Este documento describe tres opciones para resolver disputas: la negociación, la mediación y el arbitraje. La negociación es la mejor opción porque las partes pueden llegar a un acuerdo mutuamente beneficioso sin recurrir a medidas legales. La mediación involucra a una tercera parte imparcial que ayuda a las partes a comunicarse y llegar a un acuerdo. Si la negociación y la mediación fallan, el arbitraje implica que una persona externa tome una decisión final que puede favorecer a una parte sobre la otra.