculo vicioso que mantiene y amplifica el fenómeno do- loroso. La intervención oportuna dirigida a brindar una analgesia apropiada y a romper el círculo dolor-espasmo muscular es fundamental para prevenir los cambios mal adaptativos debidos a la plasticidad neuronal y a la sen- sibilización, que se traducen en la persistencia del dolor ME y el desarrollo de síndromes dolorosos crónicos. El tratamiento temprano de los trastornos dolorosos ME es fundamental, ya que el control efectivo del dolor duran- te la fase inicial de los cambios fisiopatológicos inducidos por la lesión tisular, disminuye la discapacidad asociada, favorece la recuperación funcional y el reintegro rápido de los pacientes a sus actividades cotidianas, a la vez que está asociado a una mejor evolución y previene la progre- sión hacia un dolor crónico. Ello implica no solo brindar una analgesia efectiva, sino eliminar, además, el espasmo muscular que, a menudo, acompaña a las condiciones dolorosas agudas, subagudas y crónicas originadas en las estructuras de la unidad músculo-osteo-tendinosa pues la contracción muscular refleja y la subsiguiente sobrecarga de tensión pasiva en los tejidos del área afectada son los principales factores exacerbadores del dolor y favorecen la persistencia del mismo. Actualmente los AINE y los agentes miorrelajantes con- forman la piedra angular del tratamiento farmacológico del dolor ME no complicado y su combinación brinda una analgesia satisfactoria a la vez que permite aliviar tanto el proceso inflamatorio resultante de la lesión tisu- lar, como el espasmo muscular asociado, lo que se tradu- ce en una recuperación funcional más rápida. Como los AINE tradicionales están asociados con poten- ciales efectos adversos, especialmente de índole gastroin- testinal (GI) y dicha toxicidad puede verse potenciada debido a la coadministración de diversos medicamentos, Consideraciones acerca del tiocolchicósido
  • 9. 9N° 47, Año 2015 al momento de instaurar el esquema analgésico es impor- tante tener en cuenta el perfil de seguridad GI de estos me- dicamentos, así como los factores de riesgo del paciente. Consideraciones similares deben aplicarse a los relajan- tes musculares. Así, para el tratamiento del dolor ME solo están indicados los miorrelajantes antiespasmódi- cos no benzodiacepínicos y no los agentes antiespásticos pues no hay suficientes evidencias favorables con estos últimos, mientras que la utilidad clínica de los primeros está limitada por las reacciones adversas que ocasionan, en particular el vértigo y la sedación. Como los estudios comparativos muestran que los dis- tintos antiespasmódicos son equiparables en términos de su eficacia para inducir la relajación muscular y aliviar el dolor asociado, la selección del miorrelajante debe hacerse basada en su perfil de tolerabilidad y efectos colaterales. TIOCOLCHICÓSIDO RELAJANTE MUSCULAR NO SEDANTE Tiocolchicósido es un derivado semisintético sulfurado del colchicósido, un glicósido natural obtenido del Colchi- cum autunnale, y se diferencia de este último por la pre- sencia de un grupo tiometil en sustitución de un grupo metoxi. Tal como han evidenciado las investigaciones rea- lizadas en animales de experimentación y seres humanos, este fármaco, además de exhibir un potente efecto relajan- te sobre el músculo estriado, tiene una notable actividad antiinflamatoria y analgésica. Tiocolchicósido está indicado para el manejo de los tras- tornos dolorosos músculo esqueléticos no complicados, de intensidad leve a moderada, en los que predomina el componente muscular (evidenciado por espasmo, espas- ticidad, puntos gatillo con un patrón de dolor referido, incremento de la tensión muscular o disminución del rango de movimiento). Por sus comprobadas propieda- des analgésicas y antiinflamatorias, tiocolchicósido es una alternativa satisfactoria al uso de AINE en pacientes con dolor ME agudo que no toleran tales medicamentos o que presentan factores