Este documento describe el caso de un paciente de 42 años que acudió a urgencias con fiebre y disnea. Tras varias pruebas complementarias, se diagnosticó una pericarditis purulenta con taponamiento pericárdico y posteriormente una pericarditis constrictiva. El paciente requirió drenaje pericárdico quirúrgico y tratamiento antibiótico prolongado.