Thomas Hobbes argumenta que en el estado de naturaleza anterior a la organización social, la vida humana era "solitaria, pobre, brutal y breve" debido a la "guerra de todos contra todos". Para escapar de esta situación, los hombres acuerdan ceder sus derechos y poder a un Estado absoluto a través de un pacto social, a cambio de paz y protección. Este Estado soberano concentra todo el poder político y religioso.

1. THOMAS HOBBES:
Filosofía Política de
El poder absoluto Representada en obra
(Absolutismo regio) LEVIATÁN, 1651

2. Los hombres son iguales por naturaleza
Mantienen esa Igualdad con la esperanza
de conseguir sus fines
Parte de
Cada hombre quiere disfrutar de todos los
ESTADO DE NATURALEZA
bienes
El hombre se convierte en un ser ávido
de poder
Su visión del estado de
naturaleza anterior a la
organización social es la Todo esto causa que
"guerra de todos contra
todos", la vida en ese
estado es solitaria, pobre,
brutal y breve. Habla del Cuando los hombres quieren lo mismo, surja la
derecho de naturaleza, enemistad
como la libertad de utilizar
el poder que cada uno Cada hombre quiere esclavizar y someter al
tiene para garantizar la otro
auto conservación.
Estado de guerra: Homo, homini lupus

3. PACTO SOCIAL
Para salir de la situación de guerra de todos contra todos que se da en
el estado natural, dónde se impone la ley del más fuerte, la razón
sugiere los artículos de PAZ a través de un PACTO O CONTRATO SOCIAL
Que todos observen y respeten dicho acuerdo
Renunciar a los propios derechos en favor de un
poder absoluto sobre todos
Que significa y tiene
como consecuencias El poder es transferido al Estado, a cambio de paz
que y protección
El Estado detenta todo el poder, incluso sobre la
Iglesia
Con el fin de lograr su seguridad y superar el peligro que el estado de
naturaleza implica, los individuos ceden sus derechos en favor de un
tercero, surgido de este contrato: el Estado o la República (también
llamado "Leviatán"). Para que este acto tenga sentido, la sesión de
derechos al Estado debe ser definitiva. Los derechos no pueden ser
recuperados. El Estado es, por lo tanto, omnipotente. Este Estado
soberano es la fuente única del derecho, la moral y la religión.