de riesgo para el desarrollo de compli- caciones (gastrointestinales o renales, por ejemplo) asocia- das a la terapia con dichos agentes. Aunque los mecanismos de acción de tiocolchicósido no se conocen por completo y continúan siendo motivo de in- vestigación, se ha demostrado que tanto el efecto miorrela- jante como el analgésico obedecen a su actividad agonista específica sobre los receptores GABA presinápticos, sobre todo de tipo GABA-A, localizados en las neuronas de la médula espinal. Así, mientras que la activación de tales re- ceptores en las motoneuronas localizadas en las astas ante- riores induce la relajación muscular, en las neuronas de los núcleos de las astas posteriores interfiere con la transmi- sión de los impulsos nociceptivos periféricos, al potenciar la actividad de los circuitos inhibidores descendentes. Algunos estudios experimentales sugieren que la actividad miorrelajante no depende tan solo del efecto central (me- dular) de tiocolchicósido, sino también parece obedecer a una acción periférica directa sobre las células muscu- lares estriadas, mientras que la analgesia obedece, ade- más, a la interacción del medicamento con los recepto- res para glicina. Los estudios farmacocinéticos y farmacodinámicos efec- tuados en individuos sanos demuestran que luego de la administración oral, tiocolchicósido exhibe una rápida y satisfactoria absorción GI, la cual comienza a nivel gás- trico y no se altera en presencia de alimentos, de modo que alcanza concentraciones plasmáticas máximas luego de 0,5 a 1 hora (Tmax) y tiene una amplia distribución tisular. El metabolismo es principalmente hepático y lle- va a la producción de tres metabolitos, de los cuales solo uno posee actividad biológica; la vida media de elimina- ción plasmática es de 2 a 6 horas, como resultado de me- canismos esencialmente extra renales, pues 16% a 20% del fármaco es excretado en la orina y el resto (alrededor de 82%) se elimina con las heces. EVIDENCIAS CLÍNICAS Los resultados de numerosos ensayos clínicos compa- rativos, con placebo u otros miorrelajantes, han con- firmado la eficacia de tiocolchicósido para el alivio del dolor y el espasmo muscular en pacientes con diversos trastornos ME, entre ellos dorsolumbalgia y dolor cer- vical (incluyendo tortícolis), así como su seguridad fa- vorable, ya que ocasiona mínimos efectos colaterales, sobre todo de tipo gastrointestinal (dispepsia, pirosis, diarrea), cuya incidencia en la mayoría de estudios es similar a la registrada con placebo. Las evidencias derivadas de estudios controlados e inves- tigaciones en animales de experimentación indican que tiocolchicósido exhibe una muy baja afinidad por los re- ceptores gabaérgicos cerebrales de modo que no tiene ac- ción sedante ni altera el desempeño psicomotor y por lo tanto, brinda un perfil de seguridad superior al de los de- más relajantes musculares. En pacientes con dorsolumbal- gia aguda, la terapia con tiocolchicósido brinda un rápido alivio del dolor, que precede a la mejoría del espasmo y la movilidad, disminuye la utilización adicional de analgési- cos y obtiene una evaluación satisfactoria por parte de la mayoría de pacientes tratados, tal como han demostrado diversos estudios controlados con placebo. En comparación con relajantes musculares de acción central y placebo, tiocolchicósido logró una mejoría significativamente superior del dolor en reposo, aso- ciada a un menor porcentaje de pacientes con postura antálgica al finalizar el seguimiento (21%, 25% y 59%, respectivamente); por otra parte, solo los pacientes tratados con relajantes musculares de acción central exhibieron un deterioro del desempeño en las pruebas psicomotoras aplicadas. En otros estudios, la adición de tiocolchicósido a la terapia estándar con analgési- cos o AINE en pacientes con dolor lumbar agudo, no solo resultó significativamente más efectiva que esta última para lograr el alivio sintomático, sino que fue bien tolerada.
