1) El documento describe varias intervenciones para el tratamiento del shock refractario, incluyendo el uso de línea arterial femoral, metas de presión arterial más bajas, reemplazo de albúmina e hidrocortisona, disminución de la sedación, reemplazo de tiamina y vitamina C, terapia antimicrobiana adjunta con clindamicina, inmunoglobulina intravenosa, levosimendan, epoprostenol y heparina, terapia de reemplazo renal temprana, y soporte extracorpóreo.