La ira es una emoción primaria que surge cuando un organismo se ve bloqueado en la consecución de una meta o necesidad. Provoca cambios fisiológicos como el aumento de la adrenalina, la presión arterial y el ritmo cardíaco. Se asocia con rasgos como la inseguridad, baja autoestima e impaciencia. La expresión de la ira de forma desadaptativa puede crear un ambiente de temor y perjudicar las relaciones sociales. El cerebro y las hormonas como la serotonina juegan un papel en la regulación