  • 10. 10 N° 47, Año 2015 Para llegar a tal conclusión los autores determinaron la severidad del dolor (mediante escala visual análoga) en 372 pacientes, de los cuales 155 fueron tratados solo con el esquema estándar, mientras que los restantes 174 recibieron, además de dicho régimen, tiocolchicósido (en dosis de 8 mg, cada 12 horas); si bien al cabo de 7 días los pacientes de ambos grupos mejoraron, quienes fueron tratados con terapia estándar + tiocolchicósido exhibieron una mayor mejoría del dolor en reposo y la discapacidad que se mantuvo y fue más notable luego de tres semanas. Para noviembre del año 2013, la Agencia reguladora de medicamentos de Italia, la AIFA, recomendó restringir el uso de tiocolchicósido por vía oral o inyectable, después de conocer nuevos datos experimentales que indicaban que el tiocolchicósido se descomponía en el organismo formando un metabolito llamado M2 o SL59.0955, que podría dañar a las células que se están dividiendo y pro- vocar aneuploidía (alteración del número o de la disposi- ción de los cromosomas, que es un factor de riesgo que puede dañar al feto en desarrollo, reducir la fertilidad masculina y, en teoría, podría aumentar el riesgo de cán- cer). Por ello, la AIFA solicitó al el Comité de Medica- mentos de Uso Humano (CHMP) de la Agencia Europea de Medicamentos que examinara el perfil de seguridad de este medicamento y que estimara la acción normativa que fuera pertinente. El CHMP revisó los datos, entre otros los peritajes de expertos en el campo de la seguridad de los medica- mentos, y concluyó que se podía producir aneuploidía con M2 a niveles no muy superiores a los observados con las dosis orales recomendadas de tiocolchicósido. El CHMP, por tanto, recomendó que se tomaran me- didas para garantizar que los medicamentos que con- tienen tiocolchicósido se usaran de una forma lo más segura posible. Entre estas medidas se incluye restrin- gir la dosis y el número máximo de días de tratamien- to cuando se administran por vía oral o por inyección. También está contraindicado el uso durante el emba- razo y la lactancia o en mujeres en edad fértil que no utilizan anticonceptivos, así como en niños o para pato- logías crónicas (a largo plazo). Las preparaciones para aplicación local sobre la piel que no producen un nivel importante de M2 en el organismo no se ven afectadas por esta revisión. El dictamen del CHMP se remitió a la Comisión Euro- pea, que lo aprobó y adoptó una decisión definitiva jurí- dicamente vinculante para toda la Unión Europea el 17 de enero de 2014. CONCLUSIONES El tratamiento temprano de los trastornos músculo es- queléticos, es fundamental ya que el control efectivo del dolor durante la fase inicial, disminuye la discapacidad asociada, favorece la recuperación funcional y el reinte- gro rápido de los pacientes a sus actividades cotidianas, a la vez que previene la progresión hacia un problema doloroso crónico, por lo que tiocolchicósido en dosis oral máxima de 8 mg, cada 12 horas constituye una opción adecuada para el tratamiento farmacológico, la duración del tratamiento no debe ser superior a 7 días consecuti- vos. Cuando se administra por vía intramuscular, la do- sis máxima debe ser de 4 mg cada 12 horas, durante un máximo de 5 días en adultos y adolescentes a partir de los 16 años. Frente a las opciones analgésicas y de relajación mus- cular, tiocolchicósido se coloca en primer lugar, ya que ocasiona mínimos efectos colaterales, sobre todo de tipo gastrointestinal y renal. Para aquellos pacientes que se encuentran cumpliendo con obligaciones laborales, con- tar con un relajante muscular, analgésico que no compro- meta la capacidad de reacción, los reflejos y el estado de alerta se considera de gran ventaja. Tiocolchicósido por su de