Este documento describe el caso de una mujer de 68 años que sufrió una caída por las escaleras y fue llevada de urgencia al hospital. Inicialmente se diagnosticó con un esguince de tobillo, pero después de varias semanas de tratamiento que incluyeron inmovilización, analgésicos y fisioterapia, se determinó que en realidad tenía una fractura no complicada de peroné.