La ISO 9000/2015 se ha reestructurado para estar alineada con las nuevas directrices. Establece tres principios clave: 1) Enfoque en el cliente para satisfacer y superar sus expectativas, 2) Liderazgo para establecer condiciones que permitan alcanzar los objetivos de la organización, y 3) Compromiso del personal a través de la participación de todos los niveles y el desarrollo de habilidades para mejorar la capacidad de la organización.