acción no sedante, no altera el desempeño psico- motor y por lo tanto, brinda un perfil de seguridad supe- rior a los demás relajantes musculares, lo que disminuye el ausentismo laboral. Por su efecto de rápido alivio del dolor, que precede a la mejoría del espasmo y la movilidad, disminuye la utiliza- ción adicional de analgésicos. Los estudios demostraron que tiocolchicósido ofrece una mayor eficacia, seguridad y tolerabilidad, frente a otras alternativas cuando se trata de patologías agudas, puesto que no está recomendado para el tratamiento prolongado de patologías crónicas. Por todo lo anterior constituye una opción adecuada para el tratamiento farmacológico de diversas condicio- nes traumáticas, ortopédicas y reumáticas, asociadas a dolor y espasmo de la musculatura esquelética■ Bibliografía 1. Gaieski DF, Mehta S, Hollander JE, et al. Low-severity músculoskeletal complaints evaluated in the emergency department. Clin Orthop Rehab Res 2008; 466: 1987-95. 2. Hunt RH, Choquette D, Caig BN, et al. Approach to ma- naging músculoskeletal pain. Can Fam Physician 2007; 53: 1177-84. 3. Foster NE, Hartvigsen J, Croft PR. Taking responsibility for the early assessment and treatment of patients with músculoskeletal pain: a review and critical analysis. Ar- thritis Res Ther 2012; 14(1): 205. 4. Picavet HS, Schouten JS. 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  • 11. 11N° 47, Año 2015 11. See S, Ginzburg R. Choosing a skeletal muscle relaxant. Am Fam Physician 2008; 78: 365-70. 12. Beebe FA, Barkin RL, Barkin S. A clinical and pharmaco- logic review of skeletal muscle relaxants for músculoskele- tal conditions. Am J Ther 2005; 12: 151-71. 13. Chou R, Hoyt-Huffman L. Medications for acute and chro- nic low back pain: a review of the evidence for an American Pain Society/American College of Physicians clinical Prac- tice Guideline. Ann Intern Med 2007; 147: 505-14. 14. Khwaja SM, Minnerop M, Singer AJ. Comparison of ibuprofen, cyclobenzaprine or both in patients with acu- te cervical strain: a randomized controlled trial. CJEM 2010; 12: 39-44. 15. Hernández-Díaz S, García Rodríguez LA. Cardioprotecti- ve aspirin users and their excess risk of upper gastrointes- tinal complications. BMC Medicine 2006; 4: 22-30. 16. Risser A, Donovan D, Heintzman J, Page T. NSAID pres- cribing precautions. Am Fam Physician 2009; 80: 1371-8. 17. 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Erika Bustillos Troccoli Licenciada en medicina física y rehabilitación Especialista en salud ocupacional fisiosalud@gmail.com Autora
  • 12. 12 N° 47, Año 2015 Estimados Mayo Clinic, Estoy atravesando por la menopausia desde hace apro- ximadamente un año y no he tenido muchos problemas, aparte de lo que el médico diagnosticó como atrofia va- ginal. ¿Pueden los productos de venta libre generalmente aliviar los síntomas o necesito terapia hormonal? Su experiencia es común y se calcula que casi 50 por ciento de las mujeres a partir de la mediana edad pierden la lubri- cación y la elasticidad en la zona vaginal (atrofia vaginal). La terapia hormonal sistémica, sea en pastilla oral o parche dérmico, no es el único tratamiento para la atrofia vaginal relacionada con la menopausia, sino que existen otros tra- tamientos específicos para la afección. De hecho, si usted solamente presenta los síntomas vaginales propios de la menopausia, sin sofocos ni sudores nocturnos, esas otras terapias probablemente sean mejores alternativas. La atrofia vaginal es producto del descenso en la produc- ción de estrógenos. A medida que una mujer se aproxima a la menopausia, la producción corporal de estrógenos (principal hormona femenina) decae, mengua y termi- na por disminuir de forma permanente. Dicha cantidad menor de estrógeno puede adelgazar, secar, tornar menos elásticos y hacer más frágiles a los tejidos vaginales. La reducción de estrógeno y la atrofia vaginal también pue- den presentarse a consecuencia de ciertos tratamientos médicos, tales como la extirpación de ambos ovarios, la radiación pélvica, la quimioterapia o el tratamiento hor- monal para el cáncer de mama. Enalgunasmujeres,laatrofiavaginaldebidaalamenopau- sia puede empezar durante los años previos a la menopau- sia; mientras que en otras, no se convierte en un problema sino hasta después de varios años de menopausia. Por otro lado, algunas mujeres nunca enfrentan este problema. Las señales y síntomas de la atrofia vaginal generalmente incluyen sequedad, inflamación, comezón, ardor, san- grado y dolor durante las relaciones sexuales. La atrofia vaginal también puede ser un factor de riesgo para vejiga hiperactiva, incontinencia por estrés y repetidas infeccio- nes vesicales. A diferencia de los sofocos y sudores noc- turnos, que tienden a desaparecer por sí solos, la atrofia vaginal puede empeorar sin un tratamiento. Cuando el problema se deja sin tratar, los cambios ocurridos en el tejido vaginal, tales como estrechez en la abertura, menor elasticidad y sangrado con facilidad, pueden convertirse en permanentes. El empeoramiento de la atrofia puede conducir a evitar las relaciones sexuales, lo que a su vez puede conducir a más atrofia. Cuando los síntomas son leves, lo primero con lo que se podría intentar son los humectantes y lubricantes familiares de venta sin receta médica. Usar humectantes vaginales cada pocos días sirve para mantener húmedos a los tejidos vaginales y los lubricantes se aplican a necesidad para mantener relaciones sexuales. Los lubricantes vaginales ayudan a disminuir el dolor durante la relación sexual y pueden aplicarse con la frecuencia que sea necesaria durante el acto sexual. Si recurre a condones, evite los lubricantes que no aparezcan mencionados como seguros para usar con condones. La actividad sexual regular en sí misma ayuda a man- tener activo el flujo sanguíneo hacia la vagina y ayuda a producir lubricación vaginal. La estimulación con un dilatador o vibrador vaginal lubricado también ayuda a mantener la salud vaginal y a prevenir o revertir el estre- chamiento de la vagina. Cuando las terapias no hormonales no bastan para ali- viar los síntomas, el médico puede recomendar estró- geno vaginal en crema, tableta o anillo. Todos estos tie- nen una dosis de estrógeno mucho menor que la terapia hormonal y, por lo tanto, limitan la exposición general al estrógeno con los riesgos pertinentes. Las terapias de estrógeno vaginal sirven para revertir los cambios del te- jido vaginal porque restablecen el equilibrio normal del pH vaginal, engrosan el tejido superficial, aumentan el flujo sanguíneo y la lubricación. Pueden también reducir los síntomas de infección de las vías urinarias y de vejiga hiperactiva. Las terapias de estrógeno vaginal suelen fun- Los tratamientos para la atrofia vaginal pueden evitar complicaciones
  • 13. 13N° 47, Año 2015 cionar mejor que las terapias no hormonales, e incluso que la terapia hormonal sistémica, cuando los síntomas son entre moderados y graves. La tableta oral de estrógeno se ofrece a las mujeres que no desean usar productos vaginales, pero no está auto- rizada para quienes padecen cáncer de mama o tienen alto riesgo de presentarlo, ni para quienes padecen cán- cer del útero. No posponga buscar ayuda para la atrofia vaginal porque existen tratamientos que pueden ayudarla a sentirse me- jor y evitar complicaciones. Consulte con el médico para determinar si alguno de ellos funcionaría bien en su caso. (Adaptado de Mayo Clinic Health Letter)■ Información Clínica Mayo Jacksonville, Florida, USA intl.mcj@mayo.edu